Capítulo Anterior: Orión se dirige al banco, al igual que Dumbledore, y luego Holly ve a sus amigos en el tren.
En este capítulo: Holly en la fiesta y saliendo con amigos mientras Dumbledore tiene una reunión con el trío idiota.
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La protección de Holly no falló por segunda vez y su viaje a la escuela no fue interrumpido por intrigantes Gryffindors. Cuando desembarcaron, el grupo logró conseguir un carruaje para ellos y Holly vio a Hermione, Ron y Ginny buscándola más cerca del frente de la masa de estudiantes. Por una vez, agradecida por su pequeña estatura, Holly se agachó detrás de sus amigos de Slytherin y se metió en el carruaje, rápidamente seguida por el resto y se dirigieron hacia la escuela.
Una vez en el Gran Comedor, no tuvo más opción que hacerse visible, así que aprovechando cada gramo de oclumancia que su abuelo había logrado enseñarle y encerrando toda la emoción que pudo, Holly tomó asiento en la mesa de Gryffindor, Neville sentado. justo al lado de ella.
Por supuesto, como era una fiesta, estaban sentados en grupos de años, lo que la colocaba frente a Ron y Hermione, y Ginny, junto a ella al otro lado, era el comienzo de quinto año.
Hermione intentó iniciar una conversación, pero la entrada de McGonagall con los de primer año hizo que el salón se sumiera en un silencio anticipado. Holly desconectó la clasificación, aplaudió cuando su mesa aplaudió y, por lo demás, se sentó en silencio, observando a los de primer año, Draco con Blaise y Daphne, Luna en la mesa de Ravenclaw mirando soñadoramente al vacío y revisando la mesa del profesor al frente. Una vez que terminó la clasificación, Dumbledore pronunció sus habituales palabras sin sentido y apareció la comida.
Naturalmente, Hermione comenzó a hablar tan pronto como los platos dorados estuvieron llenos, parloteando sobre su verano, lamentándose del hecho de que Holly no había podido unirse a ellos al final del verano como de costumbre, y haciendo preguntas puntuales sobre su verano que Holly había sin ganas de responder.
Ron estaba demasiado ocupado llenándose la cara de una manera absolutamente grotesca como para prestar atención alguna, aparte de lanzar miradas apreciativas hacia la figura de Holly, provocando que ella se estremeciera de repulsión. Ginny incluso intentó entablar conversación con ella, pero las respuestas cortantes y monosilábicas de Holly sofocaron incluso la exuberancia habitual de la pelirroja.
Holly confiaba en la información de los gemelos, y el aviso que recibió de Ironhorn acerca de que Dumbledore intentaba acceder a sus bóvedas junto con una descripción de sus "transferencias habituales" para que ella las confirmara en sus libros de cuentas fue suficiente para haber consolidado al trío como significativamente menos que sus amigos, y más bien los marcó como sus enemigos.
Todavía estaba contemplando los posibles pros y contras de convocar un Blood Feud con las familias Weasley y Granger por ello. Hasta ahora lo único que la detenía eran los gemelos.
Se las arregló para controlar su temperamento durante la comida y los habituales anuncios de inicio de semestre, pero una vez que regresaron a la sala común, todas las apuestas estaban canceladas. Cuando Ron y Hermione una vez más comenzaron a molestarla sobre su verano, Holly estalló.
"¿Así que ahora te importa?" Dijo desinteresadamente, ocultando su enfado lo mejor que pudo.
"¿Qué quieres decir con que por supuesto que nos importa?" Hermione se enfureció ante el desaire implícito.
"Podría haberme engañado", dijo el cuervo, sin dejar de hojear el libro que había guardado en su bolsillo en busca de tal escenario.
"Dumbledore dijo que no era seguro contactarte", protestó Hermione.
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The Dark Rise
FanfictionHolly Dorea Potter, la niña que vivió, es enviada a sus parientes una vez más con la muerte de su amado padrino, Sirius Black. Pero esta vez, encuentra un pedacito de su pasado y cambia el curso de su futuro. A instancias de la magia familiar, las h...