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HABÍA PASADO UNA SEMANA desde el comienzo de sus clases en sky high, para suerte de Hannah se adaptó bien a las clases aunque algunos compañeros aún seguían refiriéndose a ella como una "llorona" cosa que odiaba.
Ni siquiera iba a llorar y todo era culpa del entrenador Boomer y su maldita costumbre por avergonzar a sus alumnos.

Todo estaba genial, excepto por Will, el chico cada vez estaba más "enamorado" de Grayson cosa que Layla y Hannah no toleraban, la rubia se había dado cuenta de que Gwen no era tan buena como aparentaba.

Además de que Will seguía insistente en que no se acercará a Warren Peace, algo que también llegaba a fastidiarla.
Will era su amigo pero no le mandaba, obligarla a alejarse de Warren solo aumentaba la curiosidad de ella.

Mientras Will le decía "aléjate, aléjate, aléjate" ella más bien escuchaba "acércate, acércate, acércate".

Pero de igual forma no se acercaba a él, no porque no quisiera, si no que no encontraba manera de acercarse a él, últimamente solo lo miraba leer en el almuerzo, Warren sentía una mirada sobre él pero simplemente no le daba importancia, hasta que un día decidió levantar su mirada del libro y darle fin al responsable de las miradas, pero solo se encontró con aquella rubia de sonrisa linda y no quiso hacer nada, estaba seguro de que ella solo sentía curiosidad.

Sus clases eran entretenidas a decir verdad, estudio de gemas y control de poderes, y poco a poco había logrado usar sus poderes a su antojo...bueno algo así.
Apenas eran pequeños avances y mayormente ocurrían cuando la joven estaba bajo presión.
Sus campos magnéticos llegaban a ser de pocos centimetros pero por algo se empezaba, y eso alegraba a la rubia.




























































































Saludo a sus amigos sentándose junto a ellos, cómo de costumbre su vista viajaba hacia el chico de mechones rojos y todos parecían notarlo, Will apretaba sus puños enojado al verla.

—Oye.—llamo su atención Magenta.—Deberías hablarle en vez de estar sentada aquí mirándolo como acosadora.

—¿De que hablas?—pregunto la rubia avergonzada, sus amigos rieron excepto Will.—Olvidalo Magenta, él me quemaría viva.

—Y además a tus padres no les gustaría enterarse que los desobedeces.—intervino Will con aire acusador, Magenta abrió su boca ofendida, esperando a que la rubia dijera algo.

Hannah mordió su lengua, aguantando sus ganas de decirle que a sus padres no les gustaría enterarse de que no tiene poderes.

—¿Vas a acusarme?—preguntó, su mirada de clavo en él.

Will alzó sus hombros tragándose el miedo que sintió cuando los ojos azules de la rubia se clavaron en ella ,Layla rodó los ojos ante la actitud acusadora de Will, parecía un niño.
Sus amigos estaban un poco molestos con Will, él se comportaba extraño desde que Gwen había aparecido.

Hannah no le temía a que Will la acusara, además ya le había agarrado el gusto a llevarle la contra a Will, así que se levantó de su asiento decidida a ir donde Warren.

—Hannah, no.—Will puso su mano sobre el brazo de ella, cuando la rubia lo miro saco su mano.—Bien, entonces ve.

Todos intentaron detenerla (excepto Magenta) solo tenían miedo a que Warren la lastimara, aunque Will no la quería cerca de Warren Peace solo por ser hijo de un villano, y aunque intentaron detenerla, la rubia ya estaba frente de su solitaria mesa.

—Hola.—saludó ella con amabilidad, el chico levanto su mirada del libro encontrándose con ella.—¿Puedo sentarme?

El no respondió y miro devuelta a su libro, Hannah no lo tomo como un "si" pero tampoco como un "no" así que se sentó frente a el. El la miro en silencio mientras ella se disponía a comer, cerro su libro.

—¿Que haces aquí? Deberías mantenerte alejada como todos los demás.—dijo rompiendo en silencio, la rubia alzó su mirada haciendo que sus ojos celestes se encontraran con los ojos negros de él.—De lo contrario todos pensaran que irás por mal camino al sentarte con el hijo de un villano.

—Queda más que claro que no me importa lo que los demás piensen.—le contesto la rubia con obviedad, él levantó sus cejas.

—¿Incluso tu amigo Stronghold?

—En especial él.—volvió a contestar la rubia, el chico le dio una última mirada antes de volver a su libro.

Miro hacia la mesa donde sus amigos estaban, Magenta le guiño un ojo orgullosa de ella, Layla le sonrió al ver que Warren no la había lastimado, Ethan y Zach estaban preocupados aún por su amiga pero Will, Will estaba enojado por su revelación y si, también estaba preocupado por ella pues no escuchaba cosas buenas de Warren Peace.

—¿Lash y Speed han parado?—le pregunto el chico volviendo a apartar su mirada del libro.

—Pues...algo así.—no la molestaban tan seguido luego de que Warren Peace la "defendiera".

—Pues me alegro.

Warren no dijo nada más, se notaba que hablar con las personas no era su fuerte ya que prefería mantenerse en silencio leyendo, cosa que a Hannah no le molestó en lo absoluto, le pareció muy calmado y lindo de su parte.

Al sonar el timbre él fue el primero en irse, apenas murmuró un adiós antes de irse, Layla y Magenta se le acercaron al verlo lejos.

—Vaya, no puedo creer que te sentaste con Warren Peace y sigues con vida.—le dijo Magenta, la rubia río ante eso, no sabían que en realidad no era tan malo como parecía.

—Quizás no sea tan malo.—dijo la pelirroja.—Al menos no con Hannah y eso me tranquiliza.

—Lash y Speed dejarán de molestarte.—dijo Ethan tranquilo, Zach asintió de acuerdo con él.—Doble premio.

Eso era cierto, quizás Lash y Speed tendrían tanto miedo que la dejarían en paz pero eso no la tranquilizaba ya que sabía que sus amigos aún eran molestados.

—¿Warren Peace?—le pregunto Will.—¿Hannah, acaso enloqueciste? No es bueno que te mantengas cerca suyo e interesarte en él no es buena idea, quiero que estés a salvo.

Hannah inhalo profundamente antes de abrir la boca.

—Will se que quieres que este a salvo pero no puedes prohibirme acercarme a el, además ni es tan malo como dicen que es.—dijo ella frustrada.—Te quiero Will pero déjame vivir en paz.

Will no dijo nada, resignado a pelear con su amiga lo que la tranquilizo enormemente a la rubia.

—Vamos a clases antes de que se nos haga tarde.—sugirió Layla.

Ahora sabía que no corría peligro cerca de Warren Peace, así que no tenía porque alejarse de él y Will no le prohibiría nada.

𝗝𝗨𝗗𝗔𝗦, warren peaceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora