Capítulo 1.

120 5 0
                                    

Erza no sabía cómo reaccionar, su padre el maestro Makarov no había fallecido, aunque usar Fairy law lo había dejado muy débil, el viejo aún era lo suficientemente duro como para resistir, eso sí, dejándolo por desgracia en una silla de ruedas, aunque la alegría de Titania era enorme, un sentimiento negativo la rodeaba, en ese momento, Gray y Juvia llegaron al gremio y se acercaron a Erza silenciosos y con rostro serio, Juvia la miraba desolada y Gray le colocó la mano sobre el hombro. Erza lo miro seria.

-¿Qué pasa chicos? me estáis asustando, están Natsu y Lucy bien- Wendy se acercó para escuchar, aprovechando para curar a Juvia que tenía una herida horrible en el costado.
-Primero Gray, Wendy san por favor está más herido que yo- Gray negó algo sonrojado
-No Wendy, cura a Juvia por favor-
La peli azul sonrió momentáneamente y volvió a ponerse triste mirando a Erza.
-QUE PASA CHICOS-
Gray se sentó junto a ella.

-Erza, lo siento mucho Jerall no ha sobrevivido -.

Erza miró a Juvia y está negó,

-Lo sentimos mucho Erza -san -

En ese momento la guerrera se levanto con velocidad, pero al segundo volvió a sentarse derrotada la armadura le pesaba como nunca y todo se estaba nublando a su alrededor.

-Erza san por favor no te levantes tienes muchas heridas -. Wendy intentaba curarla pero había curado ya a tantos que apenas podía mantenerse ella también, la pelirroja al notar como se estaba esforzando la joven la cogió suavemente del brazo.

-Wendy deberías descansar Porlyouska está por aquí y ya nadie va a atacarnos, te prometo que no me moveré de aquí, mientras tú descanses conmigo-

La joven la miró apenada, Charle que llegaba con Happy, Natsu y Lucy se sentó junto a Wendy.

Los chicos se sentaron frente a Erza, Happy se subió a su regazo, ella miro a Gray y a Natsu.

-Tenemos que ir nosotros, no quiero que el consejo se lo lleve-.

Lucy cogió la mano de Erza y la apretó con fuerza, Happy sentado sobre ella la abrazaba con fuerza.

-Ya está hecho Erza, Virgo y capricornio están cuidando de él, cuando hayamos descansado todos, iremos donde tú digas y podrás despedirte de él como merece. -

Erza no aguanto más y arranco a llorar haciendo que todo el gremio por unos minutos y como jamás había ocurrido se quedase en absoluto silencio.

Al no aguantar más las miradas de pena de sus compañeros se levantó con dificultad.

-Por favor no me sigáis, yo, necesito estar sola- al ver que sus amigos iban a levantarse se adelantó, salió del gremio que apenas se mantenía en pie, caminaba entre las ruinas de Magnolia mientras una potente tormenta se acercaba por el norte, ella, ella no podía hacer otra cosa que andar y andar sobrepasada por sus sentimientos.






Ni siquiera se dio cuenta de que había comenzado a llover, simplemente andaba y andaba hasta llegar a aquel río donde no hacía tanto él le había declarado su amor.

Sus ojos estaban tan hinchados y llovía tanto que apenas veía a su alrededor se quedó allí sentada rota por el dolor, consumida y sola... Vacío sus pulmones con un grito desolador, sin darse cuenta de que a lo lejos una joven de piel blanquecina la miraba sin saber muy bien si acercarse o no.




Tras verla sin intención de moverse de allí, la joven se acercó y se sentó a su lado poniendo un paraguas sobre ella. Su voz suave llegó a la embotada cabeza de Erza.

-Lo siento mucho Erza, fue culpa mía, si yo hubiese ganado a esa bruja esto no habría pasado-

La joven sin mirarla respondió con la voz ronca por el frío.

-Sabes que nadie podía con esa bruja, se que hiciste todo lo que pudiste estoy muy feliz de que estés viva Mirajane, me diste un susto enorme-

-Dicen que tú me encontraste, gracias por protegerme Titania- dijo empujando levemente el hombro de la joven. -Si no hubiese sido por ti no se que hubiera pasado conmigo-.

La pelirroja no podía contestar, así que la joven de pelo blanco siguió hablando.

-Tienes que estar congelada, si no quieres venir al gremio, déjame llevarte a casa, Wendy está preocupada por tus heridas, bueno, todos lo están.-

Sin notar movimiento en la joven, ella se levantó y se coloco frente a Erza, el paraguas no había dejado de cubrirla y está levantó la mirada encontrándose con los azules ojos de Mirajane, su flequillo cogido con su gracioso pirri se había caído sobre su cara, se estaba empapando pero no dejaba de mirar fijamente a Erza.

-Acaso tengo que vencerte para llevarte a casa. Te recuerdo que yo ya estoy recuperada y tú apenas puedes mantener tu armadura más sencilla-.

Tras unos minutos mirándose fijamente Erza hablo.

-Me duele tanto Mira, lo intente con todas mis fuerzas lo intente y aún así sigo sin ser lo suficientemente fuerte para protegeros a todos.-

-Vaya, vaya- Mira la miró decidida, acaso no te has lanzado contra un meteorito gigante sin pensarlo Titania, reina de las hadas,- la miró con cariño y se agachó quedando frente a ella.

-El destino tiene caminos curiosos Erza y seguro que él murió feliz sabiendo que eras tú quien lo amaba, sabiendo que hubieses dado la vida por él, tienes que seguir adelante por Jerall, por su recuerdo, por todos nosotros, por favor, ven.-

Mira le tendió la mano y Erza la cogió, al levantarse las piernas le fallaron, tras la batalla contra I. Belserion habían sufrido demasiado daño, Mirajane la sujeto por la cintura y Erza paso su brazo sobre los hombros de la joven.
Escucho un pequeño gemido de dolor.
-Con que estabas curada eh, siento que estés aquí, siento que estés congelada por mi culpa-

Mirajane le sonrió,- lo mejor será tomar un baño.-

Y así bajo la lluvia las dos se fueron hacia la residencia donde dormían las chicas.















.

Erza x Mirajane Fairy Tail Donde viven las historias. Descúbrelo ahora