I like your taste...... | Guapoduo

Novato

La noche brillaba bajo aquel manto de estrellas, esa nube gris que llamamos vía láctea, brillaba con cierta intensidad, pero poco a poco era opacadas por nubes grandes y frondosas, llenas de agua, anunciando una lluvia torrencial tan fuerte qué tal vez sería mejor que los vagabundos buscaran refugio.

Pero no para él, un asesino, que iba dejando por todos los basureros de la ciudad bolsas con un olor fuerte a carne e hilos de sangre llenar los basureros; una sonrisa en su rostro la adornaba, sus colmillos salían como un lince buscando su próxima presa, sus ojos buscaban con detenimiento el cuerpo de algún manjar temporal. Pero solo veía comida en mal estado, hasta notar a una chica, cabellos rojos y piel pálida como la porcelana, los labios le llamaron la atención que desvió su auto para "ayudarle".

La mañana llegó rápido, y alarma resonó en su habitación, todos parecía darle vueltas, anoche cubrió horas extras y eso lo dejó con ojeras.

Y tanto que cuida su imagen para que se vea así.

Se levantó pesadamente para dejar haciendo café mientras se bañaba, y cambiaba, fue rápido, necesitaba llegar temprano ya que a esas horas podía recibir algún caso y dejar de tener casos simples.

Salió de su departamento y tomó un taxi con su café en mano, miró el retrovisor del taxista notando que no dejó su bandana azul, suspiró algo cansado, era su favorita y la usaba para dormir, era forma de su cabeza no le doliera tanto. Tomó su bandana para quitársela y guardarla en su bolsillo. Cuando noto que llego de inmediato pago al taxista para salir y caminar rápido hacia la estación de policía, se adentro para saludar ala recepcionista

- jaiden!

- roier, buenos días! -

Le sonrió a jaiden para dirigirse hacia las oficinas, puso si dedo en el escaneo para abrir la puerta y dejando su hora llegada registrada, la puerta se abrió al reconocer su huella en el sistema y abrió la puerta.

Camino directo hacia la oficina de su jefe

- señor fit? -

- adelante-

Al abrir la puerta noto que su jefe tenía papeles regados enfrente de él, notando rápido que su jefe estaba preocupado

- ocurre algo?-

- Bueno... encontraron en la madrugada restos humanos en diferentes zonas del ciudad...- le dejó un carpeta a roier que el menor tomó de inmediato

- oh.... - miro el contenido

- Parece que es mucho, pero según el forense todo viene de una sola persona y ....

- y? - roier miró a su jefe, se podía ver angustia en sus ojos

- y no tenia algunas partes...-

- ¿como? - Fit miró a Roier con una frialdad que hasta una corriente eléctrica de miedo lo exaltó.

- Parece que tenemos un canibal en manos -

Roier abrió los ojos con sorpresa, esto era algo que si duda quería para él, sonaba feo pero si resolver este caso permitía que su carrera como policía estallara, entonces lo tomaría para tener además de mejor reputación una mejor paga, ya aguantaba vivir en un departamento donde estuchaba todos los chismes de los vecinos, agradecía pero a veces eran muy, pero muy explícitos.

- señor.. podría ..-

- no, roier esto es muy importante, el FBI vendrá hasta nuestra oficinas ya que está en nuestra jurisdicción - el menor formo una mueca, nuevamente los del FBI le robarían a los policías.

- señor con todo respeto pero creo que todos estamos cualificados para llevar la investigación

- excepto u Roier, eres nuevo en el buró de investigación

- señor, esto podía ayudarme en experiencia

- y en tu carrera, se que también piensas en eso

- si.. pero el FBI se llevó el crédito de la investigación pasada -

- lo se, pero no podemos hacer mucho más que cooperar

Roier asintió aún no muy convencido, salió de la oficina de su jefe para ir a su escritorio, algunos compañeros habían llegado, ordenó su lugar para mirar su placa.

La mujer gritaba de miedo y algunos jadeos y gemidos salían de su boca muy raramente, estaba siendo cortada profundamente en sus extremidades, mientras estaba siendo abusada sexualmente. Aquel hombre tenía una completo mirada asesina sobre la mujer, un fetiche que descubrió una vez en su juventud.

Enterró el cuchillo en uno de los pezones de la mujer para ver como la sangre brotaba de este, se acercó a este y lamió repetidas veces, escuchando como la mujer rogaba por su vida, la voz de la chica estaba desgarrándose así como su piel. Empezó a chupar aquel líquido carmesí hasta que su extasis se volvió en locura, su boca estaba llena del color rojo.

Quería más

Necesitaba más.

Sin más, morido el pecho de la mujer mientras sus embestidas eran más profundas y bruscas, solo buscando su satisfacción, pero algo lo detuvo.

La voz de la mujer estaba empezando a cansarle, la mujer seguía gritando a pesar de que se destrozaba la garganta con cada grito, y esto le fastidiaba.

Todas sus victimas siempre pedían clemencia, pedían lo mismo, era obvio si, pero ninguna lo retaba, ninguno le daba la satisfacción suficientemente para llegar un climax placentero, ese enojo empezó aumentar al sentir como la mujer parecía quitarse las cuerdas de sus manos, cuando sintió las uñas atravesar su pecho, dejando un rasguño.

- Maldita.... Quieres jugar así?

Salió de la mujer sin acabar, su placer acabó sin mucho felicidad, tomó la Manzo nuevamente de la mujer para aplicar suficiente fuerza para fracturarlas, escuchando con placer nuevamente el grito ahogado de la mujer, sonrió con sus colmillos y en una rápida acción, mordió el pecho sangrante de la mujer para arrancarlo sin mucho esfuerzo. Escuchando nuevamente gritos de dolor.

Esta vez la sangre rebosó toda la mesa.

El desastre lo excito, dejando se caer sobre una silla y empezar a tocarse a sí mismo, mientras tomaba un vidrio y jugaba con el el cuerpo de la chica, hasta meterlo en su intimidad sin reparo alguno.

Sonreía mientras veía el sufrimiento ajeno, mientras sonreía con una extraño sentimiento de vacío. Se miró a sí mismo, de nuevo no había llegado al clímax, estaba tan frustrado desde hace años que ya le estaba fastidiando el hecho de no poder correrse, tomó de los cabellos rojos a la chica y empedar a golpearla.

Cada golpe era por su odio, el odio hacia las a personas que tenían el lujo de tener un climax normal, cada golpe hacia la chica, se podía escuchar como los huesos cedían ante la fuerza del mayor, estuvo mucho tiempo golpeando ya el cadaver de la mujer.

Estaba cegado de ira que tomó el cuerpo de la chica y empezó a morderlo, acuñador pedazos de carne, degustando un poco de la sangre y del sabor.

Roier caminaba hacia su departamento, había decidido tomar un autobús, estaba cansado, si, pero quería estirar sus piernas, miraba el cielo, estaba cansado de ser la cuarta opción, quería en serio aquel caso, quería atrapar aquel asesino, de cualquier forma posible.... Si... tal vez cuando hagan la rueda de prensa para calmar a los civiles podría usar un discurso así.

Camino hasta llegar a su edificio.

Abrió la puerta del departamento y rápido se recostó sobre su cama, cayendo en brazos de Morfeo, había hecho demasiado papeleo.

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Fue mucho o fue poco...no se, díganme si estuvo bien, llevo tiempo sin escribir cosas así de puercas y asquerosas xd

Recuerden que esta mas o menos basado en algo real, no totalmente.

Por cierto duda, les gustaría que fuera normal o tipo omegaverse?, díganme UwU