-𝒯𝒽𝑒 𝑜𝓉𝒽𝑒𝓇 𝓌𝑜𝓂𝒶𝓃-

6.- Problemas en el paraiso

- Muchas gracias por tráeme de regreso a mi departamento Carlos -Tome su mano cuando me la ofreció para ayudarme a bajar del coche

-No agradezcas nada, me la pase muy bien contigo hoy -hablábamos mientras caminábamos al lobby

-Yo igual -ambos sonreímos

-¿Lo repetimos?

-Lo pensaré -mire el reloj; 1:45 am- Ya es tarde, ambos tenemos que descansar, de nuevo gracias por esta noche

Me acerqué a él y le dejé un pequeño beso en la mejilla. Lo vi salir del lobby mientras nos despedíamos de lejos y yo caminé hacia el elevador.

Después de recibir la llamada de Max, que por cierto ignore, apague mi teléfono, Carlos únicamente me miro cuestionando, y tratando de averiguar quien era. Solo le dije que eran cosas de trabajo, que no era urgente.

Cuando prendí de nuevo el teléfono, tenía 20 llamadas perdidas de Max, y unos 30 mensajes preguntando donde estaba. Por supuesto que lo ignore. Tenía 3 mensajes de voz. Decidí abrir el primero

-OPHELIA, ¿Por qué no contestas?  ¿Donde carajos estás y por qué no me dijiste que saldrías a cenar con ese imbecil?!

Segundo mensaje:

-Ophi, por favor perdóname mi sol... te juro que no es mi intención hablarte así, yo... no se que siento... por favor responde

Tercer mensaje:

-Te extrañe hoy, entiendo si prefieres pasar tiempo con Carlos. El si puede presumir lo hermosa que eres

En El último mensaje podía escuchar la voz ronca y mareada de Max, había estado bebiendo,  estaba segura, el casi nunca bebía alcohol menos cuando era semana de carrera, intenté marcarle pero no respondía, 1, 2, 3, 4 llamadas; nada...

Le envié un mensaje

Espero esté todo bien, cuando puedas hablar lo hacemos. Descansa Max y cuídate . Te amo

Decidí acostarme y dormir cuando escuché el sonido de mi celular

-Voy en camino a tu departamento

No quería hablar con el en esa condición, así que no le respondí pero sabía que llegaría si o si

Trataba de dormir pero simplemente no lo conseguía, hasta que escuché que empezaron a abrir la puerta. Sabía que era Max. Me levante y me dirigí a la sala, termino de entrar y era obvio que estaba borracho.

-Mi sol, amor de mi vida perdóname -en su aliento podía descubrir perfectamente la combinación entre tequila y cerveza

-Max, acuéstate por favor, vienes muy tomado y...

-No, Ophi, por favor. Se que he sido un idiota, se que saliste con Sainz para desquitarte por todo lo que ha estado pasando y de verdad te pido me perdones -sus palabras salían entre hipidos, mientras unas lágrimas rodaban por su mejilla y solo me tomaba de los hombros- he sido un idiota, no te merezco, perdóname por ser tan cobarde, perdóname por no darte todo lo que te mereces, perdóname...

-Basta Max, por favor. Mañana hablamos, deberías dormir ¿si? , ven -Trataba de llevarlo hacia la cama, pero el hecho de que estuviese borracho y el que a veces se soltara recargando todo su peso sobre mi no ayudaba

-¿Por qué? -Quito su cabeza que se encontraba recargada en mi cuello y me miró

-¿Por que, que Max?

-¿Por que saliste con ese imbecil? -Su mirada era una mezcla de enojo y dolor

-Max, mañana hablamos por favor, ven... -de nuevo trataba de llevarlo a la cama