Bienvenida

247 13 19
                                    



Lucia, una latina de veintiun años llevaba un par de semanas en su nueva universidad, la universidad Hexside.



....


Dos muchachas se acercaron a una morena; la chica estaba con una sudadera negra a juego, unos deportivos blancos. Tenía la cara mirando hacia abajo, y un recipiente con pescado y un tenedor.

-Hola, capuchita, ¿eres nueva? -La peliverde amarillento hablo.

Lucia solo metió un trozo de pescado a su boca y asintió.

Ambas chicas se enojaron al ver cómo no les contestaba, e intentaron darle un puño, el cual fue frenado por la mano izquierda de la morena.

-¿Que tienes ahí, capuchita? -Una muchacha de pelo teñido de rosa se acercó a una morena encapuchada, señalando una maleta pequeña.

-Co-cosas, mu-mu-jer, co-co-cosas. -La morena tartamudeo.

-¿"Co-co-cosas"? Pensamos que te había comido la lengua el ratón, pero al parecer solo la dejo mordisqueada. -La muchacha de pelo verde amarillento bromeó.

En eso, dos chicas morenas y una de pelo aguamarina aparecieron tras las otras dos, y dieron en voz baja.

-Tenemos curiosidad, vamos a ver... Tal vez aquí capuchita tenga algo que nos sirva. -Las chicas agarraron la mochila, y la morena vio todo sin más importancia.

Lo primero que vieron al abrirla fue dos sacos de sudadera, los cuales tiraron al suelo, y la morena recogió sin darle más importancia.

Después, pudieron ver bien el interior...

-¿Una libreta de... Quinientas hojas? ¿De que materia es esto? -Una morena con canas pregunto.

-Es-es de todas la-las mate-rias, no-no tengo ta-tanto di-dinero para va-varias libretas. -Lucia dijo. A pesar de estar tartamudeando, no tenía ni una pizca de miedo en su voz.

Las muchachas no dijeron nada, y siguieron sacando cosas; sacaron otra libreta, pero está tenía un candado que impedía ser abierta: la libreta era de pasta dura y hojas opalina, y la portada tenía grabado "Propiedad de Lucia Noceda".

-Awww, miren, el diario de capuchita. -La morena de pelo largo y lentes hablo.

-No-no es un dia-diario... ¡Y de-jenlo, e-es muy co-costoso! -Lucia dijo, algo enojada.

-Vamos a ver qué tiene capuchita aquí. -Dijo la pelirosa, mirando lo poco que se alcanzaba a ver cuándo intentaban abrir la libreta.

A duras penas pudieron observar un par de letras y dibujos que no se podían entender por la falta de espacio.

Tiraron la libreta sobre la mesa donde Lucía comía, y siguieron revisando.

-¿Un cigarrillo de marihuana? Capuchita tiene buenas cosas aquí. -La pelirosa lo vio, e intento fumarlo, pero Lucia se lo arrancó de las manos. -¿Que sucede? ¿La adicción es la que te hace ser tan "ta-tar-tamuda"? ¿O tal vez la adicción te hace no tener dinero para pagarte las cosas normales?

-Es crack. -Dijo Lucia, está vez sin trabarse; todas se sorprendieron al saber que era crack- Si soy a-adicta no es tu-tu pro-problema... ¡Ahora dámelo, me valió bastante! -Volvio a decir algo sin tartamudear.

Las chicas fingieron alejarse, pero la pelirosa se volteo para darle un golpe a la encapuchada, pero está volvió a frenarla con su mano izquierda.

-¡Suelta mi mano! Eres una adicta sin dinero, no voy a permitir que me toques. -Grito la pelirosa.

Mujer Bonita. Adaptación lumity.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora