POR SER OMEGA-YOONMIN

Cap 4: CELOS

NARRA JUNGKOOK

Seis días habían pasado.

Tiempo que llevaba conociendo a Jimin, un Omega espléndido y carismático cuando lo conocías, pero a la vez tímido, podía entender porque Yoongi lo tenía.

Había oído que de pronto Yoongi se había interesado por un Omega, que lo había comprado y ahora vivía con él. Todos en la mansión conocían la personalidad de quien servían, no era alguien a quien le gustaba estar con cualquiera, era un alpha frío y calculador, nadie podía comprender sus gustos, por ello, aquellos Omegas que intentaban conquistarlo fallaban, uno de cada diez a lo sumo lograba una aventura.

¿Por qué de pronto se interesó en él?

Jimin era muy hermoso, con esos ojos azules, cabello castaño y esa pequeña estatura que hacia verlo adorable. Su personalidad era tranquila y cautivadora. Ahora no podía apartar la mirada.

Sin darse cuenta me seducía, pues se podían observar esos pequeños botones rosas visibles bajo su playera, me provocaba el deseo de querer hacerlo mio ahí y ahora.

Él no lo sabía, y no pensaba decírselo.

¿Por qué perderme de una vista tan espléndida?

Era obvio que a primera vista me había enamorado de él, pero el problema radicaba que él estaba marcado, y peor aún, pertenecía al amo.

Me preguntaba si en esas condiciones aún habría una pequeña posibilidad de convertirlo en mi pareja. Era conocimiento común que la única forma de borrar esa marca era la muerte, por supuesto no la de Jimin.

NARRA LISA

Cómo todos los días me encontraba trabajando en la cocina junto a mi madre que laboraba como cocinera, cuando una compañera de servicio llegó inesperadamente.

-¡A REGRESADO! -gritó Jennie entrando exaltada- ¡Se ha dirigido a la habitación del señorito!

Tan pronto como escuchamos, dejé de cortar verduras y mi madre apagó la llama de la estufa.

-¿Qué? -hablamos al mismo tiempo-.

Levanté la mirada preocupada y mi cuerpo se quedó en un estado de trance, mi madre no se encontraba mejor.

El amo había regresado un día antes de los previsto, normalmente avisaba sus llegadas y en esta ocasión no lo hizo.

-¿¡DONDE ESTÁ!?

En ese instante la puerta de la cocina se azotó, la figura parada en la entrada tenía un aura pesada cargada de feromonas intimidantes, las venas de su frente y de sus manos estaban muy marcadas, pero lo aterrador eran sus ojos, ni siquiera podía describirlo como molesto.

El sudor recorrió mi rostro y mi cuerpo no se calmaba, por instinto bajé la mirada y tragué con dificultad.

-P-Por favor no se moleste señor, el señorito se encuentra en el jardín -habló mi madre-.

Ella, Jennie y algunos empleados que ahí se encontraban en el lugar estaban igual que yo, todos temían al alpha en la entrada. Por suerte mi madre era fuerte.

—Les dije claramente que no le estaba permitido salir de la habitación.

Su voz fría era tan aterrador que incluso mi madre no pudo terminar.

Solo escuchó y rápidamente nos ignoró. No podíamos hacer nada para detener lo que estaba por ocurrir.

Se dirigió hacia el jardín.

-Lo siendo Jimin...

Susurré para mí y me fue imposible seguir manteniendome de pie. Solo quería ayudar.

NARRA JIMIN

En estos días al fin sentí la tranquilidad que tanto necesitaba, respiré en paz y sin miedo.

Había conocido a varios trabajadores y todos eran personas muy agradables, entre ellos el hermano de Lisa y su madre Nayeon, una de las pocas Omegas que trabajaba para Yoongi.

En este momento me encontraba en el jardín con Jungkook, que por cierto era el jardinero, un alpha afectuoso y apuesto, me gustaba observar las hermosas flores del jardín que se mantenian gracias a sus cuidados.

-Me encantan tus rosas-comenté mientras lo ayudaba a plantar más de estás- en especial las blancas.

-Entonces...-tomó una y la colocó en mi oreja- te haré un arreglo de rosas blancas todos los días para tu habitación.

-¿Eh?

Observé su rostro con sorpresa y poco a poco mis mejillas y orejas se tiñeron de un tono rojo.

-G-Gracias.

Desvíe la mirada y el carcajeó.

Que vergüenza.

-Regreso antes y veo que te has divertido sin mi estos días Jimin.

Esa voz fría apareció y rápidamente me puse de pie y me giré para observarlo.

-Veo que eres un omega que se ofrece al primer alpha que encuentra -una sonrisa siniestra apareció en su rostro-

Pronto comencé a temblar y me puse nervioso. ¿Por qué estaba aquí? aún faltaba un día, no tenía sentido.

-¿P-Por qué estás aquí?

Al parecer Jungkook notó mi estado y de igual forma se puso de pie, me colocó detrás de él e hizo una reverencia frente a Yoongi.

-Señor disculpe el atrevimiento de este sirviente per...-Antes de
terminar Jungkook fué interrumpido-

-¡CIERRA LA MALDITA BOCA! ¿¡QUE CARAJOS HACÍAS CON MI OMEGA!? ¡ALEJATE DE ÉL!

Jungkook estaba a punto de marcharse pero lo detuve tomándo de su muñeca.

-T-Tú tampoco me dejes, por favor.

—¡TE DIJE QUE TE ALEJARAS! - Yoongi lo golpeó en la mejilla y me tomó fuertemente del brazo atrayendome hacia él-. ¡EL ES MÍO!

Mientras Jungkook se limpiaba el rastro de sangre, se enderezó y no dudó en reaccionar agresivo.

-¡SE PERFECTAMENTE QUE ES SUYO PERO NO LE DA EL DERECHO DE TRATARLO TAN MAL!

-¡A ti no te debe de importar como trate a MI omega! ¡solo eres un empleado más para mi! ¡tu deber es obedecerme!

-¡ME IMPORTA! ¡PORQUE LO AMO Y ME QUEDARÉ CON ÉL SIN
IMPORTAR LO QUE TENGA QUE HACER!

¿Jungkook me amaba?

Imposible, él no era como los demás, no mentiría para atraerme.

Al escuchar esas palabras Yoongi se enfureció más y presionó con fuerza el agarre que tenía contra mi.

-M-Me lastimas.

Traté de retirar mi muñeca pero me lanzó una feroz mirada de advertencia y dejé de moverme.

-¡YO LO HE MARCADO! ¡NO PERMITIRÉ QUE UNA BASURA COMO TÚ ME LO ARREBATE!

Una pelea de alfas comenzaba a dar lugar.

¿Qué pudo hacer?

CONTINUARA