Infiel [zhanyi]

||Capítulo 16||

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                              |Flashback |

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Hace dos años.

Yibo se encontraba en el servicio del instituto lavándose las heridas de su rodilla y sus codos, se acababa de caer en clase de educación física y unos compañeros comenzaron a burlarse de él, hasta que su mejor amiga, Andy, los mandó a callar con una simple mirada.

Ella siempre estaba ahí para él, siempre fue su apoyo incondicional en cualquier situación desde la más pequeña hasta la más grande.

Lo ayudó a salir de una relación tóxica que mantenía con un chico algo mayor que él y lo cuidaba como a un hermano, se conocían desde pequeños así que básicamente pasaron toda su vida juntos.

-Auch, como arde. -se quejó Yibo con un pequeño puchero en sus labios.

-¿Necesitas ayuda? -la voz que resonó lo asustó y se cubrió con los brazos. Si, era algo asustadizo.- Tranquilo, no te haré nada. -dijo con una sonrisa nerviosa ante su reacción.

-Oh v-vale.

Aquel chico se acerco a Yibo y le ayudó a limpiar sus heridas, creo que es de más decir que Yibo era un enamoradizo, así que le llamó la atención el chico que le ayudó sin saber que gracias a esa pequeño error de su vida le cobraría factura en un futuro.

- Hola Yibo -de nuevo ese chico se acercó a él en el baño del instituto.

Yibo saltó en su sitio por el repentino susto que le dió.

- Podrías dejar de aparecer de esa manera, ¿no? -dijo entre risas. -Me has vuelto a asustar.

-Bueno, creo que es lo que mejor se me da hacer.- también rió.-Te puedo hacer una pregunta?

-Claro.

-¿Te apetece salir hoy a tomar algo?

Yibo pareció pensárselo un poco pero después de unos segundos asintió.

-Bien, entonces nos vemos esta tarde a las cinco en la cafetería cerca del colegio.- y se fue sin más.

Yibo salió del baño después de unos minutos y se encontró con Yang zi, estaba a punto de decirle que alguien lo había invitado a salir pero Yang zi fue más rápida que él.

-¡Bo!-le llamó. - No podré salir contigo esta tarde se me olvidó que tenía una cita con mi novio- dijo juntando sus manos en forma de disculpa.

-Oh vaya, pero cuando piensas presentarmelo -dijo con un mohin.

-Cuando sea posible siempre que queremos salir los tres juntos no puedes.- respondió dándole un toque en la nariz con su dedo de forma tierna.-Ay, me tengo que ir a clase ya, mañana te cuento que tal, adiós.- se despidió con un abrazo y se fue rápidamente.

Yibo se preparó para su salida y ahora que lo pensaba no sabía ni el nombre de la persona que lo había inventado.

Vió su reloj y solo le quedaban diez minutos, así que se apuró y salió rápido de casa para ir a la cafetería donde habían quedado.

Cuando llegó pudo ver al chico en una de las mesas del final mientras miraba su reloj algo nervioso.

-Hola -saludó sentándose frente suyo.

-Hola-sonrió y saludo de igual manera.

-Me has invitado a salir y hasta ahora no me has dicho tu nombre.

-Oh cierto, me llamó Darren - sonrió. -Y tu eres Yibo, ¿no?-dijo con una sonrisa ligona.

-Sí. - sonrió tiernamente.

Darren se comenzó a acercar a él y es que solo tenía un propósito con Yibo por una apuesta que debe cumplir lo más antes posible, miró su reloj unos segundos antes de comenzar un beso con él.

Mientras que una chica que acababa de entrar a la cafetería los veía haciendo que su corazón se rompiese en un montón de pequeños pedazos saliendo de ahí sin querer ver más.

Comenzó a llorar por la senda de traición que sentía.

Pero sabía que Yibo no tenía la culpa, él no sabía que él era su novio, ¿Cierto?

Pasaron los días y Andy había estado algo distante con Yibo, cada vez que lo miraba no podía parar de pensar en que había besado a su novio.

Por esa razón fue a hablar con él de lo ocurrido.

-Darren. -lo llamó con voz dura.

-Oh, bebé. Cuantos días sin verte. -dijo intentando besarla.

-No te hagas, ¿si? Te vi con Yibo en la cafetería, lo hiciste a posta ¿no? Quedaste conmigo a la misma hora que él para hacer eso, ¿verdad? -dijo dándole pequeños golpes en su pecho.

-Oye vamos, tranquilizate. No te enojes conmigo, él sabía que era tu novio si no hubiese querido no me hubiera dejado. -dijo para librarse de ella y que todo su odio recayera sobre Yibo.

-¿Q-qué?-preguntó dolida.

-Lo que escuchaste tu querido amiguito lo sabía, seguro ahora se debe estar riendo de ti.

-Sabes qué, terminamos ahora, no quiero saber nada de ti.

-¿Qué? ¿Por qué solo yo estoy siendo castigado?

-Lo que se le viene a Yibo no es nada bueno así, que no te quejes. -dijo con los ojos llorosos, conteniendo sus lágrimas. - él sentirá el mismo dolor que yo.