En como Adalet desea ser libre y conocer el mundo exterior, pero sin saber que el mundo podría ser tan cruel y despiadado, revelando secretos que ni ella misma sabía, además de que ella es la única salvación para la humanidad. Sacrificando su libert...
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Capítulo dieciocho: Árboles gigantes. Expedición más allá de las murallas. Parte 2.
Maratón 8/16.
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POV ARMIN ARLERT.
Mientras que Reiner se encargaba de vendar mi cabeza y que Jenia intentaba llamar al caballo de Reiner, pero, sabía que era inútil que regresara. Pero, me preocupaba Adalet. . .aun no comprendo del por que aquella titán va tras ella, sin embargo, la voz de Reiner logró que saliera de mis pensamientos.
—Dime Armin ¿Cómo está tu equipo de maniobras?
—Está en un buen estado, el soporte se desprendió correctamente, no parece que esté roto.
—Me alegra oír eso pero ¿Qué vamos hacer? Ahora solo queda un caballo si volviera el de Jenia, los tres podríamos movernos de sitio.
Pero me preguntó; ¿por qué aquella titán no me había hecho nada? solamente me examinó mi rostro.
—Armin, oye ¡Armin! parece que todavía estás un poco confundido.
—Sí. Aún me siento algo mareado.
—Entiendo. Pero debemos tomar una decisión, será una elección difícil...sin embargo, uno de nosotros deberá quedarse aquí.
—¡Ah! ¡¿qué cosas dices, Reiner?!
—¡Espera! Primero disparemos una señal de humo. Si la formación sigue avanzando, debe estar cerca la cuarta fila —Mencione al momento que vi como Jenia saco la bengala y elevo su brazo, disparando el humo color púrpura, solo esperaba a que alguien la viera.
—Acabo de enviar la señal de humo de emergencia. Aunque dudo mucho que puedan entender la situación.
—Armin esperaremos tres minutos después de eso, elegiremos quién se quedará.
—Yo seré quién se quede.
—¡¿Qué, estás loco Armin?! —Expresó Jenia mientras sostenía mis hombros—, si Adalet se entera que te dejamos aquí a la mitad de la nada, estoy segura que nos matara a Reiner y a mí. Esa idiota le importas mucho, ¡no digas idioteces! yo me quedaré. Después de todo, yo no tengo caballo.
—Pero, yo estoy mal herido, está decidido me quedaré aquí. Sin embargo, a cambio de eso quiero que le den un mensaje al Comandante Erwin de mi parte y si es posible también uno a Adalet.
—¡Espera, Armin! —Escuchamos la voz de Reiner por lo que ambos volteamos a verlo—. Podrás darle esos mensajes tú mismo. Parece que alguien viene además, trae dos caballos consigo, espera a caso ella es...¡Krista!.
—¡¿Están bien?! ¡me preocupe!
—Aquí está mi caballo, tranquilízate Holli.
—¿Holli? corrió hacia a mí muy asustada ¿pelearon contra un titán? ¡Armin! ¿y esa herida? ¿te encuentras bien? —Voltee a ver a Krista para dedicarle una sonrisa, es algo que me hizo recordar a Adalet. Cada vez que los niños me molestaban en Shiganshina, ella siempre se preocupaba por mí y curaba mis heridas.
—Ah, sí, algo así.
—Eres muy valiente por venir hacia nosotros, al ver la señal.
—De hecho, estaba cerca de aquí y tenía al caballo de Jena.
—Tienes una gran habilidad con los caballos, en verdad eres una chica maravillosa. Gracias por salvarnos.
—Me alegra mucho...que los tres se encuentran a salvo, no saben lo aliviada que estoy.
Luego de varias horas cabalgando nos detuvimos en aquel bosque lleno de arboles gigantes, sin embargo, estoy seguro que el Comandante Erwin tiene algo en mente. Lo único que deseo es que Adalet este a salvo y segura.
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