Harry Potter y el torneo de tres magos -COMPLETO-

Capítulo 17

Harry salió con cautela de la tienda y se encontró en una delgada línea de árboles. Más allá de ellos había un gran claro, con gradas en el lado cercano. Rápidamente se puso a su derecha y se agachó detrás de un árbol; Si el dragón ya lo estaba buscando, quería ponerse a cubierto de inmediato. Cuando no llegó ningún ataque, Harry se volvió hacia la tienda y levantó la varita.

"Accio Fuego!" La escoba de Harry apareció inmediatamente sobre la tienda y se apresuró a sus manos. Al menos algo iba bien.

Harry agarró la escoba y echó otro vistazo a su entorno. No quería volar ciegamente a la boca abierta del dragón, y el dragón tenía que estar por aquí, en algún lugar, era el objetivo de la tarea, después de todo. Pasó un momento antes de que Harry localizara al dragón. Estaba en el extremo más alejado del recinto, acurrucado hasta el suelo. Finalmente satisfecho de no estar en peligro inmediato, Harry montó su escoba y cruzó hacia adelante, moviéndose suavemente a través de los árboles.

"Y ahí está", dijo Bagman al altavoz. "Parece que Harry ha convocado una escoba! ¡El plan bastante inteligente!"

Harry maldijo en voz baja. Bagman acababa de anunciar la táctica de Harry a los otros competidores. Harry dudaba de que Krum o Delacoer pudieran convocar escobas, porque no sabían la ubicación del cobertizo de quidditch, o qué escobas estaban aseguradas allí. Diggory, sin embargo, podría.

Cuando Harry salió de los árboles, el Short Snout inmediatamente comenzó a rastrear su movimiento. El dragón retrocedió ligeramente, adoptando una postura protectora sobre el nido. Debajo del dragón, Harry podía ver el destello de oro —, lo que asumió era el huevo.

Esto no iba a ser fácil. Harry trató de convencerse de que esto era solo otro partido quidditch. La oposición se adelantó en 110 e intentó hacer que su liderazgo fuera insuperable. Harry tuvo que hacer algo para distraer al otro buscador para poder atrapar a la soplón y ganar el partido. Una diversión de algún tipo.

Harry levantó la varita y disparó chispas rojas a un lado. El dragón ni siquiera movió los ojos, y mucho menos volvió la cabeza.

"Eso no funcionará", dijo Bagman a la multitud. "Los dragones son más inteligentes que eso!"

Harry frunció el ceño. Eso no fue necesario; Bagman no necesitaba narrar todos los fracasos de Harry. Pero si el dragón iba a mantener su atención en Harry, entonces solo había una opción para una distracción: el propio Harry.

Harry volvió a su escoba y se elevó más alto en el aire. Quizás esto no sería tan malo. Harry ciertamente no tenía la profundidad del conocimiento de ortografía que tenían los estudiantes de séptimo año, pero Harry podía volar con los mejores. Harry solo necesitaba confiar en sí mismo.

Harry apuntó la escoba hacia abajo y disparó a toda velocidad. Corrió hacia el dragón, dejando a un lado su escoba en el último momento. Escuchó el chasquido de la boca del dragón mientras pasaba disparado. Harry miró detrás de él — el dragón se había alejado un poco del nido, pero no del todo.

Harry repitió sus acciones. Se dio cuenta de que el dragón se estaba frustrando. Cualquiera que sea esta extraña amenaza, flotando casualmente sobre el nido del dragón, se negó a ser atrapado si el dragón permanecía en el suelo. El dragón disparó algunas explosiones tentativas de llama azul en el aire, pero Harry las esquivó fácilmente. Charlie tenía razón — el dragón retiró la cabeza antes de cada soplo de fuego, y Harry no tuvo problemas para apartarse del camino.

El dragón se bajó sobre el huevo de oro una vez más. Miró a Harry y siseó. Pequeñas chispas salieron volando de su boca y pasaron sus dientes.

Harry reconsideró su plan. Si el dragón se negara a tomar el aire para perseguirlo, Harry tendría que conseguir el huevo de oro mientras el dragón estaba en el suelo. Para hacer eso, Harry necesitaba hacer girar al dragón. Mientras giraba, estaría sobre sus piernas, y Harry tendría la oportunidad de lanzarse debajo de su vientre y agarrar el huevo.