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El cambote de carajitas (excepto Yunjin y Kazuha que sabrá Cristo en qué parte del estado se encontraban) estaban en La Guaira, específicamente en Carayaca en la finca de los abuelos de Eunchae.

Todas estaban sentadas en un monte ahí todo loco que los abuelos de Eunchae habían acondicionado para ella y las personas que fueran con la carajita.

— Teníamos que jode tiempo sin venir para acá oyó. Desde antes del cambio de camisa de Eunchae yo no vengo - mencionó Chaewon luego de haberse matado a coñazos (en sentido figurado, no literalmente) con Danielle y dejar el lugar en silencio cuando le dijo que por lo menos a ella ningún chamo de la metropolitana le había montado cachos.

Coño Chaewon, tai pasa' de abusadora.

- ¿Que nada, loca? Si vinimos cuando me mandaron los resultados la católica.

En efecto, Eunchae ya había terminado el liceo y había hecho el exámen de admisión de la católica. No sabía en que se estaba metiendo, pobre carajita.

— Claro que no, cabeza de huevo. Viniste conmigo y con Kazuha porque querías que conociéramos a tus abuelos - cállate Sakura, mira que Chaewon siempre está rifando coñazos y tú ganas todos los números.

Chaewon, Sakura y Eunchae siguieron hablando paja mientras las demás las veían hasta que escucharon tremendo grito viniendo del otro extremo del matorral.

— ¡Eunchae, María Leonzia se pasó pal' terreno de al lao'! ¡Anda pa' la casa de Rodríguez y dile que me pase a mi vaca!

Eunchae mas rápida que volando salió corriendo a la salida de la finca cuando escuchó que María Leonzia, la vaca que tenía 11 años en la finca y que ella había visto crecer, se había ido al terreno de los vecinos de su abuelo.

— Coñazo, ¿quien es María Leonzia? - nojoda Hyein, avispate.

Eunchae salió de la finca y se echó su buena caminata de aproximadamente 7 minutos hasta la finca de los vecinos. Le explicó al guardia la situación y el señor como había trabajado con los abuelos de Eunchae y conocía a María Leonzia, la dejó entrar sin problemas.

La carajita entró directo hasta la puerta de la casa y la tocó. Unos minutos después salió una carajita más alta que ella, castaña y con tremenda cara de culo y de sueño.

— ¡Hola! Soy Eunchae, ¡Un gusto conocerte! Mi vaca se metió al terreno de los caballos del señor Rodríguez y mi abuelo me mandó a decir que si podrían pasarla al otro terreno. - la carajita, abrumada de tanta información y la rapidez con la que la guaireña hablaba, solo se le quedó viendo durante algunos segundos, se rascó la nuca y salió de la casa.

Caminaron un rato hasta el terreno de los caballos, dónde la carajita desconocida y potencialmente amargada entró, agarro a María Leonzia y se la pasó al señor González que esperaba paciente desde el otro lado.

— ¿Eres nueva aquí? Es la primera vez que te veo - Eunchae, como tremenda curiosa que es (para no decir metiche) rompió el silencio que había entre ella y la otra chamita. No hacia más que ver hacia el piso con una leve sonrisa en la cara mientras seguía a la caraja.

— La verdad, no. Solía venir mucho con mi mamá hace unos años, pero cuando entré a la universidad dejé de venir, estoy aquí gracias a mis vacaciones. ¿Y tú? En el mes que tengo aquí nunca te había visto. Me llamo Garam, un gusto.

La carajita castaña le estiró la mano y Eunchae la aceptó, ahora sí, presentandose formalmente. Pero la guaireña sintió un no sé qué extraño cuando la estrechó.

— Desde hace unos cuantos años solo vengo unas cuatro veces anuales. Antes venía tres veces al mes con mi hermana, pero desde que me mudé a Caracas casi no puedo venir.

Siguieron hablando de sus vidas durante aproximadamente media hora. Eunchae se enteró que la castaña estudiaba también en la católica, que era hija única de un divorcio, que era del Junquito pero vivía en Caracas por la universidad y que está haciendo el segundo semestre de Ingeniería Automotriz. También Garam se enteró de que Eunchae comenzaría pronto la universidad, sobre su historia familiar entera y sobre porque vive con una maracucha y una gocha desde hace cuatro años.

Eunchae se vió obligada a irse cuando Hanni la llamó diciéndole que su hermana estaba por llegar a la finca y que debía estar ahí cuánto antes. Obviamente le había pedido su número de teléfono porque tal vez, solo tal vez, a Eunchae le había llamado la atención esa chama.

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hola homosexuales, tenía tiempo sin actualizar. me pareció chévere poner a Garam como interés amoroso de Eunchae así q lo hice. si no te gusta, borra mi libro de tu biblioteca y ya. chao homosexuales

toyotontas ;; lesserafim Donde viven las historias. Descúbrelo ahora