Contradicción.

2

<<Galery>>

—Siento que Ekko está extraño.

—¿Extraño? De qué modo.

—No lo sé, distraído, tal vez perdido.

—No lo sé—Ezreal miro hacia donde se encontraba su amigo, lejos de ellos parecía estar haciendo borradores en su cuaderno—Tal vez está haciendo un nuevo proyecto, suele aislarse de todos cuando está concentrado.

—Si, si lo sé, pero no es así, es diferente. —Dio otro mordisco a su sándwich.

—Mmm tal vez está planeando algo importante.

—Hace días le pregunté, simplemente desvío el tema.

—tal vez te quiere pedir matrimonio—Ezreal estallo en una risa cuando los ojos de su amiga se abrieron y casi escupe su comida. —Debiste ver tu cara.

—¿Estás jugando conmigo?

—Claro que no Zeri, jamás haría eso. —se defendió—Si fuera algo así de importante me lo habría dicho.

—Por Jhanna.

...

Ekko reviso la hora por tercera vez en el lapso de 10 minutos, se había bañado, cambiado, afeitado, peinado y arreglado.

Se dio cuenta que había exagerado con el perfume y quedó mirando en dirección a las otras dos camisas sobre su cama, para intentar cambiarla, uso pantalones y zapatos a la par. Miro su celular mientras salía de su cuarto, casi chocando con una distraída Zeri que acababa de regresar.

—Wow—La chica dio una risa mientras Ekko se disculpó rápidamente—No te preocupes—Le dio una mirada de arriba a abajo mientras ponía su mano en su barbilla. —¿Por qué estas tan elegante?

—¿Elegante? —Ella asintió—No lo estoy, solo saldré unas horas—Esquivo a la peli verde para tomar sus cosas del comedor.

—¿saldrás? No me dijiste nada de eso.

—Creo que lo olvide, volveré más tarde.

—¿Estás seguro de que esta todo bien? —El moreno se volvió hacia su novia.

—Lo está, solo tengo que irme. Ya esta tarde. —Fue hasta frente de la peliverde, tomando suavemente sus hombros. Se acerco lo suficiente para besar su frente, correspondiendo Zeri cerró los ojos esperándolo.

No llego.

Lo miro después de unos segundos, con una mueca Ekko solo acaricio sus hombros y tomando su mochila salió de la casa.

Se llevo la mano a la frente dudosa.

—Algo extraño está pasando.

...

—¡Jinx!

—Señorita Medarda—La joven peli azul dedico una sonrisa hacia la mujer, aceptando el saludo formal—Es un placer verla por aquí.

—Para nada, tus cuadros son una total maravilla. Estoy segura que a mi madre le gustaría unos.

—¿Su madre?

—Es una oficial de Noxus, querida. Es fanática de los cuadros de poder, si me entiendes. —Un destello frio paso por los ojos de la joven, que cambio su expresión en un segundo para volver a su fachada sonriente.

—Lo lamento, no hago esos cuadros.

—oh ¿Es eso así? —Jinx asintió. —Estoy segura que podría pagar una gran cantidad.

—No hago cuadros de oficiales sobre muertos, no tengo que explicar mis motivos. —Por supuesto que sabía a qué cuadros se refería, la misma Medarda tenía algunos tipos de ellos en su oficina.