𝑇𝒉𝒆 𝒔𝒕𝒂𝒓𝒕 𝒂𝒏𝒅 𝒕𝒉𝒆 𝒆𝒏𝒅.

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Todos bajaron del tren, el oso de hermosos ojos morados caminó lejos de la gente, en un intento de dejar de desviar su atención del bello chico araña que lo acompañaba.

Ya eran amigos desde hace tiempo, pero últimamente se estaba sintiendo extraño al estar con él. Las bromas del castaño no lo ayudaban para nada.

Rápidamente un grupo se formó, temía acercarse e interrumpir algo, pero fue su padre quien lo fue a buscar para decirle que iban a presentarse entre todos los habitantes de la isla.

Eran los primeros integrantes de aquella isla a la que fueron enviados, más encima no todos hablaban el mismo idioma. Al inicio pensó que sería mala idea, luego lo confirmo al enterarse que Roier estaría allí. Vegetta fue quien lo convenció, ahora se arrepentía de eso.

- Ahí voy pa -

Respondió sin interés, el mayor lo notó, por lo cual lo tomó del brazo para llevarlo con los demás.

- Se que te me vas a escapar, así que tu te vienés para aquí -

Murmuro divertido, en respuesta el híbrido de oso solo se quejó en voz baja, guardando silencio cuando las presentaciones comenzaron.

Se soltó más y fue agarrando confianza, al fin y al cabo era divertido. Oh, eso hasta que tocó la presentación de ese chico.

- My name is Roier! And I... I like Spreen -

Inmediatamente su corazón se aceleró y sus manos temblaron, generando una respuesta rápida como lo era soltar una pequeña carcajada, claramente falsa.

- ¿¡Whats!? ¿Como? -

- Es primavera es primavera! Spring! -

Su padre intentó desviar la atención de su hijo, quien notó esto y guardo silencio una vez más, en respuesta el chico araña solo río desviando la mirada.

- Oh Yeah Spring! Primavera! I like Spring -

Roier se sentía estúpido, bromeando con lo mismo de siempre. Sabía que su amigo le tiró una mirada curiosa, aun así lo ignoro y dejó que otra persona pase a presentarse.

- ¿Mien si viste la cara que puso el pobre Spreen? Le bajaste la presión loco, tenias que ser menos directo -

Comenzó Mariana a reírse en voz baja, puesto que hablaban entre susurros.

- Es que el vato sino no se entera wey, mente de tiburón Osvaldo -

Continuó con su broma.

Todo era eso, una simple broma.

No pensaba que se le saldría de las manos...

"Si pensás que amor yo siento, por favor no hagas pamento"

𝐄𝐧𝐚𝐦𝐨𝐫𝐚𝐝𝐨 𝐭𝐮𝐲𝐨 - 𝑆𝑝𝑖𝑑𝑒𝑟𝑏𝑒𝑎𝑟 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora