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El anuncio de una nueva misión salio para todos en el medio de comunicación que cada uno tenía. El mensaje llamo la atención de todos los sobrevivientes, al ver una nueva aventura justo en sus pantallas. Pero tan rápido como capto su atencion se fue al ver donde se encontraba. 

"Nueva recompensa en: XXX XX XXX"

El lugar se encontraba más lejos de lo que cualquiera se atrevería a ir por la gran cantidad de tiempo que perderían en el viaje para tal vez luego encontrar una mierda, así que con rapideces fue descartada por todos los grupos, a excepción de dos de ellos que al parecer no tenían nada más entretenido que hacer, así que ¿qué mejor que perder el tiempo en una recompensa? 

[...]

Iba con arma en mano atentó ante cualquier amenaza que podía aparecer de la nada como era común en aquel lugar donde habitaba junto con sus compañeros. Dos de ellos se habían quedado en su hogar para protegerlo a pesar de que este fuera inexpugnable, tal y como le gustaba mencionar al de mechón. 

Reborn: Tened cuidado -advirtió hacia el par que lo seguía, que era conformado por; Focus y Biyin, mientras mataba a un zombi que se había atravesado en su camino-

Saco el aparato donde las coordenadas habían sido mandadas para observar que tanto de camino les quedaba. Según él y su gran orientación, solo bastaba avanzar un poco más para poder llegar a su recompensa por la que habían viajado desde tan lejos. 

A la distancia pudo ver gran cantidad de enemigos, y junto con ellos unos cofres en compañía de una sola antorcha para poder hacerle las cosas más fáciles a los que iban hacia las coordenadas mandadas para cada recompensa. 

Reborn: Encargaos vosotros de los de arriba, yo de los de abajo. -seguido de dar esa orden a sus compañeros fue hacia la base de la montaña donde se encontraban los monstruos de los que él se aria cargo- 

Atravesó a uno de los zombis con su espada siendo este solo el primero de los varios que se encontraban ahí como una dificultad extra para conseguir la recompensa. Dio vuelta al escuchar como un arco era tensado, listo para dispara en su contra, no le daba tiempo para defenderse del ser hecho do huesos. Pronto le esperaba una flecha atravesada en una parte de su cuerpo. 

El esqueleto callo al suelo frente a él dejándolo desconcertado, pero ese sentimiento se fue al ver al que se encontraba a espaldas del monstruo con arco en mano y con una sonrisa arrogante adornando su rostro, junto con sus típicas gafas oscuras. 

Spreen: Uy amigo, me llego a tardar un poco mas y no la contas -río por lo bajo mientras dejaba ver los colmillos que tanto elogiaba el castaño de su grupo, haciéndole soltar un gruñido- Tenes suerte. 

Reborn: Yo podría haberlo hecho solo. -cogió la flecha que se encontraba incrustada en el cráneo de aquel ser para luego volver su vista al contrario- No soy como tú, que necesito a alguien que me este cuidando las espaldas. No necesito ayuda. 

Spreen: Podes decir lo que quieras, pero te salve la vida. Deciselo a Auron. -dio unos pasos acercándose al otro mientras este fruncía el ceño al escuchar el nombre de su compañero salir de la boca de ese oso a pesar de saber la relación que estos mantenían- O mejor se lo digo yo. ¿Donde ésta? 

Reborn: Se quedo en la base. 

Spreen: ¿Lo dejaste solo pelotudo? ¿Vos pensas? -frunció su entre cejo al enterarse del paradero de su novio. Se acerco al pelinegro contrario enfadado por la decisión que había tomado- 

•One Shot || Spreenplay•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora