Padre e Hija habían estado abrazándose por un buen rato, la pequeña bicolor aún lloraba un poco al por fin tener a su padre después de muchos años.
Sayumi: Al fin puedo conocerte...
Izuku: No sabes cuanto te e extrañado, desde que me fui no pude pensar en nada más que en ti, en ocasiones veía las redes sociales, te vi crecer no de la forma que hubiera querido pero lo hice, cada cumpleaños, escribía un lindo mensaje pero quizás tu madre los borraba.
Sayumi: Ella fue muy mala contigo..
Izuku: Tu madre tenía sus razones, mi relación ahora mismo con ella no es muy buena, ni siquiera sabe que estoy aquí.
Sayumi: No se porque pero siento que ella ya lo sabe.
Izuku: También lo pensé.
Sayumi: Dejando eso de lado, tu y yo tenemos mucho de que hablar.
Izuku: Y que lo digas jeje.
Después de ese bello momento, el tiempo de descanso había terminado por lo que todos los niños tuvieron que volver a sus salones de clases para continuar.
Esta vez Sayumi participaba cada que podía en lo que su padre preguntaba en clases, quería impresionarlo y esta vez empezaría a hacer las cosas bien con el, empezando por llamarlo Papá y Profesor cuando sean los momentos indicados.
Habían pasado las horas y ahora mismo vemos a Izuku salir junto a su padre y Douki de la escuela.
Douki: Me alegra saber que hayan decidido hablarse.
Izuku: Es difícil para mí esto, acaso crees que un padre que no estuvo los primeros 7 años de su hija sería aceptado por ella si le hablara de la nada?
Douki: Tienes un buen punto.
Izuku: Preferí esperar un poco, solo para saber si ella se acercaba a mi, saber si es que ella aún me quería.
Sayumi: Papá tu más que nadie que siempre te voy a querer.
Al escuchar esa palabra el corazón del pecoso había recibido una bala de emociones, este se cubrió un poco la cara para evitar que lo vieran llorar lo cual fue algo inútil.
Douki: Hay amor jeje.
Sayumi: Pasa algo Papá?
Izuku: No Sayumi, no me pasa nada...jeje.
Ahora mismo pasamos con Kyouka, la rockera se encontraba corriendo por las calles de la ciudad, la razón? Había olvidado parar por su hija a la escuela, no era la primera vez la diferencia de esta vez con anteriores veces es que no se le había hecho tan tarde como ahora, para este punto ella creía que ya no había nadie más que ella en la escuela, sus ideas se fueron cuando escucho el sonido de una motocicleta, esta la volteo a ver y como si todo pasara en cámara lenta pudo ver a su hija, aquella chica Douki y alguien más con un casco en aquella motocicleta, estos pasaron a su lado a gran velocidad, la rockera se detuvo en seco viendo la dirección a la que se dirigían, esta salió corriendo nuevamente en aquella dirección.
Volviendo con nuestros protagonistas.
Los 3 ya habían llegado a su destino la pequeña aún estaba en shock por lo que acababa de pasar en los 7 años que llevaba de vida había sentido algo así.
Sayumi: Eso.. fue.. INCREIBLE.
Douki: Jeje sabíamos que iba a gustarte.
Izuku: Aunque no pensé que te fuera a gustar tanto.
Sayumi: Bueno, en donde estamos?
Izuku: Estamos en las oficinas de unas viejas amigas.
Ahora mismo nos centramos en una gran oficina, esta tenia decoraciones que parecían ser de alguna cosas tradicionales japonesas, aunque también tenía otras cosas, entre ellas un saco de boxeo y algunas pesas, detrás del escritorio se podría ver una enorme foto de dos chicas con trajes de novia, estás eran nadie más ni menos que Rumi Usagiyama y Ryuko Tatsuma.
