XIX

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Jungkook

Respiré profundo y abrí la manija de mi casa para entrar. Como me lo esperaba estaba mi madre esperandome, estaba sentada en ese sillón de terciopelo sumamente costoso con una copa de vino en la mano, se sentía un gran ambiente tenso, posaba una mirada penetrante sobre mí.

———Me diras ¿dónde carajos de fuiste? -dijo mientras tomaba un sorbo de su copa de vino-

—Fuí a caminar por ahí, después a la casa de uno de mis amigos.

—Vamos Jungkook, no nací ayer. Necesitaras algo mejor para mentirme.

—No miento, es la verdad. ¿Por qué te mentiria?

—Ahora eso no importa ¿Sabes la vergüenza que nos hiciste pasar? ¡Lo sabes!

—Perdón pero no pensaba pasar ni un minuto en esa estúpida fiesta.

—Que fácil ¿verdad? Irte y dejarnos en ridículo, por Dios Jungkook eres un Jeon y comportate como tal.

—Pues es un asco ser un Jeon.

Antes de que pudiera decir algo más mi madre me dió una cachetada, sentí mi mejílla derecha arder fuertemente. Lancé una mirada asesina hacia ella, ella solo se mantuvo con esa mirada fría y su mandíbula tensa.

—Mal agradecido, te hemos dado todo. Una gran casa, ropa de la mejor marca, escuela privilegiada, viajes, dinero. ¡Te hemos dado absolutamente todo!

—¿Y? De que me sirve eso si estoy vacío por dentro, nunca recibí atención o amor por ustedes solo cosas banales, el dinero no lo es todo.

—No me vengas con el amor y esas ridículeces Jungkook, varias personas matarian por tener tu vida.

—Si por mí fuera, creeme que dejaría esta familia.

—Anda, hazlo, largate. A ver que haces sin nuestro respaldo. —me mantuve callado ante sus palabras— ¿Qué pasa Jungkook? ¿Te comió la lengua al ratón?

—Algún día lo haré.

—No seas ridículo, no dejaré que vivas tu rebeldía conmigo. Escuchame bien, aunque tenga que mandarte a un internado en Croacia no dudaré en hacerlo ¿entiendes?

—Pudrete

Salí de aquella inmensa sala para subir rápidamente por las escaleras. Llegué a mi cuarto y lo cerré de un portazo, la odiaba tanto, lo único que le importaba era nuestra apariencia ante la sociedad, solo eso. Al ser Jeon estoy condenado a seguir con la empresa de mi padre, ni siquiera les importa que quiero yo, mi destino se forjó desde que nací en esta familia.
Mis lágrimas eran aún más abundantes, sentía una gran presión sobre mi pecho. Odiaba todo esto, soy preso en mi propia vida y eso me consume cada día más. Lo único bueno y que me hace sentir completo y fuera de este mundo es Tn, ella es un rayo de luz en mi nublada vida. Con ella siento que todavía hay algo de sentido en las cosas, pienso que quizas hay otro destino, que lo puedo forjar yo mismo. Me hace sentir drogado, ella es una droga que nunca quisiera dejar, tan fuerte que produce alusinaciones y dopamina en mí, tan liberado, tan liviano, tan drogado. Me volví adicto y dependiente a ella, si ella se va mi alma morirá con ella y solo seré un muerto en vida.

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Tn

Estaba tan cansada, lo único que quería era dormir por un buen rato. Pasar la noche con Jungkook había sido fantástica, nunca había tenido algo así, no solo lo digo por el lado sexual sino por el sentimental. Esa conexión emocional que tengo con él es increíble, me hace sentir de forma inexplicable, no puedo expresar lo que siento por él.

Cuando llegué a mi casa ví a Taemin en la entrada, lo raro es que tenía unas maletas y su rostro era serio ¿qué está pasando? Esto me preocupa.

—Taemin, ¿qué haces acá?

—Y-yo, vine a despedirme —dijo con la mirada baja—

—¿A qué te refieres?

—Me voy del país, me llegó una oferta de trabajo en Estados Unidos y me mudaré.

—¿Q-qué? No estas hablando en serio —me costaba creer que no volvería a ver a Taemin—

—Es en serio, pero no podía irme sin antes despedirme, me iré del país y lo más probable es que no nos volvamos a ver.

No sabía que decir, esta situación cayó de golpe ¿no volver a verlo? Eso me duele. Antes de que articulara palabra alguna sentí los labios de Taemin sobre los mios, correspondí a su beso, era lento, lleno de tristeza y melancolía, podía sentir sus lágrimas que caían con más fuerza. Ambos nos separamos del beso y nos miramos fijamente.

—Quiero que sepas que te amo y lo más probable es que no vuelva a amar a nadie como te amé a tí, lastimosamente mi amor no es correspondido, todos estos años han sido los mejores al tu lado, cada mes, cada semana, cada día, cada hora, cada minuto, cada segundo fueron los mejores a tu lado.

—Taemin yo...

—Tranquila no digas nada, yo solo fui quien se enamoro, tú no tenías la culpa. Pero cada beso, cada caricia, quedaran marcadas en mí. En esos momentos me sentía muy amado por tí, quizas esto sea lo mejor para mí, tengo que soltarte por mi bien, tú me quieres pero yo te amo.

Antes de que siguiera el sonido de una bosina nos llamó la atención, era un taxi.

—Ya llegó mi taxi, ya debo irme.

—Espera —lo jalé hacia mi y lo abraze— estoy agradecida de haberte conocido, quizas en otra vida fuimos destinado, te quiero y eres alguien importante para mí, gracias por todo, te quiero —susurré en su oído—

Él se aferró más a mí y mis lágrimas empezaron a caer, me dolía saber que ya no lo vería.

—Bien, ya es hora de irme.

Cortó nuestro abrazó, tomó sus maletas y se dirigió al taxi, el señor lo ayudo con su equipaje. Antes de que entrara nos despedimos con una seña, Taemin cerró la puerta del auto y se puso en marcha.
Mis lágrimas caían una tras otra, me odiaba por dañar sus sentimientos. El daño ya está hecho, no puedo hacer nada, espero que conozca alguien que lo ame como el tanto lo merece. Todavía no prosesaba el saber que no lo volvería a ver, aquel chico que se volvió como mi familia, que estuvo conmigo en las buenas en las malas, me ofreció su amistad y su amor.

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⏰ Última actualización: Nov 07, 2023 ⏰

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Bad Romance  || Jeon Jungkook ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora