CAPÍTULO 1

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- Explícamelo de nuevo, por favor - me dijo Eli con una ceja levantada y expresión de desconcierto.

- A ver, llevas 2 años insistiendo en cada cita que ya estoy bien, que no necesito más terapia. Pues ¡sorpresa!, por fin te he hecho caso y he decidido dejar de venir. Solo pongo una condición para dejarte en paz: que accedas a un último... como decirlo... un último juego - concluí con una enorme sonrisa que denotaba mi satisfacción.

- Vale - inspiró profundamente - no creo que... un juego deba formar parte de tu toma de decisiones.

- Ya...- intenté cambiar de estrategia sobre la marcha - si no estás conforme con esa premisa, te lo plantearé de otra manera. A ver, llevo 7 años viniendo cada martes a esta habitación para contarte mis penas. Hay una única cosa que aún no he conseguido superar: volver a escribir un guión. Sin embargo, hace unos meses vino una idea a mi cabeza que desarrollé y ahora quiero contártela. La única - paré un momento para utilizar las palabras adecuadas - la única peculiaridad de esta historia es que es interactiva. ¿Recuerdas los libros de "elige tu propia aventura"? Pues es justo eso, aquí tú serás quien decida por dónde ir. Serás protagonista. Además - susurré poniendo los ojos entornados y una sonrisa de medio lado - he intentado que sea a tu gusto. Una ... novela policiaca, un thriller.

- Ya veo - contestó con una leve inclinación de los labios, tan sutil que, si no tuviera un máster mental titulado "las expresiones de Eli", no lo habría percibido.

- Entonces... te cuento de qué va y cuáles son las reglas, ¿ok?

- Adelante Natalia. Solo quiero recordarte que la hora conmigo sale a 50€ y...

- Y yo decido invertir ese dinero y ese tiempo en esto - le corté y agité la mano en el aire dando a entender que no había problema.

Me recliné en el asiento, doblé las piernas una encima de la otra y entrelacé los dedos con un halo conspiranóico que me resultaba gracioso. Guardé silencio mientras observaba detenidamente a mi terapeuta. Tenía el pelo largo y de un rubio casi albino sujeto por una coleta, una pequeña cicatriz al lado de la ceja, provocada por una caída a los cinco años, la nariz roja por una aguda alergia al polen y unos dientes blancos y perfectamente colocados a excepción del colmillo derecho, que se elevaba sobre los demás y le confería un carácter particular a su sonrisa. Como siempre, se mostraba con gesto neutro y un bolígrafo en la mano que no dejaba de mover entre los dedos, delatando nervios o tal vez un poco de ansiedad.

Normalmente la hora de terapia se pasaba con mi terrible verborrea y sus eternos silencios. Mi vena infantil, siempre al acecho, decidía cada equis tiempo mantenerme callada y observar su reacción. El récord fue en una sesión donde estuvimos más de diez minutos mirándonos, sin decir nada y jugando a ver quién parpadeaba antes - bueno, tal vez esto último solo lo hacía yo y por eso ganaba todas las veces -. Aquel día rompí el silencio, aunque para ser exactos, lo rompí en esa ocasión y en todas las demás -. Eli era de piedra, inalterable y a mí el silencio me molestaba.

Por eso, aquella era mi oportunidad para conseguir que sucumbiera. Como si de una partida de mus se tratara, después de poner las cartas boca abajo sobre la mesa y lanzar mi órdago, esperé a que picara el anzuelo y me pidiera saber más sobre mi propuesta. Me gustaba que me suplicara un poquito, notar su deseo, que su implicación conmigo fuera más allá que la de ser una simple paciente.

- Natalia ... - dijo mientras se apretaba el puente de la nariz - por favor...

< Uoooh > pensé incrédula. Esto debe ser lo más cerca que he estado jamás de usar la frase "soy el rey del mundo" a lo Jack en Titanic. ¡Lo había logrado! Qué fácil había sido. Tan solo un par de minutos de estricto silencio y tenía a mi imperturbable terapeuta comiendo de la mano, ¡estaba claro! - o eso quería pensar yo -. Primera victoria para Natalia en 7 años. Antes de responder, escuché una pequeña ovación cuya procedencia era, seguramente, del interior de mi cerebro.

MARTES A LAS SIETE (COMEDIA ROMÁNTICA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora