Homophobic.

01.

-Iván, un hombre de 34 años. Siempre tan serio, con una vibra realmente pesada, intimidaba por donde iba, sobre todo por su estatus, la gente solía temer de tener problemas con él porque sabían que él siempre ganaría. Pero a pesar de eso Iván tampoco era una mala persona, aunque tenía un gran defecto, su homofobia.-

ㅡ¿Esa chica va a ser mi secretaria?-Preguntó mientras tomaba su café.-No se ve muy eficiente...

ㅡ¿No era un chico?

ㅡEs una chica de cabello corto.-Dejó la taza de café sobre la mesa.-Pero, no voy a juzgarla antes de tiempo.

ㅡEs muy linda, una aventura con tu secretaria podría ser divertido, ¿no? por favor decí que no así puedo estar yo con ella.-Bromeó su amigo Nicolás, también compañero de trabajo.-

ㅡNo digas pavadas por favor Nicolás, si es muy linda, pero nunca saldría con alguien del trabajo.

ㅡAh, sos un aburrido.

ㅡLo se... Se ve perdida, ¿qué buscará?-Observó como aquella chica caminaba de un lado a otro y daba vueltas en círculos mientras miraba a su alrededor.-Se ve demasiado... ¿Infantil? realmente siento que será un desastre.

ㅡDeja de mirarla mal, solo llamala, seguro te busca a vos.

-El mayor rodó los ojos y comenzó a caminar hasta la chica, más de cerca pudo ver que aquellas facciones femeninas ya no parecían serlo tanto, aunque seguían siendo suaves, no lucía como una chica.-

ㅡHola.

ㅡ¡Ah! hola, buenos días ¿usted es el señor Buhajeruk?-Dijo levantando la mirada mientras sostenía un bolso en una de sus manos.-

ㅡSos... Un chico.-Realmente quería concentrarse en eso, pero más le sorprendía que aquel chico había pronunciado su apellido correctamente siendo la primera vez que lo veía.-Si, soy yo, ¿por qué?

ㅡVine por lo del trabajo de secretario, usted me acepto en la entrevista online, soy Rodrigo Carrera, un gusto. Tomaré la semana de prueba.-Sonrió amablemente.-

ㅡOh, bien, un gusto Rodrigo, vamos ir a mi oficina para que pueda darte el horario con las labores de la semana de prueba.

...

-Fueron hasta la oficina. Iván se sentó en su silla y saco algunas carpetas, busco entre algunos documentos hasta encontrar unos papeles los cuales le entrego al castaño. A decir verdad, le disgustaba la idea de trabajar con un chico afeminado, eso era repugnante para él.-

ㅡBien, solo es eso, ¿podrás hacerlo?-Ser el secretario de Iván era bastante difícil, por eso casi siempre cambiaba de secretario o secretaria, además de que para serlo también debías tener conocimiento matemático avanzado y casi ser su sirviente, algunos hasta abandonaban en plena semana de prueba.-

ㅡClaro que si, es facilisimo.-Tomó los papeles, muy sonriente. Iván estaba desconcertado, ¿en serio estaba sonriendo luego de haber leído todo lo que debía hacer siendo secretario de Iván?-

ㅡ¿En serio? ¿no hay nada allí que se te complique?

ㅡNo, nada, se mucho sobre matemáticas, y se organizar muy bien todo. Además, no tengo problema con lavar su ropa ni hacerle la comida, claro que no es a lo que estoy acostumbrado, pero usted es mi jefe ahora.

ㅡEso... Lo veremos.-Aclaró su garganta.-Comenzarás hoy, supongo que no tenes inconveniente alguno con lavar mi camisa ahora, le cayó un poco de café.

ㅡClaro que no, ¿donde esta?

ㅡAquí.-Saco una camisa de un pequeño placar y se la entrego. Eso no era "un poco" de café, era un vaso lleno.-Y luego podrías ordenarme la oficina y organizar mi horario, gracias... Ah, traeme un café caliente bien amargo, tomá.-Le dio unos cuantos billetes.-Ahora así gracias.-Abandono la oficina.-