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"Quien de verdad te quiere nunca vuelve,
porque nunca se va"

🫀

- Jeni - gritaron a mis espaldas-

Me giré al reconocer la voz y corrí para abrazarlo donde me recibió con gusto.

- te extrañé - dije sincera-

- ya estoy aquí - murmuró-

- estás por tiempo limitado

- sabes que puedes llamarme y escribirme a cualquier hora

- pero no es lo mismo

- ya, no es lo mismo - repitió acariciandome el pelo-

- suerte hoy - murmuré separandome-

- suerte hoy también

Bellerín besó mi frente y se dirigió a calentar junto a los demás.

- yo también podré abrazarte, o no? - sonrió Chadi-

- hombre claro - envolví su torso-

- yo también quiero - se acercó Abde-

Lo unimos al abrazo y poco después nos separamos con cuidado.

- suerte, no quiero que os lesioneis - acaricié sus brazos-

- suerte vosotros también - sonrió Abde estrujandomé en otro abrazo-

Y tras una sesión de abrazos el partido comenzó con buenas sensaciones marcando el primer gol en el minuto 25 por parte de João Félix que todos celebramos sobretodo yo, había creado buenas migas con el portugués y no podía estar más orgullosa de él.

Sobre el 75 ya ibamos 4-0 en el marcador y decidieron cambiar a Balde el cuál se dirigió a los vestuarios con prisa, miré a Iñigo que me sonrió y me dejó ir.

- que te duele? - me acerqué a él, estaba sentado junto a sus cosas-

- la espalda baja

- riñones o lumbares?

- lumbares

- déjame darte un masaje, o quieres que llame a los médicos?

- puedes llamar a los médicos? Y el masaje me lo das esta noche en tu cama - sonrió un poco-

Asentí y fui directa al banquillo, avisé a las asistencias y fueron directos, yo me quedé en el banquillo de pie a un lado de los jugadores.

- como está? - preguntó João Félix, el cuál estaba a mi lado-

- con un poco de dolor

- en donde? - rodeó mi cintura con un brazo y alzó la cabeza para verme-

- en las lumbares

- lo están atendiendo? - se unió Ferran a la charla-

- así es - asentí-

De repente un gol más se unió al marcador, Cancelo había marcado, todos celebramos con una gran sonrisa, João Félix me abrazó con fuerza y luego lo hizo Ferran.

- que tal? - cuestionó el portugués a mi novio-

- ahora bien, me han echado un spray y la verdad casi no me duele - rodeó mis hombros-

- me alegro mucho - le sonrió y le chocó la mano-

Y así terminó el partido, felicitaron a los rivales y se dirigieron a los vestuarios.

Amar en condiciones • Alejandro Balde •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora