Capítulo 2. Corre, corre

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El joven echó a correr entre los árboles, sin saber muy bien por dónde ir. El parque estaba bastante oscuro. Por algún motivo no había farolas y tampoco había nadie a quien pedir ayuda. Se escondió aterrorizado detrás de unos arbustos, esperando que él no lo encontrara. ¿Por qué había aceptado ese trabajo, si no le daba buena espina? Su abuela le decía que se fiara de su intuición, pero necesitaba el dinero y ahora estaba en problemas.

Escuchó un ruido a su izquierda y aguantó la respiración todo lo que pudo hasta que el ruido cesó. Parecía que se había ido. Esperó dos minutos más. Él nunca podría con el tipo, debido a su delgadez, así que había optado por huir.

Se levantó despacio y salió de su escondite mirando a todas partes. Menos mal, no había nadie.

Comenzó a caminar hacia la salida del parque y ya casi estaba en la calle principal, donde sí había luz, cuando un fuerte golpe en la cabeza lo tiró al suelo.

Se dio cuenta de que eran sus últimos instantes en la vida así que formó una letra con sus dedos y esperó el golpe final.

Alma se despertó gritando y Salem saltó de la cama al suelo maullando. Ella se agarró el corazón que palpitaba desbocado. Se volvió hacia el gato, como si pudiera entenderla.

—Salem, he visto un asesinato, o eso creo.

Estaba sudorosa y pálida. Salió de la cama y abrió el ordenador. Siempre que tenía una visión así la colgaba en su chat, por si servía. No iba a colaborar con la policía ni con nadie porque no confiaba en ellos, no tras aquello. Pero tampoco quería dejar el hecho sin comunicar. Así que su vecino, que solía entrar en la Deep web para pequeños trapicheos, le había preparado un lugar indetectable y nadie, ni policías ni periodistas podrían averiguar quién era.

Se metió en su servidor y abrió el canal del chat. Describió casi todo lo que había visto y escuchado y cerró el ordenador. Las cuatro menos cuarto de la mañana. Una hora en la que las almas hacían el tránsito hacia el siguiente lugar, y desde la que normalmente ya dejaba de dormir. Había demasiada energía rondándola, así que desistió.

Se dio una ducha y desayunó unos cereales. De todas formas, en dos horas entraba a trabajar en la cafetería de su hermano.

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⏰ Última actualización: Aug 25, 2023 ⏰

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