XII

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La noche seguía en pie, de una manera demasiado hermosa, el pecoso se encontraba en el regazo de uno de los chicos que le habían gustado, se dejo llevar, los besos danzaban, las caricias eran ardientes, los jadeos que escapaban de su boca al sentir como las manos del hombre que tenia debajo de el recorría toda su anatomía, apretando y amasando.

- Ah~- Un pequeño gemido ahogado salió de su boca al sentir como uno de sus pezones era atacado por la boca del extraño, el alcohol que tenia por todo su sistema no dejaba que pensara quien era, pero no le importaba.

Las manos expertas por el mayor se colaban por sus pantalones apretando su trasero con destreza sacándoles un jadeo, un brillo celeste ilumino en lugar, Izuku bajo su cabeza y reconoció esa mirada.

- Shochan~- Dijo el pecoso entre jadeos pero no hubo respuesta, eso lo puedo ansioso y sin darse cuenta movió su cadera encima del ya despierto miembro del extraño.

- Joder~ no soy Shoto, soy Dabi, pequeño~- Gruño el mayor mientras mordía de manera suave el botón rosado del pecoso quien se estremeció por la pequeña corriente que recorrió su sistema.

Izuku al oír eso se movió de manera suave y miro al mayor de manera coqueta, la poca luz que iluminaba la habitación era hermosa, la Luna los acompañaba dando su luz para que los dos amantes se amaran

Ambos seguían en su burbuja de lujuria y deseo, pero la puerta había sido abierta de manera abrupta por un rubio cenizo el cual soltó un gruñido cargado de furia.

- ¿¡QUÉ COÑO HACEN EN LA HABITACION DE MI AMIGO!?- Grito de manera dura mientras caminaba hacia el interior del lugar encendiendo la luz en el proceso y se fijo que el pecoso quien había bailando hace un par de horas antes estaba encima de uno de los de 2 de carrera gimiendo ahogado por las manos del mayor que estimulaban su ano.

- Un poco de intimidad ¿no lo crees?- Dijo el mayor mientras seguía con su trabajo arrancando pequeños gemidos de la pequeña boca del pecoso quien miro de reojo al cenizo y se sonrojo.

- ¿Y por que no se van a un hotel?- Dijo el cenizo con sarcasmo acercándose de manera peligrosa al dúo, Izuku ante eso se tenso.

Dabi al ver como el pecoso se había tensado por la presencia del subió saco sus manos de donde las tenia colocadas antes.- Tranquilo cielo, ahora seguimos.- Beso la frente del pecoso para bajarlo de su regazo y dejarlo en la cama con cuidado.

Bakugo se acerco de manera mas furiosa para tomar al mayor y darle un puñetazo en toda la cara para hacerlo caer contra el suelo, el pecoso vio eso y se tapo debajo las sabanas mientras se abrazaba a su mismo, el solo quería olvidar.

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Los golpes seguían una y otra vez, el pecoso se levanto de su lugar para detener a Bakugo pero este le dio un puñetazo en el estomago que le saco todo el aire de su sistema haciéndolo caer contra el suelo.

- Eso os pasa por gilipollas.- Se levanto con los puños ensangrentados y miro al pecoso quien trataba de ponerse en pie, pero el dolor de su estomago se lo impedía, el cenizo se sentó en la cama de manera tranquila mientras podía ver como los ojos del pecoso se llenaban de lagrimas y descendían por sus mejillas pecosas.

Al cabo de unos minutos subió Kirishima y Todoroki los cuales buscaban a sus amigos, Shoto al ver a Izuku en el suelo llorando mientras se hacia bolita en su lugar y comenzaba a hiperventilarse.

- Tranquilo Izuku, respira suave y relájate, no paso nada malo.- Hablo el bicolor de manera suave mientras tomaba mas manos del pecoso con ternura y miro al fondo viendo a uno de los mayores que no reconoció al instante.

Izuku temblaba como una hoja de papel mientras miraba a ambos lados asustado mientras buscaba un lugar seguro, luego sus ojos pasaron al cenizo quien soltó un gruñido molesto.

Kirishima vio la escena entre el pecoso y el cenizo asique solo opto por mirar como estaba el mayor y se percato que estaba inconsciente que no dudo en llamar a una ambulancia dando su dirección y describiendo un poco el como sucedió pero omitió la pelea de su mejor amigo con el.

- Ahora Katsuki, te vas de aquí con Shoto e Izuku, no te puedes quedar.- Dijo el pelirrojo algo molesto por el temperamento explosivo de su amigo, que solo le dio un capón para mirar a Izuku.

Izuku logro regular su respiración que se puso de pie de manera temblorosa para abrazar a Shoto.- Quiero irme a casa, tengo que hacerlo, Shindo me espera.- Murmuro bajito para luego caer desmayado por el cumulo de las emociones, y que Shoto se percato de un moratón que se empezaba a tornar rojizo.

- ¿Lo has golpeado?- Pregunto el pelirrojo quien giro su cabeza hacia el cenizo el cual solo rodo los ojos.

- Me quería separar de la pelea que tuve con el de 2 de carrera y solo lo empuje.- Dijo restando importancia al asunto pero una cachetada por parte del bicolor impacto en su mejilla cosa que lo saco un poco de su trance y se fijo bien en como el moratón del peliverde cambiaba de color.

- Le pones una mano encima de nuevo y te juro que te arranco la cabeza.- Amenazo el bicolor para cargar al pecoso estilo princesa para salir de allí de manera rápida, las personas miraban la escena pero el bicolor no se percato que el cenizo lo seguía.- ¿Qué coño haces?- Le pregunto con tosquedad mientras salía de allí con el pecoso en sus brazos el cual seguía desmayado.

- El pelos de mierda me mando con vosotros ya que dentro de poco vendrá la ambulancia y de seguro vendrán los maderos.- Dijo el cenizo con calma en la voz mientras se fijaba mejor en el cuerpo del pecoso y su corazón comenzó a latir con ferocidad que un poco mas y se le sale del pecho.

- Yo me voy a casa de Izuku, ven si quieres pero no hagas nada de ruido.- Dijo el bicolor con seriedad mientras seguía caminando por las calles en un silencio sepulcral y demasiado incomodo entre los dos.

Ambos llegaron a la casa del peliverde, Shoto sabia donde Izuku guardaba la llave de repuesto asique agarro una pequeña maceta con su mano libre y saco la llave para tomarla en su mano y abrir la puerta de manera silenciosa, Hades corrió hacia la verja para ladrar.

- Shhh Hades, calla soy yo, Shoto.- Dijo el bicolor de manera rápida mientras acariciaba la cabeza del pequeño cachorro el cual miro al cenizo para gruñir molesto y alejarse de allí con rapidez hacia su caseta.

Todoroki al notar como el perro se había ido a su lugar camino hacia el interior de la casa siendo seguido por el cenizo quien no dijo nada de nada, ambos subieron en silencio por las escaleras hasta el cuarto del pecoso y Shoto acomodo al pecoso en la cama con cuidado.

- Ahora, tú, ve a por un vaso de agua y esperaremos a que Izuku despierte y decida si te quedas o te largas.- Dijo el bicolor mientras recogía un poco el suelo de la habitación del pecoso para que estuviera decente y tomo la carta que el previamente le había dado hace un par de horas y la dejo en el escritorio dentro de un libro.

Musical LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora