SEÑOR LOBO-YOONMIN

Capitulo 4

Frotaba una y otra vez sus ojos, los froto tan fuerte que logró irritarlos a tal punto que los tenía rojos y lagrimeando.

"Esto no puede ser, esto debe ser un sueño"

Pronunció aturdido, no podía creer lo que tenía enfrente, la cálida casa con la que tanto anhelaba estaba justo frente a él.

"¿Eso significa que todo lo que viví fue producto de mi imaginación?"

Se cuestionó confundido, y para reforzar esa teoría formuló una

historia que lo convenciera.

"¡Eso es! Estoy seguro de que la ventisca se originó justo cuando estaba a punto de llegar a casa y producto del frío y el miedo intenso me desmaye, casi muero de hipotermia y alucine todo"

Una vez satisfecho con todo lo formulado se levantó del suelo, se sintió tonto, perdió todas sus compras, pero dio gracias por estar vivo.

Su entusiasmo cayó al suelo cuando escuchó un suave gruñido.

Con miedo giró su rostro y justo detrás de él estaba el gran lobo que encontró.

Dio un salto del susto, ¿Cómo era eso posible? No entendía nada, volvió a frotarse los ojos ya irritados, pero el gran lobo no desaparecía.

"Si, no fue una alucinación, estoy seguro de que te encontré herido bajo un gran árbol"

Dijo como si tuviera la esperanza que este le conteste y le ayudará a aligerar la gran ansiedad que sentía.

Corrió de vuelta al lado del gran lobo abrazándolo por el cuello.

"No se que pasa, estoy confundido, pero me alegra que el señor lobo este a mi lado, me sentía realmente triste tener que irme y dejarte con una herida así de delicada"

Sus palabras fueron apagadas por un suspiro, seguidas por una gran queja de su parte.

"Qué estoy diciendo, no entiendo nada, no se si lo que viví fue real, no se si todo el tiempo que la ventisca estuvo activa estuvimos justo enfrente de casa, no se si las horas que tardé caminando y por accidente fueron reales.

¡Me voy a volver loco!

Dijo todo sin separarse del lobo, que tenía la apariencia gentil escuchando las firmes quejas de Jimin, cuando este se apartó de su lado, le empezó a lamer la cara gentilmente, como si quisiera consolarlo.

"No se nada, lo único que sé es que estas justo frente a mi y que el hecho de que te ayude y tú me ayudaste es real"

Respiro profundo y trato de pensar con claridad, sabía que no podía dejar al señor lobo solo, pero su preocupación aumento al pensar que pronto llegará el tío y su hijo a dejar el resto de sus compras.

¿Cómo reaccionarían al ver a ese gran lobo de aspecto aterrador?

Sintió miedo, no sabía si intentarían atacar al pensar que es salvaje, el señor lobo herido no podría huir o defenderse.

"Señor lobo ¿Te puedes mover?" Le pregunto nervioso.

"Tenemos que entrar y refugiarnos, en especial tú, si los aldeanos te ven no dudarán en atacarte, pronto regresará el tío Gong Yoo de su jornada para dejar el resto de compras, por favor, trata de moverte"

Jimin trataba al gran cuadrúpedo como si este le podría contestar y entender.

Era una costumbre que tenía, era así con todos los animales.

Esa extraña costumbre le había dado muchos problemas, hasta apodarlo de estar loco. Pero eso no era importante en ese momento, no sabia como hacer para llevar hasta su cuarto al gran lobo.