Anton odiaba a Wonbin, su vecino. No lo soportaba y no podía ni verlo, pero desgraciadamente tenía un flechazo por Seunghan, el hermano de Wonbin, y las cosas empezaron a ponerse complicadas.
¿Qué pasaría si Wonbin le ofreciera hacer un trato un tan...
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- ¿Tan poco te quieres, Wonbin?
- Ya vale Shotaro. Tenía que intentarlo de alguna manera. Yo solo quiero que pase tiempo conmigo para que vea que soy bueno, incluso más que mi hermano. Que puedo ser un buen novio.
- Wonbin, pero a él...
- Que sí, que le gusta Seunghan, ya. Pero era la única manera de que me hiciera caso.
- ¿Cuál es tu plan? - Wonbin dejo la mochila sobre la cama de su habitación y miro a Shotaro, que se acababa de sentar en la silla de su escritorio.
- Enamorarlo. Enamorarlo tanto que se olvide de mi hermano.
- ¡Puede pasar! Yo no pierdo la esperanza. Y si no sucede, se que la pasaré mal, y que probablemente tenga que cumplir el trato porque soy una persona de palabra, pero es mi única oportunidad Shotaro.
- Esta bien, lo único que no quiero es que sufras.
- Lo sé, por eso te quiero -se acercó a Shotaro y beso su sien.
- Por cierto ¿Tu hermano sabe algo?
- ¿Del trato? No. Si él se entera de que he hecho esto, no me habría dejado hacerlo.
- Pero él sabe que te gusta Anton. Si el trato no saliera... ¿Que harás con él y...
- No quiero pensar en ello -interrumpió-, prefiero que no suceda. Ya veré que pasa dentro de un mes.
-Tienes mucha confianza en ti mismo, ¿eh? - Shotaro rió.
- Si no la tengo yo quién la va a tener - Wonbin sonrió.
•ू♡
Anton le explicó a Sohee todo lo hablado con Wonbin, el trato y lo que pensaba. Estaba a cuadros.
- Menudas bolas tiene-dijo riendo.
- Pierde el tiempo si cree que mi pensamiento hacía él va a cambiar.
- Pues podría -dijo Sohee y Anton lo miró-. ¿Qué? Lo odias sin motivo desde hace meses porque... ¿te tiró tierra encima sin querer? ¿porque te quiso enseñar una orquidea? Anton por favor, ni siquiera la conoces.
-Porque siempre me estropea todo con Seunghan.
- El mundo no gira en torno a Seunghan. El pelinegro rodó los ojos.
- Tengo derecho a odiar a quien quiera.
- Es cierto, -Sohee cerró su locker y siguió andando junto a su amigo- pero Wonbin es uno de los chicos más guapos que he visto, que encima parece que esta un poquito colado por ti y ni siquiera puedes verlo porque estas pendiente de su hermano. Da que pensar.
- Wonbin y yo... Escalofrios de pensarlo Sohee.
- Mira que eres terco.
De pronto el castaño apareció de la nada haciendo frenar a ambos el paso. Hablando del rey de Roma.
