La Felicidad ♡kookv♡

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- Elijo a Taehyung, madre, porque con Taehyung puedo sentir el amor que tanto quise - confesó Jungkook mientras me tomaba de las manos.

Yo solo le quede mirando a Jungkook, me estaba defendiendo de su propia madre, me prefiere a mí que a su mamá, eso me hace sentir mal, pero me siento feliz, no se el por qué, pero me siento muy feliz por su respuesta. Le miraba con admiración, sostuve sus manos para juntarlas con las mías tener más contacto, volteé a ver a su madre para ver su reacción. No se si hice mal, pero al ver a su madre con la cara pálida por la sorpresa le mostré una sonrisa de lado, mostrándome ganador.

- Jungkook, te volviste loco? - hablo furioso su padre acercándose hacia nosotros.

- Quizás, padre - respondió con sarcasmo volteando a verme - Quieres irte a tu casa? - me pregunto con preocupación.

Yo no dije nada, solo asentí sonriéndo le, el me devolvió la sonrisa tomándome el rostro mientras me hacia caricias.

- Bien, vamos - me soltó las manos para ir atrás de mi y sostener mi silla para mover lo y así salir de la cocina.

Cuando estamos por salir de la cocina la madre de Jungkook se paro al frente de nosotros para bloquear el paso.

- Tu no puedes irte, hijo.

- Si Taehyung no es aceptado en esta casa yo tampoco lo seré.

- ¡PERO YO SOY TU MADRE! ¿¡PREFIERES A UN INVÁLIDO!?

- ¡NO TE PERMITO QUE LE HABLES DE ESA FORMA!.

Solo escuchaba gritos, solo gritos, hace tiempo que nadie que ha insultado, nada es para siempre, eso lo sé perfectamente, pero por qué a mi, yo qué hice para qué me digan eses comentarios irientes. Esto es horrible. Sentí toques en mi hombro sacándome de mis pensamientos, alcé la mirada y ahí estaba la abuela de Jungkook, me miraba con preocupación, paso sus manos suaves por mi rostro con cariño y paciencia. Medí cuenta que estaba llorando, no sentí mis lágrimas, salieron sin previó aviso.

- Ya no llores, hijo, ya pasó - hablo con ternura mientras pasaba sus manos por mi cabello - Jungkook, lleva a tu comprometido a tu habitación, yo hablaré con tu madre - ordenó la anciana.

- Si, Nana.

[...]

- Estás mejor?

- No, no me dejes - le pedí abrazándolo más fuerte.

- Bien - el me sostuvo de mi cintura acercándome más a él y así abrazarme.

Estoy en la habitación de Jungkook acostado en su cama junto a él, llore por un rato, me sentí super mal por el comentario de su madre. Jungkook me daba leves caricias en mi espalda mientras yo me aferraba más a él, era como un gran peluche de algodón suave y cálido.

- Lo siento - dijo de repente.

Yo alce la mirada viendo confundido por la disculpa - Por qué te disculpas?

- Yo....sabía que mi madre iba a llegar hoy, quería que te conociera - confesó soltando un suspiro - pero me equivoque, por eso lo siento, no de-

- Jungkook, se que no lo hiciste con la mala intención - le interrumpí - Tu no tienes la culpa de nada, así que no te disculpes - le regale una sonrisa para luego tomar sus cachetes y apretarlas.

- Muchas gracias, Tae - me agradeció con amabilidad y ternura.

Sentí los labios de Jungkook sobre los míos formando un lento y tranquilo beso, me gusta sentir esa parte de él, sus labios rojos y suaves. El beso fue subiendo la temperatura de mi cuerpo, queriendo más de el, es la primera veces que quiero más de Jungkook, más que unos simples besos. Quiero sus caricias sobre mi piel desnudo.