CAP 1

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-Vamos chicas, tenéis que vestiros. Hoy viene mamá y Ryan a visitarnos.- Dije desde el pasillo. Mis hermanos y yo estábamos vistiéndonos para irnos a pasar el día con nuestra madre y hermano mayor. Ryan tenía 21 años y yo tenía 17. Teníamos 4 hermanos más Mike que tenía 15. Lissa que tenía 13 y las gemelas que tenían 8. Mis padres se habían separado y nuestra madre y Ryan se habían mudado a Nueva York para que Ryan fuera a la universidad dejándonos con nuestro padre. Cuando ellos se separaron mi padre se volvió alcohólico pero ninguno de mis hermanos lo sabe. Siempre les digo que va al trabajo pronto, antes de que nos despertamos y llega tarde. El es profesor de inglés en la universidad local. Aunque por poco tiempo porque hay veces que va borracho.

Después de la escuela yo tengo que ir a trabajar para poder mantener a la familia ya que si mi padre pierde el trabajo no vamos a tener nada más que lo que nos da nuestra madre todos los meses.

Pasé por la habitación de las gemelas solo para verlas vestidas con sus disfraces de princesa.

-Aria, ¿podemos ir así?- Preguntó Katelyn.

-Chicas, tenéis que poneros un vestido bonito. No podéis ir vestidas de princesas, estáis preciosas, pero tenéis que poneros algo para ir al parque.- Dije abriendo su armario. Saqué un vestido de Hello Kitty que era de rayas rojas y blancas con caras de la gatita abajo y se lo puse sobre las camas.

-Está bien.- Dijeron ellas suspirando. Entré en la habitación de Mike donde estaba abrochándose la camisa.

-Me gusta cuando te vistes bien.- Dije dándole un beso en la mejilla. El me sonrió.

-Tienes que vestirte. Siempre nos estás metiendo prisas pero tu no lo haces hasta que nosotros no estamos listos.- Dijo el.

-Lo sé, tengo que hacerme cargo de que las gemelas no vayan disfrazadas al colegio o que tengáis el desayuno preparado. Solo tengo que ponerme un vestido. No voy a tardar. Haz el favor de mirar como va Lissa.- Dije saliendo de la habitación y me metí en la mía. Me puse un vestido de verano de flores junto con unas sandalias blancas y me peiné un poco el pelo.

Cogí mi bolso donde metí algunas cosas que necesitaba como tiritas de Hello Kitty por si las gemelas se caían al correr y salí corriendo de la habitación para encontrarme a todos mis hermanos sentados en la mesa desayunando. Sonó el timbre y yo fui a abrir.

-Hola cariño.- Dijo mi madre abrazándome.

-¡Mamá!- Gritaron las gemelas levantándose de la mesa para abrazarla. Lissa, Mike y yo saludamos a Ryan y dejamos que pasaran para terminar de desayunar.

-¿Donde está vuestro padre?- Preguntó mi madre.

-No lo sé. Debe de estar preparando el curso que empieza.- Dije. Sabía que ahora mismo estaría en cualquier bar bebiendo. No llegaría hasta la noche después de que todos estuvieran dormidos. Siempre me las arreglaba para que ellos no se enteraran de lo que estaba pasando.

-Estamos en Agosto.- Dijo mi madre.

-Si, pero el siempre está trabajando.- Mentí. Terminamos de desayunar y salimos de casa.

-Aria, ¿podemos hablar?- Preguntó Ryan.

-Claro.- Dije sonriendo. Estábamos en el parque. Lissa y Mike estaban hablando con mi madre y las gemelas estaban jugando.

-¿Que está pasando? Puede que mamá te crea al decir que papá está trabajando pero yo no.- Dijo el seriamente.

-Desde que mamá y papá se separaron papá bebe un poco de lo normal. Ahora mismo debe de estar poniéndose hasta el culo de alcohol y vendrá cuando los demás estén dormidos.- Dije.

La lucha (Ezria)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora