Un mundo único en el que los humanos tienen habilidades y estas determinan su posición en una gran jerarquía, y los mas débiles siempre son pisoteados por cualquiera mínimamente arriba de ellos. Un grupo de los niveles mas bajos encontraran ayuda en...
—¡¿Oye, como se te ocurre?!—se puede ver a una chica de cabello rosado oscuro siendo golpeada por otra chica más grande, rubia y de ojos verdes, todo por una tontería, la peli rosa en su intento de llegar a tiempo a clases sin querer golpeo el hombro de dicha rubia, desencadenando dicha pelea, o bueno, masacre.
—¡P-Perdón! —dice, esperando a ver si con suerte la dejan en paz, pero termina arrodillada frente a la rubia.
—¡Discúlpate como se debe! —ordenó sonriente dicha chica, haciéndolo a la peli rosa de coletas suspirar.
Ella iba a empezar a lamerle los pies, algo típico que siempre todos la ponían a hacer, pero paso algo, alguien tacleo a la chica y la tomo del brazo para empezar a huir. Ella estuvo aturdida unos minutos por el golpe antes de entender que pasaba, un pelinegro con cabello en forma de... ¿Casco? Si, un verdadero casco de gel la tomaba de la mano y la ayudaba a huir. Pudio ver como la rubia los atacaba con disparos verdes, pero de alguna manera milagrosa logro huir con éxito junto al desconocido salvador de su bajísima autoestima y dignidad.
—Ahhh... Ahhh... Ahhh—la peli rosa lentamente recupera el aliento, mientras se fija más en su salvador.
Si, es pelinegro y su cabello de casco de gel es muy peculiar, aunque ella nota que tiene bastante cabello oculto en dicho casco. Su uniforme está perfectamente organizado y la corbata apropiadamente ajustada. Ella analiza un poco más a su salvador, el cual seguidamente lo habría notado de no ser por una gran herida en su costado hecha por uno de los disparos.
—Argh... Diablos...—el chico jadea.
—¡¿E-Estas bien?!—pregunta muy asustada.
—B-Bien, solo arde un poco —la herida sangrante no dice lo mismo y la cara de molestia del pelinegro también.
—U-Un momento... Te recuerdo... ¿Eres el chico sin habilidad? —pregunta, y el pelinegro asiente.
—Ja... ¿Soy tan popular? —la chica esta más que extrañada, su tono es... Demasiado arrogante.
—Eh... Eh... Si... He escuchado muchas cosas... Como que le tiraste un pastel a la reina...
—Oh, ja, ja, si, fue divertido ver su cara de idiota, aunque luego me dejo en la enfermería—reconoce alegre.
—Y también que eres un poco muy inestable —reconoce, abriéndose lentamente, quizás por el hecho de que finalmente tiene a su lado a alguien que puede entenderla.
—¿Como te llamas? Soy John, John Doe.
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—... ¿Te llamas John Doe? ¿Eso no es el nombre le da la policía a una persona desconocida cuando desaparece?
—Eh... Si, de hecho así es.... Pero mi papá solo tenía 0 imaginación cuando me puso ese nombre ¿ok? —dice ligeramente avergonzado John.
— Mi nombre es Evie Roselight—explica alegre al chica.
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