Capítulo 2

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Lucy dormía plácidamente en su cama.

Se despertó, y avistó a un pelirrosa a su lado, lo que la hizo gritar haciendo que éste se despertara.

-¿Qué horas son estas de gritar, Luce?- Dijo medio adormilado mientras se sentaba en el borde de la cama.

-¿¡Por qué estás en mi cama!?- Gritó tirándole.

-Eso dolió.- Dijo sobando donde le dio el golpe al caer contra el suelo.

-¿Oh?- Dijo la Heartfilia.- ¿Qué también está Happy?- Dijo mientras cogía la cola del exceed y le tiraba al suelo junto a Natsu.

-Oye, Luce.- Dijo posando su mirada en la rubia.- ¿Vamos a por Levy y seguimos?

-¡Dios!- Gritó.- ¿Sabes lo mal que suena eso?

-¿Cómo qué suena mal?- Preguntó.

-Nada, déjalo Natsu.- Dijo mientras se levantaba de la cama.

-Bueno...- Dijo el pelirrosa.- Oye, ¿tienes ropa mía por algún lado?

-Si, en aquellos cajo-... ¿¡Pero por qué tengo ropa tuya!?

-Gracias, Luce.- Dijo yendo hacia los cajones.

Ambos se vistieron y se pusieron en camino hacia el gremio en busca de la peliazul.

-¡Levy-chan!- Gritó la rubia al abrir las puertas del gremio haciendo que todo el mundo la mirara.

-Levy no está.- Dijo Mirajane.

-¡Mierda!- Dijeron el Dragneel y la Heartfilia a coro.

-¿Alguien más?- Dijo para sí misma la rubia.- Natsu, ¿y si preguntamos a Fried?

-No sé si será buena idea...- Añadió el pelirrosa.

-Por probar...

Caminaros hacia el peliverde que descansaba junto al resto del Raijinshu en una mesa cercana a la barra.

Natsu agarró a Fried y se lo llevó lejos de allí.

-¿¡Pero qué mierda te pasa!?- Gritó con enfado.

-Necesitamos tu ayuda.- Dijo la rubia.

Le explicaron el motivo y Fried pensativo, acabó aceptando a ayudarles.

-Con una condición.

-¿Cuál?- Dijeron ambos magos.

-Se tiene que venir alguien para saber que no es una trampa.- Dijo serio.

-Vale, elije.- Dijo Natsu.- Ever, Bickslow o Laxus.

Fried miró hacia su equipo y obviamente eligió al que siempre elegiría.- Laxus.- Dijo con un leve sonrojo en sus mejillas.

Los tres fueron a por Laxus y el al principio no aceptaba a ir. Hasta que la rubia le prometió una cosa que los demás, ni siquiera Natsu, oyeron.

-¿Qué le has dicho?- Preguntaron el pelirrosa y el peliverde.

-Nada, ¿por qué?

Aparataron su mirada de ella y miraron al rubio. Ambos fruncieron el ceño.

-Bueno, empecemos...- Dijo Fried.

Empezó a mirar los libros y empezó a recitar el hechizo que recitó Levy el otro día.

Superu, superu...

Karera wa atta koto ga nakatta baai

Natsu ni nani ga okotta nodeshou ka?


Si nunca nos hubiéramos conocido - NALUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora