Will to Fire [Portegas D. Ace]

Tres|Ron medicinal

La luz le llega directamente a la cara haciéndola, querer darse vuelta, solo quería seguir durmiendo, pero tenía que levantar antes que su madre viniera a gritarle, abrió los ojos, pero no era su cuarto, está en la popa del barco, los recuerdos la golpearon haciendo que se levantara con rapidez soltando la palanca que mantenía el ancla arriba, corre escaleras abajo hasta la proa, el cofre vacío sigues estando ahí.

No lo había soñado había escapado de verdad

Arrastro el cofre hacia una puerta más cercana que la llevo a la cocina que no era tan luminosa con las ventanas cubiertas de polvo, la cocina se veía vieja, algo oxidada sería un milagro si siguiera funcionado contaba con todo lo necesario solo que todo parecía estar en horribles condiciones, una vez dejo el cofre decidió explorar el barco, encontró la habitación que parecía ser del capitán, ahí decidio cambiarse de ropa tomando la ropa que se encontraba en el armario unos pantalones junto con una camisa de manga holgada con un cinturón para mantener todo en su lugar junto con unas botas.

Encontró un Log Pose y un mapa que del océano del norte, lo que facilitaba su rumbo, se sentía aliviada de tener lo necesario para navegar, pero había tenido la sensación de vacío desde que empezó a explorar el barco, estaba navegando en un barco fantasma que había sido enterado bajo la isla para nunca ver la luz de otro día Eileen había perturbado su sepulcro para poder escapar, no creía que los barcos tuvieran su propia alma o carácter como había escuchado de algunos hombres contar cuando habían tomado unas copas de más, pero si tenía en consideración las historias de Leo, muchos hombres habían muerto sobre él estaba rodeada de fantasma. 

¿O era ella el fantasma ahora?

Volvió a subir a popa, escuchado a las olas que traía también el ruido de tambores siempre bajo, nunca más ruidoso que las voces o la melancólica canción de cuna que escuchaba, pero siempre constante desde que tenía diez años tarareo junto a la canción traída del mar, tomo el timón áspero bajo su toque, subió el ancla el sonido del hierro chocando le pareció tortuoso.

Las velas negras parecían desaparecer en la oscuridad, había estado navegando por horas desde antes de que cayera el sol, pero no podía darse el lujo de detenerse cuando el Log pose había apuntado a una isla.

Vio las pequeñas luces apareció en el horizonte una alegría que pocas veces había experimentado la recorrió

—¡Tierra a la vista! – grita aun sabiendo que nadie la escucharía

Una gran isla que tenía un gran faro esquivo, el puerto no tenía el lujo de poder de anclar su barco en el puerto, en cambio, rodio la isla en busca de un lugar menos poblado cuando las casas fueron desapareciendo poco a poco hasta que solo quedaba un frondoso bosque, el sol empezaba a salir cuando soltó el ancla podría descansar antes de ir a la ciudad.La ciudad parecía estar completamente despierta cuando llego, el olor a comida hizo que su estómago retorcerse, el olor provenía de un pequeño restaurante, se aseguró de tener la bolsa, de berrys con ella antes de entrar al local, era un lugar agradable.