José
No entiendo bien que es lo que está pasando, no recuerdo como llegué aquí, mi mirada esta algo borrosa pero... siento algo cálido, una fuerza que me rodea el cuerpo. Poco tardo en darme cuenta que lo que siento es un abrazo, alguien me abraza y yo la abrazo de vuelta, por un momento creí que se tratada de mi viejo pero no, la figura a la que abrazo es más pequeña, no la puedo ver bien ya que mi rostro está oculto en la parte de su pecho. Empiezo a sentir como sus manos me acarician mi cabello de manera dulce y gentil, para serles honesto me gusta, no estoy muy acostumbrado a este tipo de muestras de cariño por parte de mis amigos por lo que solo me dejo llevar. Mis manos comienzan a moverse tratando de descubrir quién es esta misteriosa persona, llego a su cabeza y logro sentir su cabello, es corto y rizado ¿a quién conozco con estas características? ¿Alguien de la escuela? ¿Un familiar? ¿Quién eres?
Mi curiosidad me hizo levantar la cabeza, se trababa de una chica que nunca había visto, o al menos no que yo recordara (años de experiencia me hicieron darme cuenta que mi memoria no es muy confiable que digamos) tenía el cabello de color negro a la altura de los ojos, piel morena y ojos oscuros
-"Haz luchado por mucho tiempo mi pequeño guerrero, es hora que alguien peleé a tu lado y esa persona quiero ser yo"-
Escuché su voz por primera vez, definitivamente nunca había oído a alguien con ese tono de voz y menos una que me transmitiera lo que ella logró, sentí sus manos recorriendo mis mejillas y levantando mi cara con cuidado, como si tuviera miedo de tomarme con naturalidad y me sorprendí a mí mismo dejándome guiar por ella y cerrando mis ojos en el proceso.... Para luego abrirlos y darme cuenta que todo había sido un sueño
Me encontraba tirado en mi cama aun con el pijama puesto
-Pero... ¿qué diablos?.... ¿De verdad todo fue solo un sueño? ¿Pero y la chica? ¿Quién era?-
-¡José! Es hora de despertar hijo, no quiero que te vuelvas a ir a la escuela sin desayunar así que baja para comer juntos-
-Eh... si voy papá, gracias- los gritos de mi viejo interrumpieron mi pensamientos por lo que me levanté de la cama en automático y comencé a vestirme.
Cuando estaba a punto de tomar mi mochila me di cuenta... que los detalles de ese sueño se habían borrado de mi mente, es lo normal en los sueños pero en esa ocasión me pareció frustrante, el acto de recordar a esa chica era como si trataras de ver una imagen reflejada en agua en movimiento, los detalles de su rostro estaban distorsionados.
Resignado tomé mis cosas y bajé a desayunar, no tenía sentido seguir pensando en eso de todos modos, no era nada más que un sueño más... ¿o sí?Ximena
Tenía los ojos cerrados mientras estaba acostada, abrazaba algo que en un inicio pensé que sería mi almohada (una vieja costumbre que tengo) pero al pasar mía manos por ella me di cuenta que no era así.... Lo que estaba abrazando era.... una persona!!!???
-"Ey manos quietas chiquita"-
Escuche entre risas que hablaba esta persona, solo así pude reaccionar y alzar la cabeza por fin, se trataba de un chico de piel morena al igual que su cabello pero con unos hermosos ojos azules que resaltaban y captaron mi atención de inmediato. Tras unos segundos perdida en sus ojos pude retomar el control de mi cuerpo y mi única reacción fue voltearme y cubrirme la cara muerta de vergüenza, en respuesta este chico me abrazó por la espalda respirando en mi cuello, me sorprendo a mí misma al no tener ni el mínimo impulso por correr ante su tacto, no tolero que más personas me toquen de la nada y menos los hombre pero.... Mi cuerpo se relaja con él, no siento nada de miedo solo me dejo envolver en su calor mientras siento como sus manos acarician mi cabello y mis ojos se van cerrando por lo cómoda que estoy.
De un momento a otro dejo de sentir sus manos y su cuerpo junto al mío, fue así que decidí abrir los ojos y para mi sorpresa lo único que había a mis espaldas era mi almohada. Sobresaltada me incorporo en la cama y rebuscó en ella tratando de encontrar algún rastro de la escena pasada pero sin ningún éxito , no había nada más que mis almohadas y mi pequeño gato negro Moon.
Caigo en cuenta que todo lo que paso fue un sueño y me lleno de coraje al notar que ya no recordaba gran parte de lo que había sido uno de los sueños más lindos de mi vida, por dios ¿Por qué demonios no me había largado cuando vi a ese chico en mi cama? ¿Por qué su tacto no me asustaba? Y más importante aún ¿quién fregados era ese chico?, no era nadie que yo conociera de eso estaba segura. Sin muchas opciones busco mi celular entre las cobijas y veo que son las 2:41 de la mañana por lo que solo me dejo caer en la cama tratando de dormir hasta que diera la hora de ir a la escuela, además en una de esas... podía ser que el sueño continuara, aunque con la suerte que tenía no esperaba mucho, de todos modos, no era nada más que un sueño más... ¿O sí?
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Vainilla: Relatos de amor
RomanceHe estado en la comunidad de Rebe por casi tres años y desde entonces me conocen por mi amor al personaje de José. En mi cabeza siempre había formado pequeños escenarios individuales con el pero jamás les había dado un orden y mucho menos los había...