Capitulo 1 Ciencia y torpeza

9 0 0
                                    

-Ren, ya tienes las cosas en las maletas preparadas. 

-Ya voy, gracias. Voy por mis ultimas cosas y bajo ahora.

mientras el joven con el pelo encrespado bajaba hacia la puerta de su casa. una cabeza peluda se asomaba de entre la cremallera de la mochila del joven.

-Oye Ren. ¿nervioso por ver a los chicos? Tengo unas ganas de volver a ver a la señorita Ann y a todos impresionantes.

Morgana que era el único compañero que puede esconderse en cualquier sitio, estuvo con Ren desde que se volvieron a casa las dos veces que se fueron. tanto en su primera ida del Leblanc como con la ida del viaje que hicieron todos por el país. Siempre estaba a su lado. Ya sea en las buenas o malas. incluso en las incomodas como cuando se olvidó de el al entrar a un baño.

-Siempre estoy nervioso cuando toca verlos. Solo que lo camuflo bien. simplemente me imagino como puede hacerlo mal Ryuji y hago exactamente lo contrario.- respondió Ren mientras preparaba sus últimos objetos en la mochila. Lo cual desencadenó una risa bastante sonora por parte de Morgana

Mientras en la puerta se encontraba la madre y el padre de Ren. Su parecido con ellos era imposible de negar. Los ojos potentes y la sonrisa de su padre. Mientras que la madre puso el pelo y el carácter.

-¿Vas a llevarte a Morgana contigo? Tu madre lo va a echar de menos- pregunto su padre. Acariciando la cabeza del minino y haciéndolo ronronear.

-Lo necesito. Es una buena compañía cuando esté solo con mis pensamientos.

-¡Tu mejor compañía!- exclamó Morgana

-Supongo que me toca decirte adiós... mi pitufillo...- La madre de Ren mientras le peinaba el pelo con la mano. Lo llamaba así desde que era pequeño. Incluso cuando fue acusado de agresión. Siguió con el mote. Que Ren no veía malo. Es más. Sería raro que no lo llamara así.

-Se que vas a estar bien sin mi mamá. Cuida de papá sin mi. Que es un traste de cuidado. Ayer lo vi tropezándose con una alfombra de la sala

-¡Es la edad niño!- exclamó el padre

-mientras lo mantenga vivo. Me sirve. En cuanto a ti. Cuídate bien. Eres un imán de problemas y más si vas por ahí solo.

Después de varias despedidas extras. Ren y Morgana recogieron las maletas y se dispusieron a volver a una antigua zona. El Leblanc.

-Supongo que todos deberían estar en el local. No podemos llegar tarde. Morgana. ¿Cuándo tenemos el tren?- Pregunto Ren mirando en el móvil mientras caminaba la hora que era.

-Sobre las dos y media. ¿Llegaremos a tiempo?

-Supongo que si. Si pego un sprint fuerte hacia el bus, claro.

Mientras Ren se preparaba para correr. En su camino se interpuso un taxi que se abrió automáticamente dejando entre ver a un conocido.

-¿Doctor Maruki?- El asombro de morgana se junto con el ladeo de cabeza confundido.

-Me habían comentado que volvías al Leblanc. Y no he podido resistirme a tener el mérito de llevarte. ¿Me permites el honor?- Propuso maruki sonrientemente señalando la parte trasera del coche.

-Yo encantado. Eres mi salvavidas doctor.

El joven aprovecho la oportunidad para acomodarse detrás y dejar la mochila y las maletas en el maletero. (Llevándose a Morgana con el a la parte trasera) y relajándose en el viaje.

-Y yo encantado de poder ayudarte. Aunque me gustaría que no me llamases doctor... recuerda que estoy retirado. Ponte cómodo que va para largo.

___

persona 5 royal eternalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora