Él | MinSung

| 3 | Sol brillante

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― Sonnie, Donngie y Dori.

― ¿Son tres? Creí que solo era uno ― soltó despreocupadamente el hombre que tomaba cuidadosamente a uno de los mininos entre sus brazos.

― ...

― ¿Qué? Deja de poner esa cara MinHo hyung y mejor dime ¿qué es lo que necesitan y a qué hora?

― Menos mal aún me dices "hyung" ― replico el mayor que había clavado su mirada en el más joven al no saber la cantidad de felinos que siempre les presumió, a este mismo y al resto de sus amigos. ― No sé en qué pensaba Chan al mandarte para cuidarlos, peor aún, que yo haya aceptado.

― Puedo irme si quieres.

― ¿Qué? Ya estoy por salir ¿y me propones irte?

― Sí ― se burló el menor.

― Kim SeungMin tú- ― su hablar se interrumpió debido al sonido que emitía su móvil, que al ver al demandante no tuvo más opción que contestar la llamada. Era Chan.

Mientras MinHo contaba a su amigo las palabras de SeungMin, este último se adentraba más al apartamento al que había llegado hace pocos minutos, tirándose en la alfombra de la pequeña sala de estar, dejando así que los otros mininos pudieran acercarse poco a poco a él. Era la primera vez que cuidaría a los gatos de su hyung y estaba sorprendido que estos se le acercaran tan casualmente, haciendolo sentir tranquilo y satisfecho al poder ser de ayuda para su mayor.

― ¿Terminaste? ― pregunto SeungMin con tono burlon, pudiendo ver la expresión de resignación en el mayor mientras se acercaba.

Minho tenía una cita importante aquel fin de semana, por lo cual tenía que salir en unos minutos más para no llegar tarde, así que necesitaba que alguien pudiera ocuparse y cuidar de sus pequeños. Chan se encontraba en el extranjero y le había explicado a MinHo que todos sus amigos estarían ocupados ambos días a excepción de SeungMin, un chico que conocio en su era universitaria, y que se volvio parte de sus amigos incluso despues de que MinHo dejara la carrera. MinHo, había pensado en su madre, pero no quería molestarla más de lo que ya lo había hecho todo este tiempo, además de que no veía necesario hacerla viajar tanto para estar solo una noche sin ver a su hijo, siendo así que terminó por aceptar la propuesta de Chan.
Además, si lo pensaba bien, SeungMin no era mal sujeto, no, ya que de haberlo sido MinHo lo hubiese vetado de su círculo amistoso desde un inicio, era solo que pareciera que al menor le gustaba burlarse consiente e inconscientemente de él, sin preocupación alguna de las reacciones de este, incluso varias veces se preguntó quién de los dos era mayor de quién.

MinHo suspiro ― mira, con ellos tienes que... ― Minho comenzó a dar indicaciones rápidas de cada felino a SeungMin, mostrándole además todo el departamento que SeungmMin ya conocía, bueno, al menos una parte de este.

― No dudes en llamarme a mí o a Chan, ¿de acuerdo? ― soltó el mayor como última indicación y enseguida se despidió de sus pequeños.

― Sí, sí, ya vete.

― Tú- ― no refuto al saber que el tiempo corría, ya luego tendría tiempo suficiente para enfrentarlo.

Ya frente a la puerta se aseguro de llevar el movil, llaves y cartera, fue entonces que SeungMin llamo su nombre y él giro por inersia. Agradeció a sus reflejos por salvarle el rostro de un dolor o cicatriz futura, porque pudo atrapar lo que el menor había lanzado desde la estancia.