Ese día conocí a la persona que terminó siendo mi amigo mágico, pero no crean que fue la última vez en mi vida. No, no, hemos tenido demasiados encuentros a lo largo de los años, diría que cien como mínimo. Si quieren les puedo contar varios de ellos.
Uy, ya llegué al centro comercial. Vaya que eso fue rápido, hablar con ustedes hizo que el trayecto fuera más corto, jaja. Mientras busco a Zetsuko y Katana, supongo que les puedo contar uno de los cientos de recuerdos que tengo con Zarbon-chan, y más porque recordé uno de ellos que tiene que ver, justamente, con ir al centro comercial.
Estoy caminando entre el mar de gente que hay dentro del lugar. Suele concurrir mucha gente a este centro comercial, pero hoy en particular hay muchísimas más personas porque está la feria, y a la vez es fin de semana de descuentos en montón de cosas como ropa o electrodomésticos, entonces hoy me tengo que comer todo este tumulto de gente, pero bueno, qué se le va a hacer.
Espero que Zetsuko y Katana no anden muy lejos, deben estar comprando cerveza y ropa, el tema es que la cervecería a la que va Zetsuko queda al otro lado del primer piso, y Katana puede estar en cualquier tienda de ropa de las quince que creo que hay. Tengo que atravesar a todas las personas para poder encontrarlas.
Okey, mientras trato de caminar sin que me atropellen (como en tercero de escuela, que una vez me caí y me pasaron por arriba no sé cuántas personas, y para colmo ese día había una fiestita en la escuela, creo que por el Día del Niño, y había castillo inflable y todos querían subir, por eso andaban a las carreras y no se fijaban por dónde pisaban. Esa fue una de las peores fiestas de mi vida, jaja), les voy a contar sobre ese recuerdo que les mencioné.
Fue cuando yo tenía nueve años. Ese día, recuerdo que mi padre y yo estábamos yendo al centro comercial en una camioneta que un compañero de trabajo suyo le prestó. Ay, esa camioneta era mi infancia, ese señor se la prestaba a mi papá de vez en cuando, y salíamos a pasear muy seguido en esa camioneta, una vez, me acuerdo que la tuvimos por un mes entero, íbamos a dar un paseo por la costa en las noches, durante las tardes solíamos ir a otras ciudades, también solíamos ir a los mercados grandes para comprar muchísima comida y artículos de limpieza grandes que no solemos conseguir en el mercado que está cruzando la avenida, pero una de las cosas que más ternura me da recordar es que mi papá me llevaba a la escuela en esa camioneta cuando la teníamos, y eso que la escuela me quedaba a tres cuadras, podíamos ir caminando perfectamente, pero él iba a trabajar en esa camioneta, así que me dejaba en la escuela con la camioneta, que le quedaba de paso al trabajo.
En fin, volviendo a Zarbon-chan, papá bajó de la camioneta en el estacionamiento del centro comercial. Mamá había ido a comprar unos lentes nuevos, y la fuimos a buscar en la camioneta para que no tuviera que volver caminando o en autobús. Recuerdo que fue un jueves en la mañana. Yo me quedé en el auto jugando con mis ponys de My Little Pony que me había ganado en McDonald's. Durante ese mes que estaban dando los juguetes de My Little Pony en la Cajita Feliz yo le pedía a mamá y papá que me llevaran todos los días para poder tener todos los juguetes, pero lastimosamente sólo llegué a tener tres: Rarity, Pinkie Pie y Twilight.
─Amigas, ¿y si le preguntamos a mamá y papá si me pueden llevar a McDonald's?─ les pregunté a mis ponys. Yo amaba hablarles, jaja─Quizás podamos conseguir a Rainbow Dash, Apple Jack o Fluttershy antes de que nos cambien de juguetes...
Entonces alguien golpeó suavemente el vidrio de una de las ventanas de la camioneta. Aparté mi mirada de las ponys, y me encontré con Zarbon-chan de nuevo.
Yo abrí la puerta y me bajé de la camioneta.
─¡Eres tú de nuevo!─ exclamé con felicidad. Hacía cuatro años que no lo veía.
─Sí, soy yo─ se corrió su trenza─. Creo que la otra vez que nos vimos no te dije mi nombre. Soy Zarbon.
─¿Zarbon?
─Así es, ¿y cuál es tu nombre, pequeña?
─Abril, como el mes de abril─ reí.
En ese entonces me hacían muchas bromas diciendo "abril, mayo, junio...". Pinches pendejos.
─No tengo idea de meses, pero tu nombre es muy bonito─ me acarició la cabeza.
─Jiji─ sonreí tiernamente─. ¿Quieres jugar conmigo y mis ponys hasta que mis papis lleguen?
─Me gustaría, pero me tengo que ir.
─Owww, ¿en serio?─ hice un pequeño puchero.
─Pero prometo que si un día tengo más tiempo para jugar contigo, lo haré─ me guiñó el ojo.
─Más te vale cumplir tu promesa─ le dije, casi que llorando.
No sé cómo hice para agarrarle tanto cariño, siendo que antes de ese día sólo lo había visto una vez en mi vida.
No, espera, ya sé por qué: porque él es muy especial para mí.
Mis padres volvieron justo cuando Zarbon-chan se fue.
─¡Mami!─ abracé a mi mamá.
─¿Cómo te portaste, tesoro?
─Muy bien, estuve jugando con mis ponys. ¿Me pueden llevar a McDonald's?─ junté las manos y los miré con los típicos ojitos de perro triste.
─¿Ahora? Son las nueve y pico de la mañana.
─¡Dale, mami! McDonald's está dentro del centro comercial y en la tele dijeron que este mes estaba más barato. Por favor...
─Hoy no, Abril, pero mañana en la tardecita puede ser, no sé, no te estoy asegurando nada, pero...
─¡Qué bieeeeeen!
Yo siempre con mucha ilusión, jaja.
Uy, creo que encontré a Katana.
ESTÁS LEYENDO
𝗠𝗜 𝗔𝗠𝗜𝗚𝗢 𝗠𝗔́𝗚𝗜𝗖𝗢 ❱ Dragon Ball Z ✔
Fanfiction¿Qué sería tener un mejor amigo que viene de otro planeta? Este es el relato de Abril Horie, una adolescente que desde que era una niña pequeña, ha estado conviviendo con un hombre extraterrestre, su mayor compañía en su vida. #TeamDragonBall 2023 |...