Lazos Inquebrantables
Sunoo
Mi historia con Hee comenzó en una cálida mañana de primavera cuando yo tenía nueve años y él doce. Estába en el garaje de mi casa, ayudando a papá con los últimos retoques que le faltaban a su auto. Fue entonces cuando vi a un niño correr hacia nosotros a toda velocidad, con lágrimas empapando sus mejillas y las rodillas sangrando.
Su padre acababa de dispararle a su madre, y él se había escapado en busca de ayuda, deseando no terminar como su madre.
Mi padre lo protegió como si fuera su propio hijo, y después de una larga batalla legal, el padre de Hee, Dak-Ho, fue enviado a prisión por asesinato en primer grado y otros delitos como consumo y venta de drogas.
Obtuvimos la custodia de Hee por petición de mi padre, y en ese momento, lo odié por preferir al hijo de un psicópata sobre mí. Sin embargo, del odio al amor solo hay un paso.
Con el tiempo, entramos en la etapa en la que las hormonas comenzaron a controlarnos. Empecé a ver a Hee de manera diferente, más allá de ser el protegido de mi padre. Fue entonces cuando sucedió: Hee comenzó a trabajar en el taller de papá. Quién hubiera pensado que un chico cubierto de aceite y con olor a gasolina podría despertar en mí un deseo tan profundo.
Durante el verano, papá participaba en carreras de autos, y nosotros lo acompañábamos. Hee se convirtió en parte del equipo de mecánicos. En una de esas carreras, papá llamó la atención de Park, el hombre más rico y poderoso de la ciudad. Se hicieron socios, y Park se convirtió en el patrocinador de papá, llevándolo a las grandes ligas.
La fama no tardó en llegar, pero también los problemas. Papá cambió, y el hombre que yo consideraba mi padre comenzó a desvanecerse, reemplazado por alguien llamado James, que decía ser mi padre.
Mamá no pudo soportarlo y se divorció de él, pero lamentablemente, papá tenía la custodia de Hee, mientras que yo me quedaba con mamá. Nuestra relación se hizo más fuerte, y nuestros sentimientos comenzaron a salir a flote. Pronto, se volvió rutina que Hee se colara por mi ventana todas las noches. Él fue mi primer amor en todos los sentidos.
Nuestra vida mejoró hasta que la noticia de la muerte de papá nos devastó. En medio de una carrera, su auto comenzó a arder en llamas y explotó, matándolo al instante. Vi todo por las noticias, ya que desde que él cambió, dejé de asistir a sus carreras, aunque mi obsesión por ellas nunca disminuyó.
Ver cómo el auto se consumía en fuego y cómo los miembros del equipo intentaban rescatar a papá, mientras Hee lloraba desgarradoramente al ver cómo su figura paterna era devorada por el fuego, me destrozó por dentro.
Esa noche, Hee no apareció, y las siguientes noches tampoco. No respondía a mis llamadas ni a mis mensajes, y mi preocupación creció. Finalmente, en una fría noche, recibí un mensaje de despedida de él.
"No me dejarás solo."
Salí corriendo hacia su departamento, donde no encontré a nadie. Fue entonces cuando lo vi, a través de la ventana, acercándose al puente cercano. Corrí gritando su nombre y llegué a tiempo para detenerlo.
Hee, consumido por la depresión, quería poner fin a su vida debido a que la muerte de James solo le había traído más tormento. No saben lo traumático que fue para él, además de presenciar cómo su padre disparaba a su madre frente a sus ojos y cómo su padre iba a prisión por eso.
Entre lágrimas, dormimos abrazados en su departamento, tratando de sanar nuestras almas.
Entre visitas al psicólogo, antidepresivos, besos y amor, volvimos a ser los mismos, pero la felicidad es efímera. Una mañana, alguien llamó a la puerta de mi casa. Era Park, y venía en busca mía. Supuestamente, mi padre le debía una gran cantidad de dinero, y como yo era su mayor tesoro, ahora pasaba a ser de su propiedad.
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Revved-Up Romance - Heesun
FanfictionEn las calles nocturnas de una ciudad vibrante dónde las luces de neón destellan y los motores rugen como una sinfonía, una historia de amor y velocidad se despliega en el asfalto. Sunoo es un apasionado corredor clandestino, un joven con un corazón...