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— ¡______! ¡Despierta! — unos pequeños golpes en su mejilla la hizo abrir con pesar los ojos, sintiendo todo su cuerpo congelarse

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— ¡______! ¡Despierta! — unos pequeños golpes en su mejilla la hizo abrir con pesar los ojos, sintiendo todo su cuerpo congelarse.

— ¿Joha? — Al abrir por completo sus ojos pudo distinguir el techo de madera sobre ella, con sorpresa se sentó viendo a su alrededor, estaban en la cabaña donde se hospedaban, pero entre un gran montículo de nieve —  Ya temía darte por muerta, gracias al cielo no fue así— dijo con alivió ayudándola a salir de toda la nieve.

— ¿Estamos en la cabaña? ¿Pero como? — miro a sus amigos dos estaban inconscientes y uno de ellos estaba despertando, preocupada los saco de la nieve colocándolos en los sillones de la sala — Cristian, hey, Cris ¿Estás bien?

— E-estoy congelado — dijo en hilo de voz.

— Tranquilo estaremos bien — Una luz alumbró el lugar, la chimenea había sido encendida y las llamas comenzaron a calentar poco a poco el lugar

— Y los chicos — hablo nuevamente con algo de preocupación — Ethan, Francis, ¿Cómo están ellos?

— Están bien, ok, solo están inconscientes — un grito los sobresalto, un chico de cabellera rubia y ojos castaños se había despertado asustado que por la forma brusca en la que despertó hizo que cayera en la nieve que aún estaba ahí.

— ¿Que pasó? ¿No me morí? — se reviso todo el cuerpo — ¡No me morí! — celebro estando ya más tranquilo — ¿Pero como rayos llegamos aquí?

— Tu pasabas aquí todas tus vacaciones, ¿No ha pasado esto antes?

— ¡No!, Bueno… solo cuando hubo una tormenta y al abrir la puerta todo se llenó de nieve — miro la pequeña colina que comenzó a derretirse mojando todo — Voy a llamar a las de limpieza — dijo con pesar para ir a buscar su teléfono. ______ noto como entre la poca nieve un objeto brillante sobresalía, se quitó los guantes y lo tomo, notando que era un anillo de color dorado, no tenía ningún gravado o detalle.

— Oye Joha — llamo a la morena — ¿Es tuyo? — le mostró el anillo.

— No yo no los uso a menos que sea para ir de fiesta o al centro comercial — miro el anillo era algo grueso como para una mujer.

— Deberás preguntarle a Francis tal vez sea de su madre y lo pudo dejar por aquí o probablemente se le haya caído a otra persona.

  En poco tiempo toda la nieve se derritió a causa el calor de la chimenea, todos habían ido a cambiarse por ropa más cómoda pero ninguno de ellos era dueño del anillo

" Quizás alguien quería casarse pero se le cayó el anillo. Eso llega a pasar mucho "

  La de cabellos rubios no estaba del todo segura con las palabras de sus amigos, aún así lo conservó. Luego de que se cambiara fue a la sala en donde se encontró a las dos mujeres encargadas de la limpieza.

Nuevas Aventuras [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora