Sin palabras ↝ FredxLuna

Capítulo 3

•Fuera del Plan•

Habían pasado días desde que todos los conocidos de Luna supieran que Fred y ella salían, o al menos suposiciones de ellos, sin confirmación ni nada, ni uno de los dos se atrevía.

Fred y George se habían vuelto frecuente en verla, saludarla por los pasillos, verla en sus clases, acompañala al lago y cosas de amigos. Ahora todos sabían que era amiga de los gemelos Weasley y eso por algún motivo le otorgaba un título de no a las bromas de los Slytherin.

Oh eso pensó hasta que Pansy parkinson le tendió una broma empapando toda su ropa y cuadernos. Recuerda que lo único que paso al día siguiente fue un rumor de que Pansy había sido infectada de criaturas pequeñas pero inofensivas quien perfectamente lo sabía. Aunque fue un escándalo, obviamente nadie encontró el culpable, pero sabían algunos que fueron unos gemelos muy ingeniosos.

Luna creyó que para la próxima farsa sería algo extremo, pero no pensó que era al grado de que Fred se acerque hasta su mesa en estos precisos momentos del desayuno.

Tuvo que evitar el impulso de mirar a los lados si alguien veía esto.

Recuerda Luna es parte de la broma.

Se irguió un poco más en el asiento tomando un poco de jugo de manzana, muy dulce. Agradeció que sean populares en cierto sentido, algunos estudiantes se le acercaron para preguntar o felicitarlos por la broma que habían hecho hace unos días a los Slytherin.

Luna tuvo tiempo de arreglarlese lo más que pudo, evitó que cualquier pensamiento sobre lo que estaba haciendo era normal, para cuando se pusiera a cuestionar de aquello, un Weasley estaba a su lado.

Luna abrió los ojos sorprendida, no solo por el susto, sabía que Fred y George tenían la costumbre de aparecer de la nada, el detalle aquí es que no lo vio. Y eso sería un tema después.

— ¡Oh!

Se le escapó. Fred tenía su sonrisa traviesa característica, tomo un pedazo de pan de la mesa.

— ¡Buenos días¡ Luna.

Podemos ver el momento exacto en el que cho Chang escupe su juego, y en donde un estudiante casi se tropieza, Neville.

— Buenos días, Fred — Atinó Luna.

Luna se explicaba porque razón su corazón pareció latir más rápido de repente, y porque su cercanía ahora parecía hacerle poner nerviosa.

— ¿Cómo amaneció mi bella dama?

— Bien... Mmm ¿y tú?

Luna parpadeo en su dirección, por unos momentos había olvidado que era parte del plan, o al menos eso creía. De otra manera no hubiera forma que Fred se portará así con ella.

— ¡Luna! — Hablo Neville, después de un tiempo.

Neville llevaba un libro en su mano, su libro de criaturas claro, o al menos un intento de aquello.

— Buenos días, Nev — Neville asintió nervioso.

— Gracias — Tendió el libro hacia ella — Me fue de mucha ayuda.

Luna sonrió tomando el libro.

— ¡Oh! Por supuesto, tiene mucha información.

— Me fue muy útil.

— ¡Buenos días mi querido amigo¡

Fred alzó su voz, más de un estudiante miró hacia su dirección, Neville retrocedió un poco.

— Fred — Asintió — Me retiro, nos vemos luego, Luna.

Ella asintió un tanto preocupada, Neville actúo extraño o no. Y antes de cuestionar, Fred la interrumpió.

— George y yo vamos a entrenar para el próximo partido, quería... Queríamos — Dijo y se acercó más de lo prudente — Queríamos saber si podías hacernos compañía durante el entrenamiento.

Luna asintió antes de si quiera pensarlo, no tenía problemas con aquello, había ido a ver a entrenar algunas veces a Harry, dejo de hacerlo gracias a Ron. Ahora podía ir sin necesidad de preocuparse de hacer sentir incómodo a nadie.

— Por supuesto.

Sonrió, Fred hizo unas de las sonrisas más grandes y brillantes que haya visto en su vida, su corazón pareció entender esa emoción, latía demasiado fuerte.

— Excelente.

Se levantó de la mesa, y el siguiente movimiento no lo vio venir. Se acercó demasiado y con demasiado nos referimos a estar pegado casi a su cara, deposito un beso en la comisura de su labio. Sintió su aliento, su aroma, dulce y pólvora, tal vez por los experimentos que hacen. Lo único raro es que pareciera como si era algo frecuente entre ellos, Fred la miró con una sonrisa y se fue no sin antes decir:

— Nos vemos.

Luna parpadeo las veces que fueron necesarias para poder aterrizar a la realidad.

— Nos vemos.

Miro su plato de comida, su mano subió a su corazón, sus ojos se abrieron de sorpresa.

— Todo es parte del plan, Luna.