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Las clases finalmente dieron inició, Chimon había olvidado aquel incidente pero Perth no.

- Perdóname, por favor, perdóname la vida- Suplicaba el hombre de rodillas pero Perth solo se reía

- Dame una buena razón para perdonarte la vida- Dijo Perth con aquella sonrisa que perturbaba a sus víctimas

-Mi esposa, se lo suplico, por favor- Insistía el hombre entre llantos

- Señor!- Uno de los hombres de Perth corrió con dos maletas cerradas y finalmente abrió estás dejando rodar una gran cantidad de dinero mientras que otro de sus hombres venía con dos maletas llenas de ropa y pasaportes listos, Perth entonces se empezó a reír y luego le dió dos puñetazos en el rostro a aquel hombre

- Imbécil, no tenías para pagar tu deuda pero si para huir del país? ¿Creiste que si te ibas del país no te íbamos a encontrar?- Perth sacó su cigarrillo y dió una calada a éste, luego alzó su arma y disparo 5 veces acabando con la vida de la mujer que estaba de rodillas al lado de su esposo, el hombre grito de terror y de dolor al ver morir a su esposa frente a sus ojos

- ¿Era tu razón para vivir no? Bueno, ya no tienes una buena razón para seguir aquí- Sin pensarlo dos veces disparó al al hombre hasta que las balas se terminaron, terminó su cigarrillo y lo tiró sobre el charco de sangre

- Metan los cuerpos en ácido y limpien este desastre que aquí no pasó nada, cuenten el dinero y ya saben si me enteró que falta siquiera un bath, lo voy a multiplicar por la cantidad de años que tengan sus abuelos, tíos, primos y sobrinos y esa cantidad se la tendrán que pagar a mis patrones- Los hombres entonces asintieron y Perth salió del lugar, su uniforme ahora estaba manchado de sangre así que tuvo que ir hasta su apartamento a limpiarse, al salir subió en su convertible rojo y en cuestión de una hora estuvo estacionado frente a su universidad, bajó de su auto y cuando estuvo por ingresar a su aula observó un rostro que anteriormente había visto, sonrió levemente y siguió al joven estudiante que no se percato que era observado, Chimon pronto se encontró con el primer amigo que había hecho, en la universidad y Perth sonrió al conocer el nombre de quién sería su nuevo juguete aquel semestre, volvió a su salón e ingresó tranquilamente, tomó sus respectivas clases y pidió a su mejor amigo que investigara sobre el chico nuevo

- En realidad no hay mucha información- Habló Mark mientras estaban reunidos en la cafetería

- Tiene 19 años, estudio en el exterior, parece huérfano porque no hay información ni de sus padres ni nadie de su familia, recién regresó a Tailandia y ahora está estudiando aquí- Al parecer esa era la poca información que Mark había logrado conseguir del joven estudiante, Perth sonrió, creyó ganar la lotería, un estudiante extranjero, nuevo y sin familia, que más podía pedir, tenia a la víctima perfecta para divertirse y jugar.

Durante un mes completo todo fue paz y tranquilidad, Chimon se concentró en sus estudios, hablaba con varias personas pero solo tenía un amigo, era introvertido pero muy inteligente, realmente no tenía idea del plan que se estaba ideando a sus espaldas para volver su vida una mierda.

El reloj marcaba las 2 de la tarde, casi todos los estudiantes estaban en sus respectivas clases, Chimon se encontraba en la biblioteca sacando algunas copias para sus trabajos, una vez terminada esta labor emprendió caminó hacia su aula pero terminó chocando con Perth nuevamente solo que esta vez fueron los documentos de Chimon los que rodaron en el pisó, rápidamente el más joven de los dos se agachó a recoger sus documentos y fue entonces cuando Perth pisó fuertemente la mano del menor causando que este soltará un leve gritó de dolor, Perth sonrió triunfante y quito su pie de la mano del más joven

- Lo siento, no te vi- Sin decir más, Perth solo se fue pero antes pateo los papeles del menor quien realmente estaba confundido y adolorido, su mano había quedado extremadamente roja y sus dedos en verdad dolían mucho

- ¿Que le pasa?- Se pregunto para si mismo el menor y es que Chimon había olvidado por completo aquel primer encuentro con Perth, había sido un accidente sin importancia para él así que lo había olvidado y ni siquiera era capaz de recordar el rostro de Perth por ende, no podía comprender la actitud de aquella persona hacía, desgraciadamente Chimon no sabía que lo que para él había sido un accidente sin importancia, para Perth había sido mucho más que eso, para Perth había sido una completa ofensa hacia su persona y no tenía pensado dejarlo pasar por alto, estaba dispuesto a hacer de la vida de Chimon un completo desastre y aquel juego del gato y el ratón apenas estaba empezando.

EL HIJO DE LA MAFIA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora