•One Shot || Spreenplay•

-•Embarazo•-

Auron se encontraba en frente del espejo que su baño poseía, con su pancita descubierta, observando lo redondito de está mientras dejaba pequeñas carias. No se encontraba seguro si es que se veía bien.

Siempre había sido alguien coqueto y que cuidaba su apariencia, pero sobre todo que se encontraba cómodo con ella, pero desde que su barriga había crecido ya no se encontraba con la misma seguridad. No le disgustaba su vientre, por supuesto que no, si no todo lo contrario, le gustaba, pero no sabía si a los demás también, específicamente a su pareja.

Nuevamente esos pensamientos sobre que al oso le disgustaba su pancita volvieron a aparecer, haciendo que su entrecejo se frunciera por la tristeza. Tal vez le había dejado de gustar al híbrido por su barriguita y eso le causaba tristeza. Amaba a Spreen y que este dejara de hacerlo por su cuerpo le dolía.

No pudo soportar más y dejo salir las lagrimas que había contenido por unos cuanto segundos en los que había estado en su mente, imaginando que su osito ya no le quería por su pancita. Tanto había estado en su mente que ni cuenta se había dado de los llamados que el Argentino daba por su hogar en busca de él.

Spreen: ¡Flamita! ¿donde estás? -paro cerca de la puerta del baño de la habitación que compartían, notándola entre abierta- ¿Flamita?

Cogió el pomo de la puerta y con delicadeza abrió de poco a poco la puerta, asomando su cabeza para tener visión de lo que ocurría dentro de la habitación. La imagen que vio provoco una presión en su corazón. Su Auron se encontraba llorando frente al espejo mientras tenía su barriguita descubierta y con una mano en ella.

Abrió la puerta por completo al ser consciente de la situación. Auron dirigió su mirada a su pareja al verlo en la puerta del cuarto de baño con una expresión que lo dejo confundido.

Spreen: ¿Qué haces flamita? ¿Por qué lloras? -con lentitud se acerco a su pareja, colocando sus manos en las mejillas contrarías provocando más su llanto, alarmándolo- ¿po-por qué lloras?

Auron: Ya-ya no me quieres -hablo entre cortado gracias a su llanto, que aumento al decir dichas palabras-

Spreen: No no, estás muy equivocado. Yo te amo con todo mi ser flamita. No digas eso. -acerco su rostro al del menor que no paraba de llora aún con sus palabras, provocando que sus nervios aumentaran al no poder consolarlo, y más aún al no saber el porque del llanto de su pareja-

Auron: No es cierto. No me amas. -cerro sus ojos dejando de ver al oso que empezó a temblar al ver la acción del castaño-

Spreen: No-no digas eso flamita. Yo te amo de ve-verdad. No digas eso po-por favor -sus nervios poco a poco se iba haciendo más presentes y su voz lo traicionaba. Escuchar a la voz del oso temblar hizo que abriera sus ojos nuevamente viendo la mirada aterrada que este le daba-

Auron: ¿Osito?

Spreen: No digas eso por favor flamita. Sos lo mejor que me a pasado. No digas eso. -se permito acercar más su rostro al contrario y dejar un beso corto pero lleno de amor en los labios contrarios- ¿Por qué lloras?

Auron: Es que... yo -bajo su mirada con vergüenza, tal vez había sido un poco gilipollas al llorar por la simple tontería de pensar que su pareja ya no lo amaba, pero es que el embarazo le había afectado-

Spreen: Habla, no tengas vergüenza de llorar por algo. Decí que te a hecho llorar flamita. -agarro del brazo al menor y se acerco al váter para luego sentarse ahí con su pareja en el regazo tomando al heterocromático de su cintura-

Auron: ¿Te...te gusta mi pancita? -inconscientemente llevo su mano a su vientre sintiendo su barriguita redondita donde se encontraba una nueva vida-

Spreen: Por supuesto que me gusta. Ahí llevas al futuro dueño de la pollería. -coloco su mano encima de la de su pareja que se encontraba en su vientre, sonriendo ante el pensamiento de que ahí se encontraba el fruto de su amor-