Caen las hojas, deshechas, sin esperanza,
caen de las ramas donde las acariciaba el viento,
donde quizás alguna vez quisieron conquistar el horizonte.
Grises los días, mustias las horas, pálidos instantes,
que desfilan en silencio para no regresar jamás;
las amargas gotas que se deslizan por mejillas extenuadas.
Marchitos los recuerdos, que se pierden con la brisa,
deshilando imágenes que se creyeron eternas,
desandando los senderos de las ilusiones olvidadas.
Se pierde el sol tras las espesas nubes,
como se pierden los anhelos tras la espesa melancolía,
como se ahogan los ánimos bajo el manto del silencio.
Cuales pétalos de flores fallecen las alegrías,
en el podrido y vacío tronco que fue el porvenir,
para terminar adornando el sepulcro de la felicidad.
Se deshace inevitablemente el tiempo gota a gota,
se extinguen las memorias de suspiros del pasado,
contemplando el inerte cadáver de todos los sueños.
ESTÁS LEYENDO
Preludios
PoesiaPreludios es esencialmente un cúmulo de emociones, una selección de poemas donde el amor, la ilusión y la esperanza se entrelazan con la tristeza, la desolación y la muerte, en un mundo tan real como las letras con las que está plasmado. Esta edició...