₊˚♡ Historias cortas de los personajes de Ninjago x Lectora.
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El viento soplaba con fuerza mientras observaba el horizonte desde la cima de la montaña. El sol se ocultaba detrás de las colinas, tiñendo el cielo con tonos cálidos y anaranjados. Esta misión no iba a ser como las demás; por primera vez, estaba solo en esta tarea. Mi compañero, Zane, había sufrido una avería y no podía acompañarme. La misión: rescatar a la princesa Elemental, ____, quien estaba en peligro debido a su inmenso poder.
Sigiloso, descendí por el empinado sendero, mi capa negra ondeando en la brisa. Mis pensamientos vagaban hacia el por qué tantos villanos querían hacerle daño a ____. Sus habilidades eran extraordinarias, pero también su alma gentil y compasiva.
Finalmente, llegué a la fortaleza donde supuestamente la princesa estaba cautiva. Un lugar sombrío y siniestro que exudaba una oscura malevolencia. Mi cuerpo estaba tenso mientras avanzaba, atento a cualquier amenaza.
La encontré en una celda, rodeada por una energía ominosa. Ella, con su largo cabello oscuro y vestido real, parecía frágil en ese lugar. Cuando me acerqué, sus ojos se encontraron con los míos y vi una mezcla de sorpresa y alivio en su mirada.
"¿Estás aquí para rescatarme?", preguntó con una voz suave pero firme.
"Así es, princesa", respondí, desplegando mis habilidades para deshacer la barrera que la mantenía prisionera. "Soy Cole, y he venido para sacarte de aquí".
Ella me observó con ojos llenos de gratitud mientras salía de la celda. "Gracias, Cole. Mi padre te recompensará generosamente por esto".
"No necesito recompensas", dije con una sonrisa, sintiendo un cálido cosquilleo en mi pecho por su agradecimiento. "Estoy aquí para asegurarme de que estés a salvo".
Mientras salíamos de la fortaleza, enfrentamos desafíos y enemigos en nuestro camino. La princesa demostró una determinación valiente y habilidades excepcionales. Cada vez que peleábamos juntos, nuestras acciones se sincronizaban de manera casi instintiva, como si estuviéramos conectados en un nivel profundo.
Su sonrisa y palabras de aliento me impulsaban a seguir adelante, incluso cuando las dificultades parecían abrumadoras. Con cada intercambio, sentía que nos acercábamos más, que nuestras almas se comprendían en un nivel que trascendía las palabras.
A medida que avanzábamos hacia la salida de la fortaleza, ella y yo compartíamos risas y anécdotas, como si nos conociéramos de toda la vida. Descubrí que teníamos más en común de lo que imaginaba: ambos habíamos crecido en lugares remotos y habíamos luchado para encontrar nuestro lugar en el mundo. Mientras hablábamos, su ternura y autenticidad me dejaban encantado.
El camino a un lugar seguro estaba lleno de desafíos. Sorteamos trampas y enfrentamos a enemigos que intentaban detenernos. A pesar de los peligros, ____ no se acobardaba; su determinación y valentía eran inspiradoras. Admiraba su fortaleza interior y su habilidad para mantener la calma en situaciones difíciles.
