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Be yourself...

Suena la alarma igual que el día anterior, y me encargué de despertar a los dos dormilones que estaban a los lados de mi cama. Preparé café y seguimos hablando con muchos ánimos en esa mañana mientras nos arreglamos.

Armando y yo no comentamos nada del beso de anoche, pero me dí cuenta que no sabe disimular del todo. Siempre buscaba la forma de robarme un beso, incluso al frente de Clara y ella quedaba tipo "¿Que está pasando aquí?"

Y cuando estábamos por salir, a Clara le llega una notificación con un flyer de la Academia, ella lo mira y no le causa mucha gracia.

—Este viernes se llevará a cabo el primer Music On del año en la Academia Miller.

—¿Music On? - pregunté algo curioso.

—Es como una clase de concurso pero sin trofeos ni premios que hacen cada año en la Academia. Un evento donde te inscribes y te presentas con una canción y una coreografía hecha por ti. - responde Armando.

—¿En el escenario que ví al entrar?

Él asintió y entonces todas mis emociones revolotearon.

Sé bailar muy bien, y creo que eso ya es algo que mis nuevos amigos saben.. pero cantar... Bueno, ya eso es diferente pero sé que con mucha práctica podré hacerlo bien.

Así que, ¿Por qué no lanzarnos a esa experiencia?


Quiero participar.. - dije con toda la seguridad del mundo.

Y ellos se alegraron por mi seguridad y entusiasmo.

Con esa alegría y con toda esa emoción nos fuimos al colegio.

Pero como siempre, la gente rica y narcisista haciendo de las suyas...

**

Caminábamos por el pasillo principal del Instituto, y vemos que llega el mismo chico rubio y alto que me encontré ayer en la Academia. Ese que se burló de mi apariencia y a quien también lo deje con la boca bien cerrada.

—Hey tú, muchacho marica.

Clara me toma del brazo, pero me suelto sutilmente de su agarre para demostrarle que no le tenía miedo a un niño mimado.

—Así me gusta.. - dije entre risas —.. que me digan las cosas de frente y no andes hablando de mi a mis espaldas.. eso sería darme muchísima importancia.

Este bufó fuertemente y sacó una pequeña corneta para conectarla con su iPad y poner música.

—Te propongo un desafío de baile.. El que termine en el suelo será un completo perdedor, que desde luego, ese serás tú.

Me sorprende como una persona puede llegar a tener el ego tan alto, a tal punto de creerse la persona más superior del mundo.

—Hecho. - dije, con voz retadora —.. ¡Y que gane el mejor!

Empezó a sonar una canción que reconocí enseguuda: Twisted Games de Krígare y Night Panda. El chico empezó a moverse al ritmo de la canción, sus pasos parecían sacados de un vídeo musical de zombies y todo el instituto lo observaba.

Free Love: Al Ritmo de los SueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora