Los recuerdos que duelen
me persiguen todo el tiempo:
no puedo olvidarlos
ni tampoco cambiarlos
porque daño me hicieron,
y el alma me partieron.
Esos terribles recuerdos
vuelven y vuelven,
no me dejan tranquila
ni un mísero segundo.
Trato de ignorarlos,
pero siento que no puedo.
Cada vez que los ignoro
los recuerdo con mayor claridad.
Recuerdos traumáticos
que, por mucho que intente,
no puedo borrar.
A veces ser un robot desearía,
no tener sentimientos
y poder borrar mi mente
de esos malos recuerdos.
Aún recuerdo
no tener amigos al lado
desde que era niña:
trataba de hacer amigos,
pero todos me excluían
pero todos me apartaban,
pero todos, bullying me hacían.
Hasta mis falsos amigos,
me acosaban.
Luego están las enfermedades
que amenazan a mi familia.
Luego está la muerte
que se llevó a las personas
que yo más quería.
Recuerdo la última vez
que a mi abuelo yo vi:
en silla de ruedas estaba,
sin los ojos poder abrir,
sin su clara voz escuchar.
Recuerdo la última vez
que a mi padre yo vi:
saliendo de casa,
corriendo hacia un taxi
por un dolor de cabeza
en mitad de la noche.
Al hospital, él fue
y no le volví a ver nunca más.
A mi madre, yo insistía
en que verlo me dejara,
más ella nunca cedió;
solo quería verle
por última vez.
Recuerdo la última vez
que a mi tía yo vi:
tumbada en la camilla
del horrible hospital,
con su mente preocupada
porque pensaba que
dinero, ella no tenía.
Recuerdo cómo le dio
aquel ataque epiléptico
y espuma le salía por la boca.
Aún recuerdo
cómo mi familia
se fue rompiendo
en enormes pedazos:
cómo mi tío y mi prima
la opinión de mi madre ignoraban,
cómo me ignoraban ellos a mí;
cómo mi abuela
siempre dice que no sé nada
ni nunca sabré hacer nada;
cómo mi abuela
siempre les hace más caso
a ellos que a nosotras;
cómo mi otra abuela
se ríe porque tenga hambre.
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EMOCIONES
PoetryEn esta historia, se recogen una serie de poemas sobre las emociones que he ido sintiendo a lo largo de toda mi vida.