Capítulo 05

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TEE

Fui en dirección a la oficina de Yuki, era común pero no común de ese común, sino común de raro. Espero haberme explicado.

Cuando toqué la puerta, un "Pase" se escucho de la parte de adentro.

Cuando Yuki y yo nos comenzamos a ver, fue algo que me sorprendió hasta a mí, nunca esperé que una mujer tan petulante como ella siquiera volteara a mirarme, creí eso forzado, e incluso imposible.

Porque para mí Yuki está en un pedestal, no importa que tanta chicas hayan pasado por mí vida, aquella mujer sin mentir, sería la más hermosa de todas.

Pero no estaba buscando una relación y mucho menos la quería; yo le servía para calmar sus momentos de calentura, así como ella me servía a mí para hacerlo.

Estaba acostumbrada a nuestras jornadas de sexo casual, era algo común en nosotras.

Y ella me dejó bien en claro que si llega a nuestras vidas alguien con el que queramos algo serio o más que sexo casual, dejaríamos todo, a lo que yo acepté disponible. No iba a decirle que no, ella es libre, yo soy libre, nada más.

Y no me cela, solo cree que puedo meterme en problemas, pero es cero celosa.

Entró a la oficina y cierro la puerta detrás de mí, cuando aquello pasa, noto lo tensa que está sentada en su silla. A veces me sorprendía ver reguero de papeles, era siempre era ordenada; pero ahora mismo, era de todos menos ordeanda.

- Jo-der - mascullé - ¿Qué pasó aquí?

- ¿Me quieres decir que te traes con tu amiguita? - escupió.

Abrí los ojos con sorpresa.

- ¿Disculpa?

- Eso. Tú antes no eras así con Sam, y de repente no te separas de ella.

– Espera - reí con nerviosismo -  ¿Me quieres emparejar con mi mejor amiga, Yuki?

Se colocó de pie, más no se movió de donde estaba.

- No me mientas, sabes muy bien como odio aquello - la vena de su cuello estaba realmente hinchada - Vamos a ver, no sé si te queda claro, pero ahora mismo tienes algo conmigo.

La paré en seco - No... tú y yo tenemos sexo casual, que por si no sabes que es o se te olvidó. Es la definición de: sólo una noche o varias noches, sin poner empeño romántico. Ya, Yuki, más nada, ¿por qué te pones así? y joder, ¿con mi mejor amiga? debes estar bromeando.

- ¿Crees que no vi como miraste a Mon? se te fueron los ojos, idiota...

- Oye pero - fruncí el entrecejo - ¿A ti que carajos te pasa? si quiero ahora mismo termino todo. Lo nuestro no es romántico y vienes y me haces esta escena de celos.

Se rió con sarcasmo - ¿Celosa de ti?

- Sí, es lo que me das a demostrar.

Apretó sus dientes y caminó a paso seguro, sonando sus relucientes tacones hasta llegar a mí. Me quedé en el aire, eso hasta que me tomó el rostro y me besó con fuerza pero al mismo tiempo parecía entregada, mis manos quedaron en el aire, ¿qué hacía? era la primera vez que tomaba este tipo de impulsos. Yuki en lo que tenemos frecuentándonos, jamás me besó así.

- No estoy celosa, ¿te quedó claro? - giramos y fuimos retrocediendo, sin cortar el beso.

Mis manos no soportaron más en el aire, y no pudieron caer en su cintura. Cuando me vi entre ella y el escritorio, la pegué tanto para que no quedara espacio entre nosotras.

Los besos de Yuki era un buen antídoto, me encantaba sentirlos y cuando no estaba de ánimos por alguna razón, besarla era un buen subidón de azúcar.

CINCO MINUTOS ANTES DE ENAMORARNOS//MONSAMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora