Sexo y Oclumancia// Traducción Dramione

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La fiesta de Ginny se estaba llevando a cabo en el departamento que ella y Harry compartían y aunque Hermione había estado allí en múltiples ocasiones, se encontró abrumada por los nervios cuando salió de la red Flu. Había logrado llegar a casa la noche anterior sin más incidentes y se había metido fácilmente en la cama, exhausta y todavía ligeramente ebria. Cuando despertó, había tomado algunas pociones, tomó su píldora anticonceptiva con más entusiasmo de lo normal y tomó una taza de té mientras miraba por la ventana y reflexionaba sobre los eventos de la noche anterior.

Estuvo sentada allí durante horas, simplemente mirando por la ventana mientras intentaba comprender su violenta respuesta emocional. El sexo había sido increíble, había alcanzado un estado de inconsciencia que nunca antes había logrado, y había sido liberador y validador saber que había tenido razón sobre lo que necesitaba para salir de su cabeza. Las consecuencias, sin embargo, no fueron nada ideales y realmente no podía decir si fue por la intensidad de la experiencia o por algo más.

Al final tuvo que admitir que, si bien no podía estar completamente segura del motivo, los resultados habían sido esclarecedores. Y aterrador.

"¡Mione!" La cumpleañera la envolvió en un cálido abrazo, sacándola de sus pensamientos. "¡Te ves increíble!" Ginny dio un paso atrás y abrió mucho los ojos. "Tuviste un polvo, ¿no?"

"¡Ginny!" Hermione siseó el nombre, asombrada por las capacidades perceptivas de la mujer más joven.

Su amiga se rió por completo. "Hermione Granger, bruja sucia". Ella se inclinó con aire de conspiración. "¿Quién fue?"

"Nadie que conozcas. Y no se lo digas a Ronald".

"No eres divertido. Y por supuesto no se lo diré. Perdería la cabeza".

Hermione suspiró y dejó que la cumpleañera la llevara a la sala donde un coro de saludos les dio la bienvenida. Ron la miró y le dio la espalda, volviendo a la conversación con Neville. Hermione se pasó el cabello por encima del hombro y le sonrió rápidamente a Ginny mientras la abandonaban para navegar sola en la fiesta. Luna Lovegood estaba sentada sola en el sofá de dos plazas, por lo que Hermione se unió a ella y pronto se vio envuelta en una conversación bastante animada sobre Nargles y galletas de jengibre. Si alguien le hubiera pedido que explicara cómo estaban relacionados, Hermione no habría podido hacerlo, pero Luna estaba presentando un argumento muy fuerte a favor de algo .

"¿No estás de acuerdo Ron?"

Hermione levantó la vista sorprendida al ver que Ron estaba parado frente a Luna y ella, y parecía estar esperando decir algo.

"Si seguro. Mucho sentido, Luna. ¿Te importa si me robo a Hermione por un momento?

El aireado rubio se levantó y le dio una palmada en el hombro a Ron. "Cuidado con los arrebatos, Ron".

"Bien. Servirá." Le frunció el ceño a Hermione. "¿Podemos hablar en privado?"

No dispuesta a ser llevada a una habitación vacía y que su ex prometido le explicara cómo necesitaba registrarse en San Mungo para una evaluación de salud mental, Hermione frunció el ceño y se preparó para una discusión.

"No estoy muy interesado en rehacer nuestras conversaciones anteriores".

Su rostro enrojeció y ella supo que sus instintos habían sido correctos.

"Preferiría no discutir este tema en particular en público".

Hermione se puso de pie. Su declaración era un claro indicio de lo que quería discutir, y ella no estaba en absoluto interesada.

"Ya no estamos juntos, Ron. Cualquier idea que tengas sobre mis actividades privadas puedes guardarla para ti".

"'Mione-"