Capitulo 2: Equipo.
El brillo de la luna llena iluminaba todo japon.
"Lo siento", las palabras salieron de los labios de makima, directos hacia los oídos del rubio.
Naruto no tuvo tiempo de asimilar lo dicho por la pelirroja, cuando sus ojos de abrieron de golpe y sangre salió de su boca como cascada.
Dando unos cuantos pasos hacia atrás, los orbes dorados miraron con calma al hombre frente a ella.
Sintiendo un vacío en su abdomen, lentamente naruto bajo su mirada, observando como tenia un gran agujero donde se suponía debería estar su abdomen.
Girando ligeramente su cabeza, la mujer de cabello rojo, contempló la luna con un sentimiento indescriptible, brillando tenuemente en sus ojos.
"La luna esta hermosa, ¿no lo crees?", hablo, estando completamente tranquila, y sin esperar una respuesta, giro todo su cuerpo comenzando a caminar, alejándose del lugar.
Los orbes azules contemplaron momentáneamente la espalda de makima.
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"¿Estás dispuesto a todo, cambio de no morir?", una enigmatica voz, pero a la ves conocida por Naruto, hablo, estando muy cerca de el.
Sin pensarlo mucho, el respondió.
"Si".
"Dame tu mano ningen", la voz orden, y utilizando cada gramo de fuerza que aun le quedaba, el ojiazul le estiró su mano.
Luego, un dolor indescriptible invadió su cuerpo.
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El silencio fue aterrador, claro que, todo a su alrededor esta en llamas, sientos y sientos de cuerpos yacían por todos lados, pero, los orbes azules solo contemplaban do cuerpos en específico, o bueno, lo que quedaba de ellos.
Allí, uno a lado del otro, la cabeza de midori estaba siendo sujetada protectoramente por el brazo de chairo, el cula le hacía falta más de la mitad de su cuerpo.
Todo su entorno se tralentizo, cuál quier sonido, sus se todos los silenciaron.
Y con lentitud, las lágrimas comenzaron a caer de sus desorientados orbes zafiros, pasando por sus mejillas, hasta caerse al suelo.
Todo su cuerpo esta a paralizado por el shock, el aliento comenzó a faltarle, ocasionando que lentamente empezara a hiperventilarse.
Cerrando su boca con fuerza, apretó sus dientes hasta el punto en el éstos mismo se agrietaron.
Su cuerpo ya pudo más, y cayo de rodillas, apretando su puño derecho, golpeo el suelo con tal fuerza, que el concreto de bajo, se destruyó por completo, y sangre comenzó a brotar por su nudillos ahora lastimados.
Y en ese momento, el dolor le otorgó una segundo de lucidez, abriendo so ojos con sorpresa, una sola persona vino asu mente.
"MAKIMA".
Una ira que nunca habia sentido antes, incluso cuando habia visto a demonios matar a otras personas.
Pero antes de que intentará algo, todos los acontecimientos del día, por fin lo alcanzaron, y se derrumbó en el suelo, estando completamente inconsciente.
