Aventuras de La Rampa

3. El Engaño

Las horas pasaban y las chicas tenían un presentimiento de que algo no iba bien, pero decidieron dejarlo correr. Mientras tanto, Chris, que salió a tomar el aire, se encontró con alguien en los jardines nevados.
Chris: Oh, hola, Yonas.
Yonas: Hola.
Chris: ¿Qué haces aquí a estas horas?
Yonas: Pues tomar el aire, ¿y tú?
Chris: Igual…
Hubo un silencio incómodo, pues aunque Chris intentara ser amigable, Yonas respondía tajantemente.
Chris: Bueno y… ¿tienes novia?
Yonas: ¿Novia? No, pero estoy interesado en alguien…
Chris: ¡Ole! ¿Y quién es? ¿Va a nuestra clase?
Yonas: Pues sí, es May.
Chris: ¡¿QUÉ?! ¡MAY ES MI NOVIA!
Yonas: JAJAJA… Te voy a contar una cosa: Yo le gustaba antes de que tú llegaras.
Chris: ¡ME VALE MIERDA! ¡No te acerques a ella o te arrepentirás de que nos hayamos cruzado!
Yonas: JAJAJA. No te vas a librar de mí tan fácilmente. Haré lo que sea para que os separéis.

Los ojos de Chris estallan de ira y empieza a golpear a Yonas en la cara. Ellos empezaron a pelear, pero a pesar de los esfuerzos y golpes de Yonas, Chris y su ira eran más fuertes, por lo que Yonas estaba resultando más herido que Chris. Sin embargo, no pudieron seguir por mucho más tiempo ya que escucharon una voz familiar.
May: ¡CHRIS! ¡¿QUÉ HACÉIS, POR QUÉ OS PELEÁIS?!
Chris: ¡May…!
Él soltó de inmediato a Yonas, pues lo tenía agarrado por el cuello de la camiseta.
Yonas: ¡Ayúdame! Chris se ha vuelto loco.
Empezó a hacerse la víctima, solo haciendo que a Chris le hirviera más la sangre.
Chris: May, no le hagas caso. ¡Te juro que empezó él! Nos quiere separar, ¿lo sabías?
La chica no sabía a quién creer, pues por un lado tenía a su novio, pero por el otro tenía a un buen amigo, sin embargo, Yonas parecía más herido. Yonas se puso detrás de May, sonriendo, usándola a ella como escudo, y poniéndola en una situación incómoda.
Chris: ¡¿En serio?! ¿VAS A AYUDARLE?
May: ¡Tú estabas encima de él, golpeándolo! ¡Tenía que separaros!
Chris: ¡Pero no le defiendas a él!
May: ¡Pero le estabas haciendo mucho daño! ¡CASI LO MATAS!
Yonas reía silenciosamente, burlándose de Chris. Chris los miraba incrédulo.
Chris: Gracias, eh. MUCHAS GRACIAS POR CREERLE A ÉL.

Chris se dió la vuelta y corrió dentro del hotel.
May: ¡ESPERA..!
Ya era tarde. May se dio la vuelta, mirando a Yonas.
May: ¿Estás bien?
Yonas: Sí, ahora sí.
May: Me alegro. ¿Por qué habéis peleado?
Yonas: Pues estábamos jugando un partido de fútbol, él perdió y yo me burlé un poco. Él se lo tomó mal y pues eso…
May: Oh…entiendo. Chris normalmente se toma las cosas a broma, no sé qué le pasó en ese momento.
Yonas: Bueno, suele pasar. Gracias igualmente.
Yonas se acercó a May mientras hablaba y la besó en la mejilla sin previo aviso. Ramona, quién pasaba cerca de ellos, les sacó una foto en el acto. Él sonrió. May rápidamente lo empuja y le abofetea.
May: ¡¿QUÉ HACES?! ¡SABES PERFECTAMENTE QUE TENGO NOVIO! ¡Chris tenía razón!
Yonas: Eso ya lo veremos…

May se da la vuelta y empieza a buscar a Chris. Ramona se le acercó a Yonas y le mostró la foto antes de difundirla a toda la clase. May buscó a Chris por todas partes, pero sin éxito. Mientras tanto, Chris estaba sentado en la terraza del último piso del hotel cuando le llegó un mensaje cuyo remitente era Ramona. Al abrirlo, vio la foto y su corazón estalló en pedazos.
Chris: ¿Cómo ha podido hacerme esto…?
Chris se quedó un rato allí sentado intentando asimilar la situación actual. May subió lo más rápido posible a la habitación y al entrar, sus amigas ya habían visto la foto.
Lya: May… ¿Qué es esto? ¿Estás bien?
May: ¡OS JURO QUE NO FUI YO! ¡Él me besó, es todo su culpa!
Lya: Tranquila, te creemos.
Olivia: Eso.
May: ¿Quién ha sacado la foto…?
Aymara: Ha sido Ramona.
Mimi: Nos la ha mandado a todas.
May: Entonces… Oh no.
Laura: Efectivamente. No tardará en venir.
Poco después, se escucha alguien llamar a la puerta y Lya se levanta y camina hacia la puerta para abrir. Eran Jamal, Patricio y Teodoro, amigos cercanos de Chris.
Lya: Oh, hola. ¿Todo bien? Supongo que a vosotros también os habrá llegado la foto.
Jamal: Pues sí, por eso veníamos.
Patricio: ¿Qué ha pasado con eso?