Los entrenamientos entre el Pilar de la Llama y la Pilar del Amor para pulir más su desempeño eran constantes, y por supuesto que también eran sumamente difíciles... Para Kyojuro.
A simple vista parecería que el Rengoku dominaría fácilmente los combates, sin embargo la descomunal fuerza y flexibilidad de su protegida no eran una broma.
Pero más allá de las capacidades físicas de Mitsuri, lo que más le complicaba los combates al rubio era... Bueno, cómo decirlo...
El cuerpo de Mitsuri.
Para nadie era un secreto que además de un cuerpo con capacidades sobrehumanas, la Kanroji también estaba muy bien dotada. Y el hecho de que en la mayoría de los entrenamientos usen sus uniformes de Cazadores, y el hecho de que precisamente el uniforme de la pelirrosa dejara mucho a la imaginación... No era muy favorable para el Rengoku.
Eran ya incontables las veces en las que por un mal movimiento terminaban en alguna pose comprometedora, o diciendo alguna cosa rara que termine con uno de los dos sonrojado. Y bueno, ni hablar de las veces en las que Kyojuro terminaba poniendo las manos en lugares donde no debía.
Era todo un caos.
Pero al menos era gracioso ver al sonriente Pilar de la Llama con el rostro sonrojado aún con su gran sonrisota.
Estaba claro que el ferviente corazón de Kyojuro y el amoroso corazón de Mitsuri latían fuertemente el uno por el otro en esos entrenamientos... Cosa que el joven Senjuro notaba pero mantenía la suficiente discreción para no decirlo.
ESTÁS LEYENDO
•♡Headcanons! Kimetsu No Yaiba Ships♡•
Fiksi PenggemarIncluso en un mundo donde la muerte a manos de seres nocturnos despiadados podría considerarse algo común, el amor, pese a lo contradictorio que suene, también lo es. Claro, pero no siempre es como la mayoría lo piensa... A veces es inesperado.