La princesa de Slytherin (Draco y Astoria)

Capítulo 2

Tras una agotadora mañana de clases, distracciones y bromas, Astoria y sus amigos llegaron al Gran Comedor. Cada uno se sentó en su mesa, acordando antes que se verían en los jardines al terminar.
-No estoy acostumbrada a tantas clases -comentó Tay dejándose caer sobre el banco y apoyando la cabeza en el hombro de Jack-, deberían ir introduciéndonos esto poco a poco, ¿no creéis?-dijo mirando a sus amigos.
Unos leves gruñidos fueron sus respuestas. Todos estaban cansados, pero no lo exteriorizaban. O al menos no demasiado. Empezaron a comer y, poco a poco, se integraron en una amena conversación, plagada de risas.
Inconscientemente, Astoria, buscó a Draco con la mirada. Cuando le encontró pudo apreciar preocupación en su cara. "Seguro que es por lo de Potter" pensó ella poniendo los ojos en blanco. Vio a Daphne y sus amigas llegar y, a la par que Draco, volvió a poner los ojos en blanco cuando Pansy se sentó al lado del rubio mientras se agarraba de su brazo. Apartó inmediatamente la mirada. Simplemente le molestaba ver a Pansy siempre tan pegada a Draco. No eran celos, sabía que Draco no quería a Pansy, solo que pensaba que podía ser ella la que estuviese a su lado, apoyando la cabeza sobre su hombro y acariciando suavemente el brazo del rubio. Se sorprendió a si misma volviendo a mirarles y, con una sacudida de cabeza, trató de centrarse otra vez en la conversación con sus amigos. No fue algo difícil, pues Jack estaba hablando de sus increíbles vacaciones, visitando una reserva de dragones.

Terminaron de comer mientras se interrumpían los unos a los otros, ansiosos de hablar cada uno sobre sus respectivos veranos. Fueron hacia los jardines, donde Lucy y Archie, ambos apasionados de la historia, discutían sobre algún punto de la historia de la magia con Chastity, una chica de Gryfindor a la que a penas conocían. Kevin y Roger se acercaban a los Ravenclaw justo por delante de ellos. Al verles, Jack y Taylor, decidieron correr hasta estar cerca de ellos y asustarles. Taylor se subió de un salto a la espalda de Roger, mientras que Jack apresaba a Kevin con un brazo y le despeinaba con la otra mano. Kevin empezó a gritar y Roger se fue corriendo con Taylor riéndose, agarrada a su cuello.
-Y así es como se prepara a lo grande la llegada de los dos mejores alumnos de todo Hogwarts. -apuntó Theo cuando Astoria y él llegaron al lado de sus amigos de Ravenclaw. Kevin había conseguido zafarse de Jack y le perseguía agitando su puño.
-¿Tengo que recordarte tus últimas notas? -preguntó Chastity visiblemente disgustada por tener que interrumpir la apasionante conversación.
-Me refiero a los alumnos con mejor reputación del colegio. -aclaró el chico mirando con mala cara a Chastity.
-Theo, creo que tu no estás entre ellos -intervino Archie-. Bueno, te olvidas de Harry Potter... -apuntó al ver la expresión de su amigo.
-Y a Malfoy -añadió Lucy-. Tiene una gran reputación y no lo podéis negar. -dijo encogiéndose de hombros.
-¡Malfoy!-gritó Theo mirando a Astoria, al darse cuenta de que seguro que era él con quien había estado su amiga el día anterior, en el tren. Astoria le miró a la vez que le daba un codazo para que no hablase de eso.
-Sí, todos sabemos que tipo de reputación tiene Malfoy... -dijo Chastity poniéndose en pie-. Bueno, chicos, mejor me voy. Ya nos veremos.-añadió, mirando mal a los que acababan de llegar antes de irse.
-¿Por qué le aguantáis? -preguntó Astoria cuando Chastity se había alejado lo suficiente.
-¡Malfoy!-volvió a gritar Theo, mirándola.
-A Archie le gusta y por los amigos se hacen sacrificios. -explicó Lucy encogiéndose de hombros.
-¡Lucy! -gritó Archie molesto.
-¡Malfoy! -seguía gritando estupefacto.
-Uy, Archie, nunca nos habías hablado de ella... -dijo Astoria sonriendo.
-Porque la conocí justo antes de verano y nos hemos mandado un par de cartas... No hay mucho más que contar. -dijo Archie sonrojándose.
-¡Malfoy!-gritó otra vez Theo, señalando a Astoria.
-Y, ¿te gusta mucho? -trató de indagar.
-¿Por qué hablamos de mí, si lo único que queremos es saber por qué Theo no para de gritar "Malfoy" y señalarte?-preguntó Archie, tratando de evitar la pregunta de su amiga.
-Archeus Turner... -dijo Astoria amenazante
-Bueno, es Theo... -dijo Lucy- Él es así... Hace y dice cosas sin sentido. -explicó cuando sus amigos le miraron dando a entender que no sabían de qué hablaba.
-¡Lucy! -exclamó Theo molesto- ¿Qué te he hecho yo ahora?
-Simplemente existir. -respondió ella.
-A ver, chicos, nos estamos desviando de lo importante... Archie, ¿qué demonios ves en esa chica?
-Tienes razón, Tori, nos estamos desviando. Así que... ¿Qué pasa con Malfoy?
-¡Malfoy! -volvió a gritar Theo.
-Para de gritar, pedazo de troll, que te va a oir alguien... Y como eso pase juro que te mataré. -dijo Lucy amenazante.
-Lucy, creo que pasas demasiado con Tay y conmigo. -comentó Astoria riendo.
-¡Malfoy!-exclamó Archie, imitando a su amigo.
-¡Archeus!-gritó Astoria enfadada.
-Lo que acabo de decir también va por ti, ¿eh, gafas? -dijo Lucy mirando a Archie.
-Oigo gritos y amenazas, ¿qué está pasando? -dijo Jack, que llegaba con Kevin. Por su aspecto se notaba que habían estado peleándose, aunque fuese de broma. También por su aspecto se podía deducir que la "pelea" había terminado con magia, pues a Jack aún le salían pequeñas burbujas de la nariz mientras que Kevin tenía una ceja verde.
-¡Malfoy! -gritó Theo otra vez.
-¡Theo, te vas a enterar! -exclamó Lucy malhumorada.
-A Archie le gusta una chica. -informó Astoria emocionada.
-¡Hombre, Archie! ¡Te nos has hecho mayor! -Kevin se sentó a su lado y le dio unas palmaditas en el hombro- Cuéntanos cómo y quién es.
-¿Está buena? -preguntó Jack sonriendo.
-También hemos hablado de con quién estuvo ayer Astoria... -apuntó, tratando de que dejarán de hablar de él.
-¡Malfoy!-gritó Theo, apartándose de Lucy.
-Esa puede pasar... -dijo ella, mirando a su amigo con los ojos entrecerrados.
-¿Malfoy? -preguntó Kevin extrañado- ¡Imposible! Yo te vi con Zabinni muy acaramelado, Tori... Que, por cierto, creo que me odia más que antes, si eso puede ser... -añadió riéndose.
-Da igual, te deshiciste de él, así que me tienes contenta a mi. -respondió Astoria, haciendo reír a sus amigos.
-¿Zabinni? Te equivocas, Kevin, yo le vi con Malfoy en el tren... -dijo Archie negando con la cabeza- Ambos muy juntitos, por cierto...
-¡Yo le vi con ambos! -gritó Jack riendo- En la Sala Común -explicó-. Había desaparecido antes de llegar y estuvimos un rato esperando. Como no llegaba nos íbamos a ir a los dormitorios, pero me encontré con algunos del equipo de Quidditch, me quedé saludándoles y estuve hablando un rato con ellos. Ahí fue cuando le vi con Zabinni, pero estuvo tan fría como siempre y se fue, dejándole bastante triste, si me permitís la observación. Después unas chicas de cuarto me secuestraron y me empezaron a contar su vida, así que busqué algo con lo que entretenerme, porque no podía defraudar a mis fans con una mala actitud -dijo con arrogancia-. Ahí fue cuando le vi con Draco, cerca de la puerta. Astoria se fue después de hablar un poco, pero me pareció que él se quedaba un poco defraudado, no se... Eso sí, el poco tiempo que estuvieron juntos él estuvo muy acaramelado... Más de lo que podía imaginar en Draco... -añadió pensativo.
-¡Jack! -gritó Astoria sonrojada.
-¿¡Cómo no me había contado nada!? -exclamó Theo indignado- O sea, que nuestra pequeña Tori juega a dos bandas, ¿eh?
-No os equivo...
-Wow, no me esperaba eso de ella... -dijo Archie visiblemente impactado.
-Oh, venga, no penséis mal. Todo el mundo sabe que Blaise lleva un año intentando que Tori le haga caso y Draco ya superó su pequeño enamoramiento con Pansy y se cree que lleva un tiempo coladito por Tori. -dijo Lucy quitándole importancia al tema.
-Sabéis que sigo aquí, ¿no? -intervino Astoria mirando a sus amigos, levemente sonrojada.
-Lucy, ¿cómo sabes todo eso? -preguntó Archie.
-Creía que los Ravenclaw eran mejores que los rumores... -comentó Jack.
-¡Lo soy! -dijo un poco avergonzada- Pero, claro, una oye cosas... Y sabéis que en la biblioteca se oye todo lo que cuentan y...
-¡Lucy! ¡Eres tan cotilla como yo o más! -dijo Theo sonriendo- Estoy orgulloso de ti... -bromeó.
-No os equivoquéis, chicos... -Lucy negó con la cabeza- Lo que pasa es que a una de mis compañeras de habitación le gusta Blaise y me entero de todo lo que dicen. Y no, Theo, no te voy a decir quién es.
-Vaaale -respondió él desilusionado-. Pero tienes que contarme todo lo que chismorreen tus compañeras, ¿eh?
-Está bien. -respondió Lucy con exasperación.
-Pero, una pregunta... -dijo Archie de repente- ¿Daphne no le ha dicho nada? O sea, si tuviese una hermana y dos de mis mejores amigos estuviesen detrás de ella se lo diría...
-Oh, vaya, si hubiese alguien que pudiese responder a esa pregunta... -dijo sarcásticamente Astoria- ¡Oh, vaya, mirad! ¡Si estoy yo aquí! A lo mejor si me preguntáis podría...
-Daphne no puede saber nada -dijo Theo-. Si lo supiese a ciencia cierta no dejaría que se acercasen a ella... ¡Está claro que Pansy sigue enamorada de Draco! Y creo haber oído que Milicent quiere intentar algo con Zabinni.
-Pero, ¿no tendría en cuenta los sentimientos de su hermana? -preguntó Lucy.
-Lo estáis haciendo a propósito, seguro... -comentó Astoria.
-Depende de cuando la pilles... Cuando están aquí un día se odian a muerte y al siguiente no pueden pasar una hora sin verse... -explicó Jack- A parte, Daphne también quiere a Pansy como si fuese su hermana.
-Pero no lo es... -añadió Archie.
-De todas maneras, ¿sabemos qué siente ella? -preguntó Lucy.
-Ahora me harán caso...
-A ver, si Archie le vio muy acaramelada con Draco y ha dicho que Kevin le salvó interrumpiendo a Blaise... -comentó Theo- Creo que es bastante obvio, ¿no?
-Aún os puedo oír, ¿sabéis? -indicó Astoria poniendo los ojos en blanco mientras ocultaba su rostro sonrojado tras su pelo.
-Pero a lo mejor se está haciendo la dura para ocultar que le gusta Blaise... -comentó Archie.
-En la Sala Común con Malfoy estaba muchísimo más receptiva que con Zabinni -explicó Jack-. Ni punto de comparación, vamos...
-¡Hola, chicos! ¡Os traemos un regalo! -gritó Taylor señalando a Charlie- Le hemos encontrado intentando ligar con unas de sexto -añadió riéndose-. ¡Era patético!
-¡No estaba haciéndolo! -exclamó él- Ellas eran las que intentaban ligar conmigo.
-¿De qué hablabais? -preguntó Roger sentándose con sus amigos.
-¡A Archie le gusta alguien y Lucy es tan cotilla como Theo! -exclamó Astoria sin dejar que sus amigos hablasen.
-En realidad estábamos hablando de... -empezó a decir Archie.
-¡Archeus! ¿Cómo es que no sabía nada? -le interrumpió Taylor- ¡Te nos haces mayor! Cuéntamelo todo ahora mismo.
-Taylor, no hay nada que... -empezó a decir Archie.
-¡Ah, no, Archeus! -interrumpió ella- Me lo vas a contar con todo lujo de detalles o mi regalo por tu cumpleaños será que veas como arranco todas y cada una de las páginas de tus libros favoritos y, después, hago que alguien se las coma. -respondió ella.
-¡No serás capaz! -gritó Archie horrorizado.
-¿Lo probamos? -contestó amenazante.
-Bueno, Tay, ya que te pones así... Antes de cargarte sus libros, por favor, déjame quedarme con alguno... -pidió  Lucy.
-Claro, con los que quieras... -respondió Taylor dulcemente- Excepto si están entre sus diez libros favoritos. -añadió volviéndose hacia Archie.
-Está bien, Tay. Te contaré todo, ¡pero deja en paz mis libros!
-¡Desembucha, Archie! -gritó ella triunfante.
Después de sonsacarle toda la información que querían y hablar incansablemente del tema, para infortunio de Archie, decidieron que se irían a sus Salas Comunes y se verían después de la cena.
Para ellos, los días transcurrían, más o menos, de la misma manera que aquel. Se veían en el desayuno, iban a clase, comían y, después, se veían otra vez. Pero, según se iban adentrando en el curso, se veían cada vez menos, ya que tenían que estudiar y hacer los interminables deberes con los que, según ellos, sus profesores decidían castigarles.
Un buen día, cuando Astoria, Taylor, Jack y Theo estaban volviendo de la biblioteca, vieron pasar a Draco por un pasillo perpendicular al que se encontraban. Les llamó especialmente la atención que fuera solo, con mucha más  seriedad de la usual.
-Últimamente se le ve mucho así... -susurró Theo.
-Hay veces que, cuando te lo cruzas por un pasillo, asusta, la verdad. -dijo Tay un poco apenada.
-Y los del equipo de Quidditch me han dicho que, algunos días, desaparece durante horas y que, a veces, ni siquiera va a clase. -añadió Jack.
Astoria miró al suelo sombría, ignorando la conversación que mantenían sus amigos. Era cierto que aún veía a Draco en privado, pero sus fortuitos encuentros se habían reducido considerablemente. También sabía que actuaba de forma extraña. Se había fijado, como todo el mundo, en sus enormes ojeras y en que había bajado visiblemente de peso. Aunque, si miraba un poco más a fondo, podía ver que sonreía más raramente que antes, que se había convertido en alguien aún más reservado y, cuando le molestaban, más arisco.
Ver así a Draco también afectaba a Astoria, ya que ella solo quería verle bien, pero cada vez era más complicado. Aunque se veían algún día a la semana y él parecía de mejor humor, seguía siendo el chico reservado que era con todos, aunque con ella siempre había sido un poco más agradable.
Cuando estaba con sus amigos permanecía ajeno a la conversación y las pocas veces que participaba en ella era de forma breve y tajante. Con Astoria hablaba un poco más y siempre trataba de halagarla, pero cada vez más a menudo se contentaba con sentarse un rato a su lado en silencio y pensativo, sobre todo mientras ella estudiaba en la biblioteca. Tras pensarlo mucho, Astoria había llegado a la conclusión de que le gustaba encontrarse con ella en la biblioteca para esconderse del resto de alumnos, de los rumores y de los profesores.
Siempre que le preguntaba qué le pasaba o por qué estaba tan raro, él se limitaba a negar todo lo que decía ella o a encogerse de hombros y responder: "Nada, ya sabes, mi padre...". Pero Astoria sabía que algo más le preocupaba.
Un rato antes de la hora de cenar, Astoria, vio a Draco entrar a la Sala Común y se acercó a él, mientras sus amigos subían al Gran Comedor .
-Hoy te he visto de lejos... -Draco se sobresaltó, pues no le había visto llegar hasta él.
-¿Y no te has acercado? -preguntó mirando fijamente a su amiga.
-No te he saludado porque parecía que ibas con prisa... -comentó apoyándose en la pared más cercana con el ceño fruncido.
-Oh, sí... -respondió nervioso- Tenía que... Enviar una lechuza a mi madre. -dijo rápidamente, acercándose a Astoria.
-Oh, bien -tenía la sensación de que le mentía, como había estado ocurriendo en las ultimas semanas-. ¿Cómo está?
-Bien -en el rostro de Draco apareció una fugaz y pequeña sonrisa-. Se siente un poco sola en la mansión, así que le escribo mucho.
-Oh, bueno... Al menos tiene un buen hijo que le consuela. -comentó Astoria dejando ver media sonrisa.
-Gracias -respondió él, imitando la expresión de su amiga-. Es agradable saber que aún hay alguien puede ver cosas buenas en mi... -añadió cabizbajo.
-Draco... -Astoria le miró a los ojos y acarició la mano del chico- Tú tienes muchas cosas buenas, aunque a veces tengas la sensación de que no es así...
-Hay cosas que no sabes, As. Cosas horribles. -respondió él secamente, separando su mano de la de Astoria.
-Pero ninguna de esas cosas puede quitarte las buenas... -susurró ella.
-Sí, lo hacen. Son terribles. -dijo en el mismo tono.
Astoria estaba empezando a sentirse realmente mal. Siempre trataba de hacerle sonreír, pero en días como aquel en los que Draco estaba especialmente pesimista y con pocas ganas de hablar, terminaba deprimiéndose también. En esos días animarle era imposible. De él no salía ninguna sonrisa y, a pesar de que quería estar a su lado, no soportaba que viese las cosas tan negras.
-Creo... Creo que debería ir subiendo a cenar -dijo mirando al suelo-. Mis amigos me están esperando. -explicó.
-Oh, sí, claro, la cena... Lo había olvidado -respondió Draco-. ¿Te importa que vaya contigo?
-No, claro que no -le miró, dedicándole una breve sonrisa-. Vamos.-dijo, ya caminando hacia la salida de la Sala Común.
Realizaron el trayecto muy juntos y en silencio, notando como la gente murmuraba a su paso. A Astoria le dio la sensación de que lo hacían más de lo normal también había notado que Draco caminaba de la misma manera que lo hacia aquella tarde, cuando Astoria y sus amigos le habían visto, pero lo hacía más lento, como intentando alargar aquel paseo. Sus manos se rozaron y cruzaron sus miradas, parados en medio de un pasillo. En las mejillas de Astoria asomaba un leve sonrojo, mientras que los ojos de Draco la miraban como estuviese viendo su belleza por primera y última vez. No mediaron palabra, pero, cuando sus miradas se cruzaron, se dijeron todo lo que necesitaban. Se miraron por unos segundos más, mientras buscaban la mano del otro para entrelazar sus dedos, como si se tratase de una necesidad. Ambos querían besarse y tener al otro tan cerca que pudiesen sentir su respiración sobre su piel, pero sabían que para la gente como ellos, la gente de su categoría, las muestras de cariño en público no eran apropiadas. Por eso siguieron caminando, aún más lento que antes, cogiendo la mano del otro como si fuera el más valioso de los tesoros, deseando perderse para no llegar nunca a su destino.
Draco se paró unos metros antes de llegar a la puerta del Gran Comedor, frenando, a su vez, los pasos de Astoria. Se miraron por unos segundos, fascinados el uno por el otro.
-Oye, antes de que te vayas...-dijo Draco rompiendo el mágico silencio que habían formado- La semana que viene hay una visita a Hogsmeade... ¿Te gustaría venir conmigo? -preguntó un poco nervioso- Ya sabes, a tomar algo en las Tres Escobas e ir o volver dando un paseo juntos y...
-Claro, me encantaría. -respondió Astoria, mirándole a los ojos, con una gran sonrisa.
-Perfecto -dijo él relajándose un poco-. Seguro que es fantástico. -añadió antes de despedirse de la chica, acariciando su mano, antes de adentrarse en el Gran Comedor.