Las amistades nacidas bajo la adversidad son las más duraderas, aquellas que son para toda la vida y las que nada ni nadie las podría romper.
Ese fue el pensamiento de Tengen Uzui tras conocer al que sería su mejor amigo tras la tragedia que azotó...
Y por nosotros me refiero a mi fiel compañero y a mi.
Son momentos tranquilos a solo un par de días de los resultados de nuestros trabajos y las vacaciones.
Aunque si me preguntáis a mi, yo ya estoy de vacaciones.
El único motivo por el que no estábamos libres del todo los mortales del Niigata Sangyo, es porque estamos en época de recuperaciones.
Todos esos pardillos que le ha quedado asignaturas ,o han tenido la idea suicida de abandonar una asignatura a propósito para sacar más nota en las demás, y en las recuperaciones antes de verano matarse a estudiar la que dejaron pendiente.
Estaban todos aquí reunidos.
Ellos y nosotros.
Sí , nosotros también.
Seguro que os preguntáis y hasta extrañáis por saber porque un genio como yo tiene que estar con la rubia en la universidad durante la etapa de las recuperaciones.
Y aquí estoy yo para consolaros.
Pues resulta que Rengoku conoce a un pardillo de esos que he mencionado.
Más bien a una pardilla.
Como mi mejor amigo es todo un caballero se había ofrecido a ayudar a esta pobre alma en desgracia , y como yo también tengo un corazón que no me cabe en el pecho, pues también he venido como apoyo sorpresa.
Habían quedado de verse en la biblioteca más grande de la universidad ; El Galileo.
Ese edificio tranquilamente podía ser una cárcel.
Su diseño es lo mas horrible y menos extravagante que he visto nunca como futuro arquitecto.
Son tres plantas de paredes blancas con una gran circunferencia en medio y con miles de salas siguiendo la forma del circulo.
Incluso la gente ajena a la universidad puede entrar si necesita un sitio donde estudiar o morirte del asco.
Solo que no te olvides que a los doce se cierra todo.
Hasta las rejas que permiten el acceso a la universidad, tanto la puerta para los coches como para los que venimos a pie.
Por lo que hay que tener cuidado para no quedarse encerrado ¿Verdad?
Dejé que Kyo se adelantara en lo que yo iba por un café y para dejar que los tortolitos tuvieran un encuentro intimo.
Como os dije soy todo amor y comprensión.
Teníais que ver la carita de bobos que pusieron cuando se vieron.
Hasta que ella me vio a mi.
Como supondréis ya por mi arrebatador encanto, a mi siempre me han mirado de varias maneras.
Con amor.
Con deseo.
Con admiración.
Hasta con envidia.
Y no les culpo, enserio.
Solo hay que verme.
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