Toma 6

142 28 6
                                    

Había quedado como un tonto.

Namjoon no dejaba de sentirse así después de saludar a Jimin temprano ese día. Cuando lo vio comenzar su rutina cerca de donde estaban, prácticamente salió corriendo del gimnasio. Incluso Yoorim lo miró extraño cuando interrumpió su rutina asesina prácticamente la arrastró a los vestidores para cambiarse.

¿La parte buena de todo eso? Ahora Yoorim tendría su preciado tiempo de nadar, mucho antes de lo esperado, pero no por ello estaba ilusionada. Seguramente Namjoon la haría hacer unos cuantos ejercicios para calentar antes de meterse en la piscina.

—¿Entonces esto no tiene nada que ver con cierto hombre que te saludó en el gimnasio?

La chica miró a su hermano con una sonrisa sardónica. Ambos estaban caminando a la piscina, listos para entrar y nadar un rato.

Namjoon ni siquiera la miró.

Deteniéndose un momento, Yoorim echó un vistazo alrededor y se dió cuenta que habían tumbonas alrededor de la piscina más cercana a la entrada de un pequeño jardín.

Trataría de convencer a su hermano para que más tarde tomen el sol en lugar de hacer aquella rutina asesina.

—Solo no te alejes demasiado.

Yoorim puso los ojos en blanco ante la sugerencia de Namjoon antes de sumergirse. Por suerte había dos clases de piscinas, una con boyas separando carriles y otras dos sin ellas.

Por supuesto Namjoon estaba en la primera.

De esa forma pasaron cerca de una hora, cada uno en lo suyo, sintiendo el agua alrededor de sus brazos y piernas mientras nadaban. Para ese momento el malestar de la noche anterior había desaparecido y Yoorim quería más que nunca una piña colada y tumbarse bajo el sol.

Estaba a punto de salir de la piscina cuando miró como entraban dos hombres por una de las puertas. Rápidamente identificó al azabache como Jimin, a su lado un castaño con rostro demasiado llamativo, ahogando un suspiro pensó que estaba ante un modelo.

Sin perder el tiempo y las ganas de hacer una travesura, Yoorim salió de la piscina y caminó hasta el par de hombres. Jimin logró identificarla como la clienta de Namjoon demasiado tarde, la chica ya estaba frente a ellos.

—¡Hola!

Que extraño, la sonrisa de la chica y Namjoon era demasiado similar, colmillos similares y esos hermosos hoyuelos adornando.

Taehyung que no tenía idea de nada, le sonrió a la chica de igual manera.

—Ey, que tal.

Casi demasiado tarde, Jimin también decide participar.—Hola.

El saludo fue corto y escueto. Yoorim se sintió un poco intimidada por la mirada del azabache, no parecía feliz de verla.

Interesante.

—Creo que debimos ser presentados esta mañana, perdona si Nammie fue grosero.

La ceja de Jimin saltó en un tic. Apretando los dientes compuso una sonrisa amable y subió un poco el hombro derecho, sin darle demasiada importancia.

—No te preocupes, no me gusta interrumpirlo cuando está con clientes.

Taehyung en ese momento entendió de quien se trataba y la miró un poco impresionado. La chica no parecía llegar a los 20 años siquiera.

—Creo que entonces es un momento perfecto para hacer las presentaciones pertinentes — divertido observó como Jimin apretaba aun mas su sonrisa falsa.— Soy Kim Taehyung y mi amigo aquí es Park Jimin. Un gusto, linda.

Altas Expectativas //NamMin//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora