La Cabaña En El Bosque🌲(⁠◍obidei◍⁠)

¡¡Un loco!!

Obito uchiha un ex militar, que fue jubilado a corta edad por dicha valentía en descubrir un detonante de terrorista que afecto todo su cuerpo.

Estaba arto de estar en su departamento en ciudad encerrado, la gente le veía con miedo y otras con asco, y eso le molestaba, dicho accidente le afecto en su rostro dejando cicatrices muy notorias en forma espiral.

Asustaba a los niños, hacia llorar a los bebés, los ancianos lo tomaba como delicuentes, y las mujeres le huían pensado que era una de esas persona que hacían rituales satánicos.

Desde entonces decidió irse a un lugar solitario.

Un lugar donde nadie lo viera.

Sus dos fieles amigos le aconsejaron seguir adelante ignorando las opiniones de los demás.

Pero aún asiendo oídos sordos las palabras le dolían y los actuares de las personas incluso las de su familia.

Compró la cabaña aún anciano que necesitaba para sus pastillas y regalos para sus nietos.

Le facino el lugar desde que vió su localización, al conocerlo en persona quedó enamorado, el aire puro y fresco, nada de gente al rededor, nada de malas miradas.

Solo serían los cantos de las aves y él.

No le molestaba la soledad de hecho la amaba.

Sus familiares le prohibieron ir ala empresa de la familia por dicho rostro, pero su abuelito-tio le daba mensualidades, ropa de primera calidad para su bienestar.

Él no buscaba dinero ni nada de parte de su familia, solo quería compañía la cuál obtuvo de su tío malhumurado.

Pero al ver el rechazo dejo aún lado la familia Uchiha desde que su abuelito-tio murió.

Le temía a Madara y sus regaños sobre su miedo a las opiniones de las personas, pero desde de su fallecimiento acompaño esa tumba por una semana.

Miraba la cabaña de pie a cabeza, no le daría remodelación por fuera le gustaba el toque que tenía.

Por dentro hizo su magia para dejar a sus invitados con la boca abierta. Aunque dudaba en tenerlos.

Entre ellos Kakashi, Yamato y Guy.

Sus tres amigos aún estaban sorprendidos.

Al tener una semana de aver hecho su obra maestra decidió visitar a una amiga.

Nohara Rin, su amor de la niñez pero dicha castaña nunca le correspondió. Visitaba su tumba mensualmente, desde esa explosión había acabado con su amiga.

Al regresar a su hogar descubrió que tenía enemigos.

Mapaches. Eran sus ideales.

Desde esa destrucción masiva de dichos animales, había comprado trapas, veneno pero ni uno caía en sus trampas.

Decidió buscar la madriguera y deshacerse de ellos enviándolos a otro sitio donde no molestaran a nadie.

Pero no encontró nada solo un lago muy llamativo y a como podía ver no era visitado por las personas muy a menudo.

Decidió pescar desde entonces en ese lugar encontrando unos peces muy sabrosos.

Una mañana se encontraba pescando para hacer su almuerzo. Tenía antojos de prepararse un buen salmón, o cualquier pez no era exigente en sus gustos de conformaba con cualquier cosa.

No se percató que habían unos joven nadando en ese lago, dos varones y una mujer. Los jóvenes gritaron al ver su rostro huyendo rápidamente.

No se molestó al ver la reacción de los jóvenes. De hecho le dio una idea, asustar a lo jóvenes para tener el lago para él solo no sonaba nada mal.